El partido Morena respaldó la decisión, alegando que España no ha respondido a la solicitud de disculpas por los agravios históricos de la conquista
Mientras diputados de oposición lamentaron la descortesía de no haber invitado al rey Felipe VI de España a la ceremonia de protesta de Claudia Sheinbaum como presidenta de México, Morena apoyó dicha decisión debido a que no respondió a la solicitud de disculparse por los agravios cometidos durante la conquista, hace cinco siglos.
Sin embargo, Ricardo Monreal confió en el reencuentro de México y España, una vez que Claudia Sheinbaum rinda protesta y asuma la Presidencia de la República.
“Nosotros respaldamos la decisión del gobierno, ya que hay una pausa en la relación con España que el presidente impuso hace algunos años. Recordemos que, en el caso de México, el Presidente de la República asume un doble papel; el presidente López Obrador es tanto Jefe de Estado como Jefe de Gobierno, y él decidió hacer una pausa en las relaciones con España debido a la falta de respuesta a una solicitud de disculpas del reino español”, puntualizó.
Monreal agregó que las relaciones entre ambas naciones se resolverán una vez que Sheinbaum se coloque la Banda Presidencial y rinda protesta: “va a reencontrarse con todos y todas”.
Oposición condena “descortesía” al rey Felipe VI de España
Por su parte, la fracción parlamentaria del PAN en la Cámara de Diputados condenó la descortesía de Sheinbaum hacia la corona y el gobierno de España al excluir al rey Felipe VI de la lista de invitados especiales.
“Los múltiples vínculos entre la República Mexicana y el Reino de España son más que esta escaramuza anecdótica que pronto debe olvidarse. México debe abrazar a todos los pueblos del mundo y respetar el derecho ajeno a gobernarse para lograr la paz, como alguna vez pregonó Benito Juárez”, expresó la coordinadora panista Berenice Luna.
Asimismo, el coordinador de los diputados priistas, Rubén Moreira, afirmó que no es conveniente heredar la narrativa del desencuentro con España de un sexenio a otro.
“Es como si los españoles se quejaran de la entrada de los romanos o de los árabes a la Península Ibérica; son discusiones que no deben ser”, comentó. Además, el coahuilense consideró que la confrontación con el rey Felipe VI es un distractor ante los problemas que enfrenta el país.