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OBSERVADOR POLÍTICO

Para nadie es un secreto que tanto Andrés Manuel López Obrador como su partido Movimiento de Regeneración Nacional, MORENA, se encuentran en los cuernos de la luna de cara al proceso electoral del 2018. Y más aún cuando en Morelos, AMLO, ganó de calle a Felipe Calderón del PAN; y Roberto Madrazo Pintado, del PRI. La misma historia se reflejó en el 2012 cuando participaron Margarita Zavala, por el blanquiazul y Enrique Peña Nieto, por el tricolor, aunque a nivel nacional no le alcanzó para obtener el triunfo en la presidencia de la república, pese a que dicen muchos, le robaron la elección.

POR AMLO EL PRD EN 2012 FUE 1 ERA FUERZA POLÍTICA EN MORELOS.- A pesar de que ahora lo niegan, la sociedad sabe que la participación de Andrés Manuel López Obrador en la elección del 2012  provocó el triunfo de varios perredistas en esa elección, entre los más destacados el del gobernador Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, quien a la postre no sólo se desvinculó de su paisano tabasqueño sino que además de traicionarle y ponerse de tapeque con Enrique Peña Nieto –el presidente de México-, inició un ataque constante y permanente contra “el señor López”. Otros triunfos de políticos que le deben el triunfo al presidente de MORENA en esa elección son: Rabindranath Salazar Solorio y Fidel Demédicis Hidalgo, senadores hoy y quienes en su momento, por el litigio y conflicto político con Juan Salgado Brito, no hicieron más que 15 días de campaña y pese a ello, al final ganaron la elección y no precisamente por su excelente trabajo realizado en Morelos.

Diputaciones federales, locales -incluso el PRD hizo lo que nunca, ganó los distritos de la capital-, alcaldías, sindicaturas y regidurías las ganó el sol azteca convirtiéndose en la primer fuerza política en Morelos con el 44 por ciento de la votación estatal, pero sin lugar a dudas, en gran medida, gracias a la imagen y poder de convocatoria de Andrés Manuel.

LA INFILTRACIÓN.- Ahora que MORENA y AMLO nuevamente están en los cuernos de la luna, el gobierno federal priista de Enrique Peña Nieto y el estatal perredista de Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, iniciarán los ataques y la división al interior de este instituto político para frenarlo y evitar que puedan ganar en la elección del 2018, para ello harán todo lo que esté a su alcanza para frenarlo y evitar que después algunos políticos estén en la cárcel como lo demanda la ciudadanía.

Por ello, se ha iniciado una acción perversa. Divide y vencerás, dice el refrán. Una acción que la practican a la perfección en el gobierno de la nueva ambición y por tanto, los personajes que han sido tocados por el diablo son dos, padre e hija, hombre y mujer: Quintín Barrera Miranda y Ariadna Barrera Vázquez. El primero, fue fundador y presidente de MORENA y la segunda, es actualmente la presidenta del Consejo Estatal del Movimiento de Regeneración Nacional.

El acercamiento de estos dos personajes es con el ex presidente del PRI, ex alcalde de Cuernavaca y ex diputado local, Manuel Martínez Garrigós, quien tiene una excelente relación con padre e hija, los mismos que han estado empezando a comprar comités municipales de MORENA para ir fortaleciendo su proyecto político de cara al proceso electoral. Y obvio, MMG también tiene una excelente relación con Rodrigo Gayosso y este con Graco.

Quintín Barrera Miranda y su hija Ariadna, han estado comprando comités de Morena para infiltrarse y desestabilizarlo, los altos dirigentes de este instituto político tanto a nivel nacional como estatal tienen ya registros y elementos de sus movimientos que están haciendo amparados por Manuel Martínez Garrigós, por ello, no les temblará la mano al momento de tomar decisiones tal como sucedió con el diputado traidor, Manuel Nava Amores, quien decidió venderse por unos pesos a mantener una política coherente y efectiva con quien le entregó una curul a través de la insaculación de la que fue beneficiario.

INICIA SECRETARIO DE GABINETE DE CUAUH, CAMPAÑA AL 18.- Uno de los funcionarios más oportunistas de la administración de Cuauhtémoc Blanco Bravo, es sin lugar a dudas,  el secretario de Desarrollo Social, Demetrio Chavira de la Torre, pues se ha dedicado a utilizar la imagen del ex futbolista profesional para tratar de buscar un cargo de elección popular.

Chavira de la Torre, quien llegó a esa dependencia por compromisos políticos con el entonces subsecretario de Gobierno, Jorge Meade González, a quien todos los días le rinde cuentas de lo que se hace o deja de hacer en el Ayuntamiento de Cuernavaca, con la intención de que éste lo acomode en su lista de preferidos y lo recomiende a Rodrigo Gayosso Cepeda, líder estatal del PRD, para contender en las próximas elecciones. 

El funcionario presume ser amigo y uno de los hombres más cercanos al alcalde de Cuernavaca en todo tipo de reuniones, por lo que incluso, aprovecha cualquier espacio para tomarse la foto y enviársela a Jorge Meade González –y también al papá-, para que vean que está trabajando. 

Lo cierto es que Chavira es uno de los integrantes del gabinete que menos propone y no tiene el control sobre sus subalternos, tal es el caso de la directora del Instituto de la Mujer, Alejandra Ocampo, quien no pone un pie en la oficina y desconoce el área en la que se desenvuelve. Se enfrenta con los medios de comunicación y rechaza declarar en torno a las actividades que no se hacen en esa área. 

La actitud prepotente de Demetrio Chavira ha puesto a los servidores públicos en una zozobra, pues los obliga a utilizar en los eventos oficiales de las direcciones de Salud, Educación, Programas Sociales y Juventud para hacer campaña inclinado hacia el PRD aunque sigue teniendo un píe en el PRI.

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