CAMPESINOS SE mantendrán alertas en el campamento que instalaron, para evitar que la maquinaria siga trabajando.
Ejidatarios de Ayala detuvieron una vez más los trabajos de construcción del acueducto, que en la comunidad de San Pedro Apatlaco se encuentran en su etapa final, en medio de un conato de enfrentamiento con granaderos que resguardan la obra.
Al menos un centenar de campesinos rompieron por la fuerza el cerco de seguridad que mantenía la policía e ingresaron a la zona de obra para detener la maquinaria.
Los policías antimotines -alrededor de una veintena- se replegaron ante el avance de los ejidatarios, oponiendo escasa resistencia.
En medio de empujones, jaloneos y gritos, los opositores a la obra llegaron hasta la zona conocida como "el socavón", donde rodearon la retroexcavadora e impidieron el avance de los trabajos.
Hasta después del mediodía, los campesinos esperaban restablecer el diálogo con el Gobierno estatal, autoridades municipales de Ayala y Cuautla, así como de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Sin embargo, éstos reconocieron como único interlocutor legal a la dirigencia de la Asociación de Usuarios del Río Cuautla (Asurco) que, dijeron los ejidatarios, "nos han dejado solos", negándose a dialogar con quienes desde hace varios meses se mantienen en plantón, a escasos metros de la construcción.
Ante la negativa de diálogo, los ejidatarios decidieron parar por segunda ocasión -el pasado sábado así ocurrió-, los trabajos de excavación para completar el circuito del acueducto que alimentará con agua tratada a la Planta Termoeléctrica de Huexca.
Lo anterior, a pesar de que previamente se acordó una reunión con el presidente de Cuautla, Raúl Tadeo Nava, en la sede del gobierno municipal.
El comisariado ejidal de Tenextepango, Armando Cervantes Benítez señaló que los representantes de Asurco han mantenido acercamientos con la CFE, relegando al Consejo de Vigilancia del plantón.
Sólo un par de minutos después de ingresar a la zona e impedir a la maquinaria continuar las excavaciones, los ejidatarios se retiraron del lugar y los antimotines retomaron la vigilancia del lugar.
Son 300 metros de tubería, que atravesaría el río Cuautla a la altura del puente nuevo de Apatlaco, los que faltan para concluir el acueducto que requiere la Central de Ciclo Combinado para operar.
Los ejidatarios aseguraron que se mantendrán en pie de lucha ante la preocupación de ver mermada su dotación de agua para el riego de cultivos.