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VIDA POLÍTICA

LAS MILLONARIAS GANANCIAS DE JAIME ÁLVAREZ CISNEROS

Desde que llegó a Morelos, Jaime Álvarez Cisneros hace negocios, unos grandes y otros pequeños, pero todos, muy jugosos que solamente benefician sus cuentas bancarias.

El partido naranja ha sido su “caja fuerte”, por ello mantiene una alianza muy cercana con el Partido de la Revolución Democrática, que hoy en día, dejó de ser la izquierda de la lucha por las clases sociales.

Sin ser militante del PRD y desde el Movimiento Ciudadano, Jaime Álvarez Cisneros dejó de lado su viejo y destartalado escarabajo de la empresa Volskwaven, para después pasar a una -menos vieja- camioneta Suburban azul, en la que solía transportarse sin chofer, eso todavía el siglo pasado.

Posteriormente, la fortuna llegó al creador del Movimiento Ciudadano en Morelos al ser diputado local por la vía plurinominal, desde donde inició para amasar millones de pesos.

Luego bajo el mismo esquema de la limosna democrática, logró subir al escaño de diputado federal, y también ahí fue conocido no por sus constantes debates e intervenciones en tribuna, sino por ser un buen negociador para hacer dinero.

A su “regreso” al estado, en la campaña de Graco Ramírez al gobierno estatal, la presencia de Jaime Álvarez Cisneros era el de organizar la logística de los mítines y atender los asuntos relacionados con los recursos financieros.

Al ganar la gubernatura estatal, el primer nombramiento que hace Ramírez es el de su secretario Ejecutivo, a cargo de Jaime Álvarez quien también tiene mano para imponer secretarios de despacho, servidores públicos de primer y segundo nivel.

Y como desde el cargo Jaime Álvarez no podía realizar los grandes negocios, fue nombrado en la Secretaría de Turismo en la que también  obtuvo ganancias con la construcción del espacio, hoy un elefante blanco, llamado “Arena Teques” y en el que hubo presentaciones de cantantes de primer nivel, pero cuyos honorarios fueron pagados con recursos de un crédito que presuntamente sería para el beneficio de obras a favor del pueblo de Morelos, y que jamás se hicieron.

Cierto es que de esos dos mil 806 millones de pesos, las ganancias no sólo fueron para la familia Ramírez Cepeda o Gayosso Cepeda, sino también para el diputado Jaime Álvarez Cisneros.

En su retorno, por segunda ocasión al Congreso estatal, es el artífice para la compra del voto en los “grandes” temas y negocios del gobernador Graco Ramírez, es el maletero que reparte el pastel y como lo dice el vox populi: “El que parte y reparte se queda con la mayor parte”.

De ahí que el año pasado el activismo del diputado del Movimiento Ciudadano Jaime Álvarez era para dos asuntos: el primero, sacar adelante un segundo crédito de mil 500 millones para pagar los intereses moratorios del primero de dos mil 806 millones de pesos.

El segundo, tenía que construir un “fideicomiso” dentro del que de manera “legal” los presidentes municipales fueran obligados en aportar el dos por ciento de sus recursos, para “salvar” la administración y ayuntamientos con el presunto pago de laudos y deudas heredadas.

El negocio bajo la reforma legal aprobada, no es de solamente 120 millones de pesos, que efectivamente no provienen de la buena fe del gobernador Graco Ramírez, sino del dos por ciento de los recursos que generarían un total de 450 millones de pesos anuales.

En otras palabras, el negocio de Graco Ramírez, Rodrigo Gayosso Cepeda y Jaime Álvarez es destinar -como límite- 200 millones de pesos y quedarse con 150 millones de pesos de las prerrogativas federales descontadas a los 33 municipios.

Como hay -actualmente- 15 presidentes municipales que han solicitado la Controversia Constitucional contra el decreto, sus administraciones -en respuesta de evitar ganancias por 50 millones de pesos para sus señorías Ramírez-Cepeda-Álvarez- hoy hay una auditoría contra éstos.

De ahí que ahora muchos que llegan por la carretera México-Cuernavaca, por la vía libre y no por la de cobro, llegan en autos destartalados y de preferencia bochos de color rojo, quienes bajo las siglas de partidos políticos inician una carrera “política” que los dejará millonarios.

El caso de Jaime Álvarez Cisneros que no pasaba de su clásico pantalón azul marino y camisa azul cielo, con sus zapatos negros sucios, no es el único, hay varios que han llegado así a Morelos y terminan como gobernadores millonarios.

En futura entrega, les daremos el listado de propiedades tanto en bienes como en autos, con blindaje y sin blindaje que hoy día posee el ·”mustio” diputado y cuyo valor podría superar los 200 millones de pesos, claro, sin contar sus “modestos” ahorritos que mantiene en diversos bancos, y una que otra inversión, fortuna que ha logrado amasar en no más de dos décadas.

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