LA CRISIS DEL ESTADO Y LOS EXCESOS DE LA FAMILIA RAMÍREZ
La semana que inicia, estará llena de algunos cambios en las estructuras de dos poderes del gobierno estatal: Ejecutivo y Legislativo, resultados de ajustes financieros y políticos.
La información sobre la posible llegada del diputado Francisco Moreno Merino a la Secretaría de Gobierno a decir de su actual titular, Matías Quiroz Medina, está todavía sin sustento, de momento -aseguró- no hay cambios futuros.
Sin embargo, la rumorología inició desde el pasado viernes y fue primero con la presunta renuncia del director general del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), Fernando Pacheco Godínez.
Los politólogos de café replicaban las presuntas renuncias incluida la versión de que la presente o próxima semana vendrá la separación del cargo de gobernador, por parte de Graco Ramírez.
En sí, hubo varias presuntas renuncias, incluidas las de la secretaria de Obras, Patricia Izquierdo; la del Fiscal General del Estado de Morelos, Javier Pérez Durón, y hasta la del secretario de Administración, Alberto Barona Lavín.
La inestabilidad interna del Poder Ejecutivo de Morelos está originada por las mismas ausencias del gobernador Graco Ramírez, que instruye a su personal a través de las redes sociales.
Pero también desde las mismas oficinas del Palacio de Gobierno suele filtrarse información falsa, de mala fe porque el fuego amigo es cada vez mayor ante la posibilidad de que, en breve, venga una petición de la separación del cargo por parte de su titular.
A pesar de ello, en el Ejecutivo vendrán algunos cambios porque hay un exceso de gastos “extraordinarios”, que por eso el ajuste de personal inició desde la quincena pasada, excepto en los gastos personales de los servidores públicos del primer nivel.
De momento nadie sabe cuánto será el personal que será despedido, pero el cambio estructural también define la fusión de algunas dependencias y sobre todo tratar de evitar un mayor déficit económico en el gobierno estatal.
La misma situación habrá en el Congreso local, en donde aceptan que hay un déficit financiero por 42 millones de pesos y 106 trabajadores de confianza en las oficinas de los 30 diputados que duplican actividades.
Aunque los diputados son cuidadosos en las formas como dan a conocer sus ajustes, la realidad es que a todos, sus coordinadores han presentado una serie de listados y de ahí “palomear” de sus recomendados quienes continuarán dentro de la nómina y los que deberán buscar un nuevo empleo.
Cada diputado cuenta con 15 a 20 trabajadores que los apoyan en sus funciones, pero ahora deberán realizar diversos ajustes en su personal y ajustarse el cinturón como pasa con el 99.99 por ciento de la población.
Lo mismo pasará con su gasto de gestoría y algunos más, para evitar que siga creciente su déficit económico y salir sin problemas en los pagos del fin de año.
La situación para el siguiente año en ambos poderes e incluso en el Judicial habrá grandes cambios en sus formas operativas, más que administrativas, porque los recortes advertidos por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) vienen también al gasto corriente.
Es más, el país está en una crisis financiera nacional que podría ser mayor al carecer de una estrategia económica, que afectará los recursos que reciben los estados y municipios.
El propio Banco de México prevé una caída del peso ante el dólar que ha manifestado en los connacionales severas repercusiones, como es el incremento de los precios en artículos de la canasta básica y el aumento a la pobreza.
De ahí que los tres poderes del gobierno estatal y los ayuntamientos deberán tomar sus previsiones, sobre todo el Ejecutivo que ha provocado una gran deuda para los morelenses que debemos pagar durante los siguientes 20 años los excesos de un gobernador y su familia.
La quiebra financiera del estado no es culpa de los morelenses, porque en cuatro años el costo de la obra ha sido increíblemente elevado como la Plaza Cívica Emiliano Zapata en la que reportan un gasto de 49 millones de pesos, cuando a decir de profesionales en el tema, su costo no rebasa los 10 mdp y lo peor que los materiales empleados en ella son de pésima calidad.