Las marchas de los miembros del Poder Judicial realizadas ayer mostraron dos elementos de la mayor importancia y una consecuencia no menor:
En un frenético sprint por alcanzar el segundo lugar e ir a la vuelta definitiva por la Presidencia de Argentina, la candidata de centro-derecha Patricia Bulrich cerró campaña con un llamado a sus compatriotas a no dar “un salto al vacío” con Javier Milei.
Qué manera de adornarse los dirigentes de Morena con el cuento de que combaten “el derroche” en el Poder Judicial, y por eso le quitan 15 mil millones de pesos.
Para derroches, la borrachera con petróleo.
Por las señales que manda el Frente Amplio, van a entregar lo que tienen al alcance de la mano: la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México.
Arturo Zaldívar es el ariete del Presidente para destruir la Corte.
Bueno, ha sido un peón para todo.
El partido del gobierno está más endeble que nunca.
Juan Domingo Perón, uno de los padres del populismo en América, tenía una cordial curiosidad por Mussolini y –que sepamos– no se debía a que su nombre fuera el mismo de Benito Juárez.
La próxima semana será la primera vuelta de las elecciones presidenciales en la cuna del populismo en América, y el candidato puntero es un furioso populista de derecha.
Estamos presenciando hechos que preludian el derrumbe de la gobernabilidad en el país, y en la oposición no hay una voz que asuma el liderazgo para frenar el deterioro.
¿Y Xóchitl?, es la pregunta.
El Partido Republicano, el gran partido estadounidense, perdió su identidad y ahora perdió su liderazgo en el Congreso porque entregó su alma a un populista y demagogo sin principios, Donald Trump.