SERPIENTES Y ESCALERAS

 

La lucha contra la inseguridad en Morelos ha dado como resultado la captura de decenas de personas y la muerte de cientos más, ha enrarecido el ambiente y multiplicado los delitos de impacto. A pesar de ello las autoridades dicen que vamos por buen camino, presumen la efectividad de la estrategia y reiteran que hay unidad y coordinación institucional. Los hechos muestran algo distinto: ahora tenemos más cárteles operando, el índice delictivo aumentó y la percepción sobre la seguridad es cada vez peor. Cómo si eso no fuera suficiente, son notorias las diferencias en el gabinete de seguridad. ¿A dónde va Morelos?

Esta semana el secretario de gobierno acudió al congreso de Morelos para hablar de varios temas, entre ellos el de seguridad. El coordinador del gabinete, superior jerárquico del resto de los integrantes del gobierno estatal (excepto, claro, el gobernador) refrendó su confianza en Alberto Capella y negó que hubiese fractura o desacuerdo entre los secretarios. La aclaración de Matías Quiroz fue consecuencia de hechos recientes en los que públicamente se ha confrontado con el titular de la Comisión de Seguridad.

Pero aunque las autoridades locales dicen que las cosas van bien, es evidente que no es así. El secretario de gobierno no tiene control sobre el jefe de la policía y éste no muestra el menor interés por coordinarse ni por informar al titular de la política interna. Una y otra vez Capella ha mostrado su poder sobre Matías y reiteradamente deja ver que su único jefe es Graco Ramírez.

Alberto Capella ha sido indiferente a la crítica; el tijuanense no se amilana ante los cuestionamientos ciudadanos y a los diputados varias veces los ha confrontado. En la legislatura pasada (la 52) amenazó al diputado Alfonso Miranda y le advirtió que “el fuero no le duraría para siempre”; en la actual hizo fuertes señalamientos contra el diputado José Manuel Tablas Pimentel, a quien le relacionó con grupos de la delincuencia organizada.

Capella es un hombre que conoce el manejo del micrófono tanto como la estrategia policial. La fama del Rambo de Tijuana es resultado de esas dos condicionantes y en Morelos las ha querido explotar, aunque los resultados no han sido tan buenos como los que logró en la frontera.

El problema del comisionado de seguridad en Morelos es que los problemas delictivos no se resuelven con entrevistas ni mucho menos con videos en Facebook. Peor aún: cada vez que el jefe policiaco exhibe su poder frente al secretario de gobierno, vulnera la de por si frágil estabilidad de un gobierno cada vez más débil y cuestionado por sus malos resultados.

Matías Quiroz ha sido institucional a pesar de los malos tratos recibidos por Capella, ha cuidado las formas, aguantado los desplantes del tijuanense y soportado que una y otra vez lo hagan ver como un hombre sin control sobre la policía estatal. Públicamente el secretario ha sido exhibido varias veces; en privado el propio Matías acepta que el comisionado no le hace caso.

Diferentes voces han externado que algo no funciona en la estrategia de seguridad en Morelos. Ninguna de ellas ha sido escuchada, ni mucho menos aceptada como válida por un gobierno que (según ellos) nunca se equivoca y goza de la más alta confianza ciudadana en todo el mundo.

Mientras las autoridades no acepten que hay problemas y hagan algo por resolverlos, es imposible que las cosas mejoren. Uno más de los problemas hoy es la evidente (y peligrosa) factura en el gabinete de seguridad.

¿A dónde va Morelos?

• posdata

La amenaza en una lona contra del responsable de la seguridad en Morelos expuso el nerviosismo que existe en la Comisión Estatal de Seguridad. Diputados, senadores, alcaldes, empresarios, comerciantes, ciudadanos, periodistas… muchos han pedido información al comisionado de seguridad y nunca ha habido respuesta. El tijuanense es experto en ignorar la crítica.

Pero de repente Alberto Capella reaccionó y respondió a una narcomanta.

¿Por qué?

• nota

Luego de la aparición de una narcomanta dirigida al comisionado de seguridad en Morelos, el portal SinLínea publicó una nota donde resumió lo ocurrido. Esto es lo que escribió Justino Miranda:

“El Comisionado de Seguridad Pública, Jesús Alberto Capella Ibarra, dio por cierta una amenaza de muerte en su contra enviada presuntamente por el líder del cártel de Los Rojos, Santiago Mazari Hernández, El Carrete, a través de una manta que colgó en un puente del poblado de Galeana, municipio de Zacatepec, al sur del estado.

La manta fue descolgada por la mañana y hasta la tarde respondió el comandante policial a través de un video. En el texto se leyó que Capella sería objeto de un atentado porque presuntamente rompió con un supuesto acuerdo con el grupo de Los Rojos.

La manta señala que el jefe policiaco recibía 50 mil pesos para sus “gastos” así como boletos de avión; además lo acusan de proteger a las bandas de secuestradores y aquellos que roban combustible.

Alrededor de las 18:00 horas el jefe de la Policía Única en Morelos distribuyó un video donde afirmó que desde 2015, un año después de su llegada al cargo, se estructuró la coordinación con autoridades federales pero principalmente con la Fiscalía General del Estado y la Unidad Especializada Antisecuestros y en conjunto han dado resultados en el combate contra Los Rojos.

Precisó que en 2015 fueron detenidos 33 personajes alineados a ese grupo delictivo; en 2016 detuvieron a 61 también y en lo que va de este año van 18 personas detenidas por su vinculación con El Carrete.

Entre ellos enumeró a ‘La Rata’, ‘El Pitus’, el de mayor secuestros en la zona metropolitana; ‘El Marrano’ y ‘El Maruchan’, citó.

“El día de hoy quiero pedir su colaboración dando contestación a estas amenazas. Este es el sujeto Santiago Mazari Hernández, ‘El Carrete’ o como se hace llamar ahora ‘El Señor de los Caballos’ el que comete los secuestros, extorsiones y homicidios” en el estado, acusó.

Capella pidió el apoyo de la ciudadanía para delatar al Carrete para infundirle temor en salir a las calles o cualquier lugar.

Desde enero de 2015 Capella Ibarra inició la persecución contra Mazari Hernández al divulgar una lista de los 15 hombres y mujeres de mayor peligro para la sociedad morelense. La lista fue encabezada por El Carrete o el Señor de los Caballos, considerado por las autoridades como el líder del cártel de “Los Rojos”. Desde entonces se convirtió en el hombre mas buscado por la Fiscalía General y la Comisión Estatal de Seguridad Pública.

En ese hecho inédito el comisionado Capella publicitó las imágenes de los hombres y mujeres que, dijo, tienen orden de aprehensión por los delitos de secuestro, homicidio y evasión de reos, entre otros.”

• post it

Acudir al zócalo, decía hace algunos años mi querido Germán Dehesa, es una tradición muy mexicana.

Los globos, las nieves, los elotes y los esquites, los licuados, las burbujas de jabón, la artesanía, los payasos, los mariachis, la gente bailando, los jóvenes cantando… todo eso es parte del colorido de México. En estos espacios convergen todos los estratos sociales y se conjugan todas las manifestaciones de nuestra sociedad; al zócalo algunos van a caminar y a pasear, otros a comer y algunos más a manifestarse.

El de Cuernavaca es un zócalo multicolor, lleno de vida, representativo de nuestra tierra y apreciado por la gente. En nuestro centro histórico se dan cita muchas familias que disfrutan del clima y conviven en un espacio de todos; ahí llegan también desde todos los puntos del estado ciudadanos que reclaman sus derechos y exigen solución a sus problemas. Nuestra plaza de armas es escenario de múltiples manifestaciones cívicas y convivencias populares.

Desde hace muchos años el primer cuadro de Cuernavaca ha provocado tentación a gobernantes que quieren ponerle su sello personal; alcaldes y gobernadores han modificado el entorno de la plaza de armas, la remodelan, la cambian, le ponen y le quitan esculturas, pero siempre respetan su esencia.

El ordenamiento del comercio ambulante ha sido un constante dolor de cabeza para los gobiernos; algunos logran ordenar temporalmente a los comerciantes y otros les vuelven a dar libertad para que se apropien de los espacios públicos. En los últimos años la línea ha sido una: regular, ordenar, modernizar y mejorar a quienes trabajan en el centro histórico.

Los gobiernos de Jorge Morales Barud y el de Cuauhtémoc Blanco apostaron por el ordenamiento del comercio ambulante. El primero se enfrentó a la mafia del Nuevo Grupo Sindical, sacó a muchos comerciantes irregulares y metió orden en el primer cuadro. El segundo siguió esa línea y además de reordenar a los comerciantes, cambió su imagen y modernizó la infraestructura de los semifijos.

Desde el ejecutivo estatal el gobernador apostó por el remozamiento del centro histórico: mejoró la calle Guerrero (la hizo peatonal), creó una Ecozona y luego invirtieron muchos millones en el embellecimiento de la plaza de armas. Todos saben que el primer cuadro de Cuernavaca es el corazón de la capital.

Pero esto puede estar a punto de cambiar luego de que el ejecutivo estatal se adueñó de la plaza de armas; a través de un decreto Graco Ramírez arrebató al gobierno capitalino el manejo del zócalo y de inmediato comenzó a hacer cambios en su operación.

Hace unos días Alberto Barona, secretario de administración del gobierno estatal, un joven con mas hormonas que neuronas, afirmó que el espectáculo de los payasos del zócalo había sido retirado porque “ofendía la dignidad de las mujeres”.

Sin abundar más en su declaración, el funcionario estatal simplemente acotó que “Nadie que ofenda a las personas puede estar en la plaza y que no tenga el permiso correspondiente podrá hacer uso de ella… Lo único que no tiene cabida en esta Plaza Cívica es la falta de civilidad, son bienvenidas todas expresiones artísticas y culturales, todas son bienvenidas, pero con orden y respeto para el disfrute de las familia”. ¿Qué dijeron los payasos para que los quitaran así?

Al mismo tiempo del retiro de los payasos, el ejecutivo estatal ha anunciado que se sacarán a todos los vendedores ambulantes, aún aquellos que cuentan con permiso. En contraparte destacan el éxito de la Ecozona y los beneficios que esta medida ha traído a los comerciantes del lugar.

Frente a las declaraciones optimistas del gobierno están los recurrentes reclamos de los empresarios y comerciantes del centro histórico: negocios cierran, las ventas bajan y la inseguridad es cosa de todos los días. No hay semana en la que no se registren incidentes violentos, cierre de comercios y peticiones de ayuda de los empresarios del lugar. “La Ecozona fracasó, es una ocurrencia” insisten las cámaras empresariales… ni siquiera es un lugar ecológico” insisten.

Puede entenderse que el gobierno estatal trate de mejorar el primer cuadro y regular el comercio, pero está tomando decisiones equivocadas. Arrebatar la plaza de armas a los ciudadanos (no al ayuntamiento) y quitar la esencia al zócalo es una medida que ya está causando repudio popular y airados reclamos desde muchos sectores.

Ahora además de pelearse con los políticos, la prensa y sus críticos, Graco se confronta con los ciudadanos.

• redes sociales

Primero no comunican.

Ahora hacen videos.

¿Quién diseña las estrategias en la nueva visión?

• es viernes

Hay veces que sólo el tiempo desenreda las madejas y sólo el tiempo va colocando a cada quien en su lugar. Esto no implica desperdiciar ese tiempo; lo podemos aprovechar para disfrutar de amores, gozos y felicidades que no dependen de trapacerías políticas.

Puedes leer un buen libro, puedes dar un buen abrazo y puedes redactar tu libro del buen amor o simplemente puede abrazar con amor.

En estos territorios no hay ¿quién sabe?, lo que hay es que “cada quien sabe”. Recuerda que la vida sabe algo que nosotros no sabemos.

Por eso: Hoy Toca.

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