Corral no puede con Chihuahua
Hemos tenido algunos gobernadores voraces para saquear las arcas públicas, pero por lo visto el voto de castigo trajo a otros inútiles e incompetentes.
Es malo generalizar, es cierto. Veamos un caso concreto: Chihuahua. El gobernador Javier Corral ha pedido que Peña Nieto se haga cargo de la crisis de su estado.
¿Para eso quería gobernar? ¿Para pedirle al presidente que le solucione los problemas de su entidad?
El problema de Chihuahua es el elevado déficit presupuestal por una deuda abultada.
Bueno, contra eso votaron los chihuahuenses. Y eligieron a Corral para que les solucione el problema y gobierne de manera diferente.
Si él no iba a poder, ¿para qué se presentó de candidato? Y si iba a pedir que los problemas de Chihuahua los solucione la Federación, ¿qué sentido tiene elegir gobernadores?
Mejor se hubiera designado un delegado federal para que gobierne Chihuahua, si el ganador de las elecciones no iba a poder.
Dijo Corral, previo a la reunión de la Conago el fin de semana: “El régimen tiene que hacerse cargo de lo que hicieron sus gobernadores”.
O Corral perdió el juicio, o el sistema federal no existe y no nos hemos dado cuenta.
A César Duarte lo eligieron los chihuahuenses, hubo elecciones y las ganó ese político que resultó ser un mal gobernador.
Por eso en la siguiente elección los votantes cambiaron de partido gobernante y eligieron a Corral.
Si el gobernador saliente robó dinero de la caja, debe ser castigado. Y eso le corresponde hacerlo al gobierno entrante. A Corral. ¿No puede?
Resulta incomprensible que un gobernador tan crudamente opositor en el discurso al gobierno federal, a la hora de ponerse a trabajar tenga que pedirle a Peña Nieto que se haga cargo de la crisis de Chihuahua.
¿O para qué quiso ser gobernador? ¿Para tomarse la foto con sus amigos Denisse Dresser y Gerardo Fernández Noroña en el Palacio de Gobierno?
Muy linda foto. Ok. Ahora toca ponerse a trabajar para resolver los problemas de Chihuahua. Ahí ya no, que mejor lo haga Peña Nieto.
El gobierno de Peña, dijo Corral, “es corresponsable del desastre financiero y de caja de Chihuahua. Le permitieron (a César Duarte) hacer y deshacer”.
La deuda de Chihuahua fue votada por el Congreso de ese estado. Es un asunto de los chihuahuenses. Corresponde a su soberanía. Y no olvidemos que César Duarte gobernó la mitad de su sexenio bajo el gobierno de Felipe Calderón.
¿Qué va a pedir Corral cuando entienda eso? ¿Qué vayan Peña y Calderón a hacerse cargo de Chihuahua? Haberlo dicho desde antes.
Es cosa de imaginar lo que va a ocurrir si un personaje como Javier Corral gana la presidencia de México en 2018, con el crecimiento acelerado de la deuda que se dio. ¿Se van a declarar incompetentes?
Entonces que no compitan en las elecciones.
La solución que plantea Corral para Chihuahua es todavía más disparada: “Estoy pensando incluso en una colecta nacional e internacional”.
Una colecta. Válgame Dios. Cuánta incompetencia de los que aparentan ser buenos candidatos, pero a la hora de enfrentar los problemas no saben qué hacer.
Twitter: @PabloHiriart