Esbocé ayer la ruptura que puede darse, que se ha dado históricamente, entre un candidato oficial a la Presidencia y un presidente que quiere imponérsele como jefe transexenal.
Me pregunto ahora qué sucedería entre un presidente con esa vocación de absolutismo transexenal y el triunfo de una candidata opositora, como Xóchitl Gálvez.