El Universal/ Héctor de Mauleón

AMLO y el narco

El video ha circulado viralmente desde el fin de semana previo al Primer Informe de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. Durante una gira por el sur del país, un grupo de ciudadanos se acercó a la camioneta del mandatario para pedirle que enviara al Ejército a detener la ola de violencia que desató el crimen organizado.

—No se dialoga con agresores. Se garantiza un derecho inmediato. Manden al Ejército inmediatamente. No tenemos armas… —le dijo al presidente un hombre desesperado. Una mujer lloraba detrás de este. López Obrador contestó:

Entre los escombros de una calle sin pavimentar

Antes de morir, logró decir que se llamaba Karla. Una patrulla de la policía municipal de San Luis Potosí la encontró deambulando de madrugada por la colonia Las Piedras, al norte de la capital del estado.

Se trató de una visión pavorosa. Karla gemía de dolor en la oscuridad. Se había arrancado la blusa. Los médicos del Hospital Central constataron más tarde que la joven presentaba quemaduras en 60 por ciento del cuerpo.

Los taxistas violadores de La Condesa

Su última víctima fue muy valiente. Había salido a las cuatro de la mañana de un bar de la Avenida Nuevo León, en la colonia Condesa. La acompañaba un amigo. Los dos habían bebido de más.

Todo se confabuló en su contra. El Uber que pidieron se fue sin ellos, pero les cobró el viaje. Después de esperar inútilmente la llegada de otro, caminaron hacia Tamaulipas.

El fracaso de Claudia Sheinbaum

En el primer semestre de 2019 el gobierno de Claudia Sheinbaum no mejoró la vida de los habitantes de la Ciudad de México. Por el contrario, el porcentaje de personas que se sintieron inseguras en la metrópoli (92% en el poniente capitalino) rebasó con mucho el porcentaje nacional (73.9%).

A lo largo de ese semestre, los capitalinos atestiguaron cómo se hundía la metrópoli. Sus vidas atravesaron diariamente un abismo de violencia, de muerte, de crimen desbordado.

Fueron seis meses desastrosos.

No olvides a Nancy

El estruendo que desataron en la ciudad de México las marchas feministas de la semana pasada ahogaron mediáticamente su caso. Nancy Flores bajó el sábado 10 de agosto, a las tres de la tarde, desde una colonia marginada de la delegación Magdalena Contreras. Era cumpleaños de uno de sus hijos, pero ella debía acudir a una terapia en la avenida Obrero Mundial.
No se sabe si llegó a la cita.

Sus familiares desconocen el nombre del médico que la trataba, así como la ubicación exacta del consultorio.

La pugna de Rosario y AMLO

El día de la audiencia, Rosario Robles comió en su casa de Los Reyes, Coyoacán, con un grupo de colaboradoras. Su abogado pasó por ella más tarde. Robles entró al juzgado “pensativa y en control”, según uno de sus allegados.

Acababa de volver al país, procedente de Costa Rica. Le habían informado que acababa de llegarle un citatorio y decidió dar por terminadas sus vacaciones, preparar cuanto antes su defensa.

Que El Carrete diga lo que sabe sobre Ayotzinapa

“Yo les juro por la memoria de mi padre que no tengo nada que ver con los normalistas [desaparecidos]”, escribió Santiago Mazari, El Carrete, líder de Los Rojos, en una serie de mantas abandonadas en seis municipios del estado de Morelos a principios de 2015.

El fin de un reinado sangriento

Intervenciones telefónicas, efectuadas alrededor de un grupo de proveedores de marihuana y amapola, indicaron a la Policía Federal que sicarios de Juan Castillo Gómez, El Teniente —uno de los jefes del narco en la sierra de Guerrero— le estaban sirviendo de escudo a uno de los hombres más buscados, el célebre Santiago Mazari Hernández, alias El Carrete, líder de Los Rojos.

Barbarie para no olvidar
Algunos están totalmente desnudos; a otros, los verdugos los despedazaron vestidos. Entre las víctimas había meseros, comerciantes, un músico, un pasante, un cerrajero, un ama de casa... 19 cadáveres en total

Las fotos son dantescas: de bolsas de plástico negro emergen seis cuerpos humanos. Ninguno de ellos tiene cabeza, ni pies, ni manos.

Algunos están totalmente desnudos; a otros, los verdugos los despedazaron vestidos.

Un amparo para no morir

El pasado 23 de junio, la unidad de hemodiálisis del Hospital de Especialidades del Centro Médico Siglo XXI se inundó tras una fuerte lluvia. El agua se filtró por los techos. Los plafones terminaron en el piso y algunas de las máquinas de hemodiálisis se estropearon.

Dos días más tarde, personal de enfermería informó a los pacientes con insuficiencia renal crónica que no había máquinas suficientes para que todos pudieran recibir tratamiento: solo quienes presentaran altos niveles de potasio serían atendidos.