Washington DC, Estados Unidos (13 febrero 2017).-Seis de los más recientes Embajadores estadounidenses en México escribieron una columna en el Washington Post en el que describen la importancia del País para Estados Unidos.
En ella, los diplomáticos, que sirvieron entre 1989 y 2015, aseguran que México es el país más importante con el que mantienen nexos y que la naturaleza de esa relación repercute en la prosperidad de Estados Unidos.
"Las relaciones entre Estados Unidos y México afectan la vida cotidiana de más estadounidenses que los lazos con cualquier otro país, ya sea a través de la cultura, el comercio o los viajes.
"La prosperidad de Estados Unidos y la seguridad de nuestra patria se ven profundamente afectados por el tipo de relación que tenemos con nuestro vecino del sur", comienza el texto, firmado por seis Embajadores.
Se trata de John D. Negroponte (1989-1993), James R. Jones (1993-1997), Jeffrey Davidow (1998-2002), Antonio Garza (2002-2009), Carlos Pascual (2009-2011) y Earl Anthony Wayne (2011-2015).
Aunque reconocen que hay aspectos que mejorar de la relación bilateral, los diplomáticos advierten que revivir la animosidad y distanciamiento que vivieron ambos países entre los 70 y 80 sería peligroso y contrario a sus intereses.
"Los seis hemos servido como Embajadores en México (...) Hemos visto de primera mano el valor estratégico de cooperar con México para abordar problemas comunes, como la delincuencia, el terrorismo y la economía", explican.
Ahora, comentan, están preocupados por lo que describen como exageradas acusaciones públicas.
"Los mexicanos creen que su 'dignidad' nacional fue insultada. Los defensores de una cooperación más estrecha con Estados Unidos están a la defensiva", advierten.
Los diplomáticos dedican una parte del texto a defender el TLC, del cual, narran, ellos fueron partícipes durante todos estos años en su etapa de implementación.
Aseguran que si bien no es un acuerdo perfecto, no es el "asesino de trabajos" que algunos han interpretado.
"Desde que el TLC fue firmado en 1993, los empleos estadounidenses vinculados a México crecieron de 700 mil a 4.9 millones. El valor de nuestro comercio de dos vías se ha multiplicado por seis, llegando a 584 millones en 2015.
"México es ahora el segundo mayor mercado para las exportaciones estadounidenses, más grande aún que China, Japón y Alemania combinados. México es el tercer mayor comprador de productos agrícolas de los Estados Unidos", resaltan.
También destacan la manufacturación conjunta, de manera que las exportaciones de este tipo mexicanas contienen un 40 por ciento de contenido estadounidense.
"Nuevos estudios han dejado claro que las grandes causas de las pérdidas de empleos en el sector manufacturero de Estados Unidos son la automatización y el comercio con China, no con el TLC", argumentan.
Sugieren, en cambio, que el tratado se mejore al impulsar la economía estadounidense en áreas tales como la "regla de origen", servicios, comercio electrónico, ineficiencias fronterizas y estándares laborales.
Destacan, también, la Reforma Energética de 2013, gracias a la cual, explican, México abrió el sector a la inversión y el comercio con otros países.
"Hoy en día, Estados Unidos exporta más gas natural y gasolina a México que ningún otro país", afirman.
Por último, precisan que el déficit comercial con México "recibe demasiada atención" pues, explican, representa sólo el 8 por ciento de su déficit, siendo los sitios con los que tienen una balanza más desigual China, la Unión Europea y Japón.
"El déficit con México disminuyó más de 40 por ciento entre 2010 y 2015, a pesar de que el comercio creció 35 por ciento", dicen.
También, abordan el punto de la frontera y la migración, y consideran una gran ironía que justamente hay 1.1 millones de mexicanos menos ahora que en 2007, los niveles más bajos de este siglo.
"México se ha unido a nosotros para manejar la oleada de migrantes de Centroamérica, deportando más de 165 mil de ellos de su frontera sur en 2015, más que los que deportó Estados Unidos.
"Exigir públicamente que México pague por ese muro ha alimentado el nacionalismo antiestadounidense, esto limita la capacidad del Gobierno mexicano para trabajar con nosotros", argumentan.
Sobre el punto de la frontera, mencionan también cómo el hecho de ser vecinos les ha permitido trabajar de manera cercana para detener a potenciales terroristas de entrar a Estados Unidos y de luchar contra el narcotráfico.
"Instamos a Estados Unidos a entablar negociaciones serias y basadas en hechos sobre las diferencias en comercio y otras materias", finalizan.