Trágica sucesión de errores en el atentado del EI.
Dos hermanos, uno de ellos buscado por "terrorismo" y ambos con largos historiales por crímenes violentos, fueron identificados en Bruselas como los atacantes suicidas, mientras funcionarios de seguridad fueron acusados de haber perdido una serie de oportunidades para detener a los atacantes antes de que llevaran a cabo su mortífero plan. Brahim el Bakraoui, de 29 años, y su hermano Khalid, de 27, fueron identificados como dos miembros de un equipo de cuatro atacantes que detonaron bombas en el aeropuerto y la estación del Metro.