* YÁÑEZ VA POR TODO
E l secretario del Ayuntamiento de Cuernavaca, Roberto Yáñez Moreno, es un sujeto acostumbrado a la transa y al tráfico de influencias para aprovechar su paso por la política y la administración pública. No tiene escrúpulos. Durante la legislatura 52 (2012-2015) fue diputado por el PSD y hoy es el presidente municipal de facto en la capital morelense, quiérase o no aceptar. Fuera máscaras: maneja a su antojo el gobierno dizque encabezado por el inepto ex futbolista Cuauhtémoc Blanco Bravo, a quien de nada le sirvió colocar en la Secretaría Técnica a su gurú José Manuel Sanz. Se suponía que este defraudador de futbolistas famosos vigilaría las acciones de Yáñez Moreno (es decir le cuidaría las uñas) a fin de que no metiera en problemas al ingenuo “Cuauh”, pero el gachupín Sanz es otro ignorante con respecto a la sociedad local y al Ayuntamiento cuernavacense. Es un cero a la izquierda.
En noviembre de 2013 trascendió una de varias maniobras ejecutadas por Roberto Yáñez Moreno para hacerse de dinero fácil en el Congreso local aprovechando su paso por ahí, desde luego cometiendo el delito de tráfico de influencias. Cualquiera en Cuernavaca sabe que el ahora alcalde de facto ha detentado la posesión de alrededor de 100 anuncios espectaculares en distintos puntos de Morelos. Al arribar a la legislatura 52, Yáñez Moreno sostenía transacciones con el Congreso local por la supuesta utilización de esos espacios. Sin embargo, cuando la legislatura 52 llegó a noviembre de 2013 trascendió que ese órgano colegiado le había pagado casi 2.5 millones de pesos a través de prestanombres y parientes. Pero las canonjías nunca duran toda la vida y así le sucedió al entonces legislador pesedista, quien hizo tremendo berrinche cuando los jefes del Congreso, allá y entonces, le cortaron el negocio. Menuda sorpresa se llevó al constatar que de enero a mayo de 2013 se le pagó su “servicio” con facturas acumuladas por 360 mil pesos, nada más. Y sin ningún recato buscó furiosamente que se le repusiera el contrato, sin conseguirlo.
Hoy que ocupa el cargo de presidente municipal de facto, va por todo… lo que pueda embolsarse. Comenzó la colecta a través de varias dependencias, ante el inepto José Manuel Sanz, quien todavía no olfatea los negocios como fácilmente lo hace el multicitado Yáñez Moreno. Ejemplo de ello es la Secretaría de Desarrollo Ambiental, donde en lugar de su otrora cómplice Juan José Alcalá, el verdadero alcalde colocó a otro peor, también incondicional suyo, de nombre Harold Zavaleta, con presuntos antecedentes penales en EUA. Ahí es un secreto a voces que el ex diputado instruyó a Harold para retener cualquier número de expedientes en trámite, relacionados con las gestiones de grandes firmas o consorcios para obtener licencias de construcción, de uso del suelo, oficios de ocupación, etcétera. Todo lo que sea negociable, pues. La estrategia les está redituando pingües ganancias, según se sabe. Luego le seguimos.
Ya se esperaba: desechado el juicio contra Graco Ramírez
La Junta Política del Congreso hizo lo que ya se esperaba: desechó el juicio político solicitado en contra del gobernador Graco Ramírez y este miércoles notificará de su decisión al Pleno. La reunión de ayer de la Junta comenzó pasadas las 14 horas porque los coordinadores parlamentarios se reunieron para negociar los votos a favor de dar carpetazo a la petición de la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos. El PAN mantenía su postura de votar porque el expediente fuera enviado a la Comisión de Gobernación y Gran Jurado y ésta fuera la encargada de determinar su procedencia o improcedencia, pero al final cedió ante el resultado de un estudio jurídico realizado por especialistas de la UNAM contratados ex profeso por el Congreso, quienes determinaron que no había causales para la procedencia del juicio. La solicitud se apoyó en presuntas anomalías en el manejo del crédito de 2,806 millones de pesos autorizado al Ejecutivo desde 2013, y una auditoría especial efectuada por la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización a cargo de Vicente Loredo, determinó que esos recursos fueron razonablemente bien manejados. En suma: adiós juicio.
Blanco se acerca al Congreso
Después de mucho rehuir al tema, finalmente los coordinadores parlamentarios del Congreso y el alcalde de Cuernavaca se reunieron para abordar la problemática financiera del ayuntamiento y su necesidad de obtener la autorización para refinanciar su deuda. En el encuentro se habrían dado los primeros pasos para que la comuna obtenga, ahora sí, un permiso legislativo que ha venido buscando a lo largo de por lo menos dos años. El alcalde Cuauhtémoc Blanco habría sido conminado a acreditar medidas de austeridad como una de las premisas para obtener la autorización de los diputados. Este tema fue uno de los obstáculos que no pudo salvar en el trienio anterior el entonces munícipe Jorge Morales Barud, cuando fue exigido por diputados como el panista Javier Bolaños e incluso el pesedista Roberto Yáñez, que actualmente es el presidente municipal de facto. Está por verse, además, si prende el nuevo escándalo de El Cuauh sobre la presunta defraudación fiscal al no pagar el ISR del primer trimestre del año, lo que en poco abonaría al ánimo de los legisladores para otorgarle facilidades a su gobierno.