I. Samba política. Con 342 votos en favor y 127 en contra, los diputados brasileños aprobaron llevar a juicio político a Dilma Rousseff. Dice un aliado cercano a la política brasileña que muchos de sus colegas la traicionaron en el último momento. La realidad es que, después del escándalo sobre sus cuentas bancarias en Suiza, el caso Petrobras y las acusaciones de lavado de dinero, Rousseff ya no tuvo oportunidad. Es un ejemplo para muchos países de América, incluyendo México. Pregunta: ¿qué pasaría en nuestro país si sucediera ese tipo de acusaciones? Ahh, ya pasan, pero las consecuencias no son las mismas.
II. Peligra el puesto del Temo. Debido al incumplimiento de pago de laudos laborales, Cuauhtémoc Blanco corre el riesgo de ser destituido. Sí, trascendió que el pasado viernes El Temo recibió una notificación de un proceso de destitución que fue iniciado en un juzgado federal. Es un ultimátum por crisis financiera del municipio, en la misma situación están 52 funcionarios, según lo informó la secretaria del Trabajo del gobierno estatal, Gabriela Gómez Orihuela. No es para menos, desde el inicio de las presentes administraciones se han acumulado al menos 600 demandas laborales, aunadas a la deuda millonaria que supera más de 500 millones de pesos de las administraciones anteriores.
III. Basave y su grito de auxilio. No hay unidad ni cohesión en el interior del PRD y unos cuantos son los que escuchan a su líder nacional, Agustín Basave. Al menos así parece el señalamiento de éste: “Mantener la cohesión y la unidad… es una batalla que no termina”. Las tribus siguen ganando la partida en una fuerza política que, de no poner un alto, el futuro será poco alentador. “…tiene que haber conciencia de que sólo unidos podemos ganar, la división lleva a la derrota”, advierte Basave. Conoce por nombre a sus detractores, 15 de los 27 integrantes del CEN del sol azteca hicieron pública su oposición a su líder. ¿Hay crisis? Es evidente. Habrá que esperar a ver si logran limar asperezas.
IV. Nada cambia. Nuevo León sigue en la mira. Aún no se levanta el gobernador Jaime Rodríguez El Bronco de lo sucedido en el penal de Topo Chico, cuando ya tiene encima otro paquetote. Ejecutaron a diez personas en una casa en Nuevo León. Y lo peor, situada en Valle de San Pablo, en la colonia Valle de San Miguel, una zona a la que no se tiene acceso sino a través de la caseta de vigilancia. Las víctimas fueron encontradas degolladas y con las manos atadas por la espalda. A como se dan las cosas en Nuevo León, esto apunta a otro caso sin resolver. El gobernador está en problemas. Otra vez.
V. Trabajo quirúrgico. El que andará muy activo los próximos días es el subsecretario de Gobernación, Roberto Campa. Tiene la no muy fácil tarea de negociar un encuentro entre el titular de la Segob, Miguel Ángel Osorio Chong, y los padres de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, luego de que el gobierno federal anunciara el fin de los trabajos de investigación por parte de los expertos del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI). Por lo pronto, la apretada agenda del secretario de Gobernación ha impedido un encuentro, por lo que el subsecretario ha tenido que entrarle al quite para llevar a buen puerto el diálogo con los padres.