Milenio/ Redacción

Que Marcelo Ebrard prepara un acto masivo para su cierre de recorridos en pos de la candidatura presidencial de Morena el domingo 27 de agosto y eligió como escenario la Arena Ciudad de México, con capacidad para más de 22 mil asistentes y que fue inaugurada en la alcaldía Azcapotzalco en 2012 por el propio entonces jefe de Gobierno. En esta plaza se han presentado artistas como Miley Cyrus, Avril Lavigne, Katy Perry, Bruno Mars y Deep Purple, entre otros.

Que el gran ausente en el cierre de filas del PRI con Beatriz Paredes fue Enrique de la Madrid, ex secretario de Turismo, quien de última hora canceló su asistencia a la reunión donde toda la estructura del tricolor dio su respaldo a la senadora de cara al inicio de la última etapa del proceso interno del Frente Amplio por México, y a unos días de que el ex funcionario quedara fuera de los finalistas. Anteayer, hay que recordar, todo era muy civilizado, palmaditas y buena ondita. ¿Qué pasó?

Que después de la renuncia de Santiago Creel como presidente de la Cámara de Diputados para competir por la postulación presidencial del Frente Amplio por México, la también legisladora panista Noemí Berenice Luna asumió la responsabilidad a la cabeza de la Mesa Directiva en el Palacio de San Lázaro, la cual, por primera vez en la historia, quedó integrada solo por mujeres.

Que la fracción de Morena en la Cámara de Diputados celebrará el 31 de agosto y 1 de septiembre su cónclave para definir la agenda legislativa, aunque esta vez lo hará sin Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Ricardo Monreal, quienes por esas fechas estarán impedidos de hacer declaraciones y a la espera de la encuesta que definirá al virtual abanderado presidencial.

Que en su último acto formal como presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, el panista Santiago Creel Miranda solicitó a la Corte dar atención prioritaria a la acción de inconstitucionalidad contra reformas al Conacyt, aprobadas por la mayoría de Morena y aliados. Recordó que en ese cargo vivió momentos difíciles que, incluso, ameritaron varias peticiones de remoción por parte del grupo mayoritario, pero aseguró que nunca se sometió al poder de ningún partido. A ver cómo le va ahora entre los suyos.