San Miguel de Allende, México (12 febrero 2017).- En las comunidades de Ajijic, Jalisco, y San Miguel de Allende, Guanajuato, considerados los principales "santuarios" de estadounidenses en México, las políticas de Donald Trump también provocan molestia.
A más de 2 mil kilómetros de distancia del país donde nacieron, en un lugar donde idioma y costumbres son diferentes, los residentes estadounidenses en esta ciudad dicen que en México se sienten mejor porque no tienen cerca a Donald Trump.
Con más de 14 mil ciudadanos provenientes de Estados Unidos, San Miguel de Allende se ha convertido en el refugio de extranjeros que siguieron cada paso de una campaña que "parecía una broma de mal gusto", pero que al final dio el triunfo al magnate Trump.
A la distancia participan en marchas y protestas contra quien ahora es el mandatario de su país. Reconocen que las ofensas contra los mexicanos han sido desafortunadas y generan un distanciamiento entre ambos países.
Sandra Loridans tiene 77 años y desde hace 27 vive en Ajijic con su esposo, donde forma parte de la organización Democrats Abroad, que ha organizado marchas en Ajijic, San Miguel de Allende, Puerto Vallarta y Mazatlán en contra del Presidente de EU.
"Estamos muy involucrados y nos vamos a mantener muy involucrados, seremos muy proactivos. Estaremos observando todo lo que hace Trump", afirmó.
Con pancartas de "Trump no es mi Presidente" y "Somos más fuertes juntos", se reúnen frente a la Parroquia de San Miguel Arcángel o en parques para protestar contra las decisiones de quien hace menos de un mes tomó las riendas de su país.
La comunidad extranjera tiene un lugar especial porque ha sabido involucrarse en los temas de la ciudad: participan en marchas para defender el Patrimonio, son integrantes de asociaciones civiles que ayudan a los mexicanos necesitados, comparten las fiestas y se deleitan con las tradiciones de la tierra que escogieron para vivir.
El mismo 20 de enero, día en que Trump ascendió al poder, un grupo de 100 residentes salió a las calles a protestar y decir que era uno de los días "más tristes y deprimidos para el mundo".
Dos días después, más de 2 mil residentes se reunían en el Parque Juárez. En familia, con globos rojos y blancos además de cartulinas que contenían mensajes de aliento para los estadounidenses, se unieron a la Marcha de las Mujeres.
"Todas sus ideas (de Trump) son locas y todo mundo sabe eso y espero que el Congreso de Estados Unidos y el Poder Judicial no van a hacer cumplir todas sus ideas, ya vemos eso ahorita, con lo que pasó con sus firmas en contra de los migrantes árabes", señaló Terry Vidal, director de Like Chapala Society.
Paula Breitling, ex trabajadora del Gobierno de EU retirada y promotora del colectivo Lakesides Progressives for Action, quien desde hace cinco años vive en Ajijic con su esposo, consideró que la llegada de Trump puede afectarlos directamente en las prestaciones de su retiro.
"Incluso viviendo en México, esto va a tener un profundo impacto en mí, y en muchas de las personas que somos de Estados Unidos, porque habrá severos efectos en algunas políticas de seguridad social que él intenta cambiar", expresó.
Sarah Hoch, directora del Festival Internacional de Cine de Guanajuato, originaria de Nebraska y residente desde hace más de 30 años en San Miguel de Allende, asegura que la mayoría de la población extranjera en la ciudad está indignada.
"Estamos preocupados y agradecidos de estar en México y no en los Estados Unidos. Trump es un tirano", señala.
"Es una vergüenza que EU esté así, viviendo el reality show más caro de sus vidas. Esta decisión les va a costar todo: su economía, diplomacia, su posicionamiento global".
Las decisiones de Trump, anticipa, provocarán que más ciudadanos de EU lleguen a San Miguel.
Bill Wilson, originario de Filadelfia y colaborador de periódicos y revistas en Nueva York, Filadelfia y Nueva Jersey, se siente en México como en su tierra.
"Mi esposa y yo tenemos una casa en San Miguel y estamos enamorados de esta tierra.
Me involucro con la gente, apoyo a la Cruz Roja, Bomberos y otros cuerpos de emergencia a través de los radioaficionados. Nuestra vida y nuestro hogar están aquí, en México", indica.
"Estoy aturdido por la arrogancia y la ignorancia de este Presidente. Veo a Estados Unidos volviendo a los tiempos turbulentos de los años sesenta y eso nos está doliendo a todos. Confío en México y sé que es un refugio de paz, comprensión y fortaleza.
Muchos de los estadounidenses olvidan que todos somos inmigrantes", apunta.
Entre su comunidad, alerta, ha surgido una duda: ¿los mexicanos querrán vengarse de Trump a través de ellos?
"Yo espero que no porque nosotros estamos con México, en contra de todas las tonterías que Trump dice de quienes no son de EU. Aquí no hay muros sino fuerza, así siempre lo han demostrado los mexicanos y por eso somos parte de ellos". H