Cuauhtémoc Blanco se movió como pez en el agua, pues ayer regresó a la cancha que sí domina. No fue el mismo que llegó al Nido de Coapa cuando tenía 17 años y lidiaba con el transporte público para presentarse a entrenar, ahora lo hizo en una camioneta blindada, con dos tanquetas del ejército custodiándolo y con el título de alcalde de Cuernavaca como investidura. No necesitó limar asperezas con nadie, el "Patrón" (Emilio Azcárraga Jean) fue quien lo invitó para tomarse esta "licencia" y disputar su último partido con el América como jugador oficial, a pesar de que tuvo que robarle una semana a su gestión como funcionario público. Y mientras en Cuernavaca luchan por dejar de ser el municipio con mayor índice de violencia, según cifras reveladas por el Sistema Nacional de Seguridad Pública el año pasado, el "Temo" prometió acabar con la indisciplina que priva en el cuadro azulcrema. En Coapa, Blanco ordena, dispone y los demás le obedecen, gobierna en territorio azulcrema con total autoridad, la gente confía en él y hasta porras le canta
