La pregunta parece una broma, y de hecho lo es, porque estuvimos ante unas primarias de Estado.
El Presidente puso las reglas de la elección en Morena.
La pregunta parece una broma, y de hecho lo es, porque estuvimos ante unas primarias de Estado.
El Presidente puso las reglas de la elección en Morena.
Hoy por la tarde se dará a conocer que Claudia Sheinbaum Pardo será la candidata presidencial de Morena, porque así lo decidió López Obrador.
Su triunfo en las encuestas, que será real, se debe a la profunda inequidad de la contienda.
El impacto de la candidatura presidencial de Xóchitl Gálvez ha sido devastador para el grupo político que gobierna el país y su pretensión transexenal.
Las grandes decisiones de la dirigencia de Dante Delgado en Movimiento Ciudadano han servido para apuntalar a Morena en los momentos cruciales.
De haber ido en alianza con PAN-PRI y PRD en las elecciones intermedias, hoy no estaríamos con la presidenta del INE recibiendo instrucciones de Palacio Nacional en reuniones privadas.
Ir a unas elecciones con boletas y en urnas el próximo domingo era un acto de ingenuidad temeraria, que posiblemente se pagaría con la ruptura del Frente Amplio.
El Presidente no ha tenido empacho en abrir la chequera “del pueblo” para pagar los sobrecostos de la refinería en Dos Bocas, que pasó de 8 mil millones de dólares a 10 mil, luego a 12 mil, y la semana pasada a 16 mil millones de dólares. Terminará costando 22 mil millones de dólares y el mejor negocio para la nación será cerrarla.
La votación en la Suprema Corte, que autorizó al Inai sesionar con cuatro integrantes, exhibió el talante mojigato del gobierno más opaco y corrupto de este siglo.