:Que a los diputados de la Comisión Ayotzinapa, que encabeza María Guadalupe Murguía, los integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la CIDH ya no les contestan ni el teléfono.
En contraste, quien sí los recibirá es el ombudsmanLuis Raúl González Pérez en las oficinas de la CNDH, donde abundarán en el último informe sobre la desaparición de los normalistas.
:Que después de las diferencias públicas recientes entre Miguel Ángel Mancera y Luis Videgaray, ayer por la tarde por fin se reunieron para intercambiar argumentos y acercar posiciones.
El jefe de Gobierno le planteó al secretario de Hacienda la necesidad de priorizar el transporte público en la capital como un tema no solo económico, sino incluso de salud. El funcionario federal se comprometió a explorar posibilidades de financiamiento que pasan por fondos verdes internacionales.
:Que por fin hoy se instala la Subcomisión de Examen Previo para resolver los más de 300 casos de juicio político, muchos de ellos caducos.
Entre los más frescos están los del gobernador de Veracruz, Javier Duarte, el diputado del PAN Agustín Rodríguez, el ex director de Pemex Emilio Lozoya y hasta los 11 consejeros electorales del INE, encabezados por Lorenzo Córdova, demandados por Morena.
:Que al hacer un recuento de algunos cargos que ha tenido, el nuevo embajador de México en Estados Unidos, Carlos Manuel Sada, recordó que fue presidente municipal de su estado natal, Oaxaca, y aprovechó para contar que hace unos días, cuando se reunió con el presidente Enrique Peña Nieto, éste le preguntó por qué no siguió en la política.
"Es que los oaxaqueños son muy broncos, señor Presidente", respondió el diplomático.
¿Más broncos que Donald Trump?
:Que la intempestiva lluvia que azotó la Ciudad de México casi arruina la recepción al presidente del Consejo de Ministros de Italia, Matteo Renzi, en Palacio Nacional.
Minutos antes de comenzar, el Estado Mayor pidió a los secretarios de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu; de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, y de Economía, Idelfonso Guajardo, trasladarse al salón Tesorería, pero el chaparrón pasó rápido y la Guardia de Honor se volvió a instalar en el Patio Central: al final la ceremonia duró apenas ocho minutos.