Argumentan que el año pasado los diputados destinaron 10 millones de pesos para ese rubro, por lo que piden “etiquetar” 100 millones en el presupuesto de 2017
Alrededor de 500 campesinos de distintos municipios del estado marcharon esta tarde en el centro de la ciudad para exigir al Congreso de Morelos “etiquetar” 100 millones en el presupuesto de 2017, para la compra de fertilizantes, semilla y plaguicida ya que el año pasado los diputados destinaron 10 millones de pesos para ese rubro.
En una carta que entregarían al Legislativo de Morelos argumentan su exigencia y exponen que desde el 2014 el agro en el estado enfrenta una crisis por la sequía, la plaga del pulgón amarillo y la falta de recursos para fertilizantes.
Fidel Demédicis Hidalgo, senador del PRD por Morelos, encabezó la protesta y en conferencia de prensa sostuvo que el campo morelense se vio devastado y miles de campesinos que estaban en la pobreza pasaron a la pobreza alimentaria, y aquellos que estaban en la pobreza alimentaria se fueron a la pobreza extrema; éste último grupo está muriendo de desnutrición y enfermedades que son curables, dijo el senador quien se comprometió a gestionar recursos extraordinarios desde el Senado.
“En 2014 hubo sequía y en 2015 apareció la plaga del pulgón amarillo se acabó los cultivos de sorgo. Para este 2016 no logró recuperarse y aunque hubo lluvias necesitamos resarcir las perdidas por eso los 100 millones de pesos se tienen que etiquetar para fertilizantes, semillas y plaguicidas”, dijo Demédicis.
Así también dijo que posiblemente logre un ahorro en los fertilizantes porque el año pasado convino con el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), de la Secretaría de Agricultura (Sagarpa) que invirtiera cinco millones de pesos en Morelos para el combate de plagas mediante un control biológico.
Dicen los campesinos que los recursos son necesarios porque en 2015 cuando el pulgón amarillo siniestros los cultivos de sorgo, las empresas aseguradores sólo pagaron mil 500 pesos por hectárea dañada, lo que representó sólo el 10 por ciento de la inversión total, ya que desde la quita de yerba hasta el levantamiento de la cosecha se gastan 15 mil pesos, aproximadamente.
lsm