Incognitapro

Milenio Diario

TRASCENDIÓ

Trascendió

QUE en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, que encabeza Alfonso Durazo, atribuyen más a ignorancia que a mala fe el intento de los detractores del gobierno para desacreditar a los militares y a los marinos, pues el acuerdo que faculta a las fuerzas armadas a tomar funciones policiacas fue aprobado por los legisladores de todos los partidos hace más de un año, el 26 de marzo de 2019, y nadie frenó lo que llaman ahora “militarización” ni la evocan cuando Ejército y Armada emprenden tareas de protección civil y apoyo social a la población.

EN PRIVADO

El regreso del Ejército que nunca se fue

Iré al cielo, me convertiré en viento y entre las nubes, volaré por ti.
Florestán

Siendo Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador participó en Tercer Grado, y en mi turno, le pregunté sí ya con ese carácter había obtenido información de seguridad sobre la necesidad de mantener al Ejército en funciones contra el crimen organizado.

DUDA RAZONABLE

Día 54: regresar será lento y de miedo

No son buenas noticias las que llegan del mundo. Países que habíamos creído que con mayor éxito habían hecho frente a la primera ola del virus han vuelto a sufrir en el momento que relajaron las medidas de confinamiento como Corea del Sur. Y otros, que ya han sufrido suficiente, parecen no haber salido: ayer fue un mal día para Italia y España, quienes comenzaban a explorar la nueva normalidad.

DÍA CON DÍA

La epidemia y los gobernadores

La epidemia del coronavirus no pasará en vano sobre ningún aspecto de la vida pública.

Uno de sus efectos visibles está siendo la autonomía con que distintos gobiernos locales se han conducido ante ella, revelando en su prisa que el reloj de sus urgencias no coincide con el ritmo ni con las prioridades del gobierno federal.

EL ASALTO A LA RAZÓN

Insana obsesión por el Tren ‘Maya’

Menos de una semana después de que un juez federal otorgó un amparo a indígenas chiapanecos para que se suspendan las obras del “tren maya” en el tramo de Palenque para “salvaguardar la salud del pueblo ch’ol” (La Jornada del 9 de mayo) y cuando México se debate en la cresta de la pandemia, el presidente López Obrador se dispone a viajar al sureste para supervisar los trabajos.

EN PRIVADO

El trauma pospandemia y confinamiento

El futuro ya no volverá a ser lo mismo.
Florestán

Ayer en Palacio Nacional se anunció el cronograma oficial para volver a lo que llamaron Nueva Normalidad, cuando se atraviesa el momento más crítico y letal de la pandemia que nos ha enseñado que del virus no sabemos nada, solo que llegó para quedarse, y que nos ha recordado dramáticamente la fragilidad del ser humano, ya perdido en la arrogancia y en la ausencia de los valores elementales.

DUDA RAZONABLE

Día 53: ¿por qué hacerle eso al Ejército?

En 2011, en el momento pico de la violencia durante el sexenio de Felipe Calderón, el Ejército tenía movilizados a poco más de 50 mil elementos haciendo labores de seguridad pública.

Estos se sumaban a los más de 20 mil policías federales de la Secretaría de Seguridad Pública, más una decena de miles de marinos.

Al final de su sexenio, el presidente Enrique Peña Nieto había igualado las cifras de su antecesor en cuanto a movilización del Ejército en labores de seguridad.

DÍA CON DÍA

Un gobierno sujeto a revisión constitucional

La votación contra la llamada ley Bonilla nos recuerda lo mucho que le falta juzgar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre decisiones de este gobierno.

Se diría, por la simple acumulación de fallos pendientes, que vivimos en una especie de provisionalidad constitucional. Están impugnadas ante la Corte, y ésta debe resolver si son constitucionales, las siguientes leyes recientes:

EL ASALTO A LA RAZÓN

¿Otro gran crimen sin consecuencias?

Por absurdo que parezca, quienes maquinaron la extinta ley Bonilla pueden quedar impunes, por más que hayan cometido un “fraude constitucional”, según lo definió el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia, Arturo Zaldívar.

Lástima, eso no está tipificado como delito.

Pero hay un recurso mucho más justo que un improbable “juicio político”: la persecución penal.