Nos dicen que el gobernador panista de Aguascalientes, Martín Orozco Sandoval, anda con pies de plomo y, lo que menos quiere es que lo sigan comparando con su antecesor priísta Carlos Lozano de la Torre o que sus gobernados recuerden que su triunfo electoral pasó por tribunales federales, luego de la presunta injerencia de jerarcas católicos, quienes habrían sumado votos a su favor.

Es tanta la preocupación de don Martín por hacer las cosas bien, nos platican, que ya le leyó la cartilla a constructoras para que no se hagan rosca y entreguen a tiempo las obras y, así no lo tilden de incumplido. El detalle, nos señalan, es que las voces discordantes no se han hecho esperar, principalmente de Nora Ruvalcaba, ex candidata a gobernadora de Morena, quien le tiene marcaje personal y le pide cuentas, afirmando, que en los 100 días que van de la administración lo único que se ha visto son prácticas heredadas de gobiernos anteriores. ¿Don Martín va despacio o doña Nora es impaciente?

Alcaldesa precavida en Sinaloa

Sorpresa y descontentó generó Nubia Ramos Carvajal, alcaldesa priísta de El Fuerte. Nos cuentan que luego de quejarse con quien la quisiera escuchar, por la estrechez financiera que encontró en la Tesorería de ese Pueblo Mágico, dejó a todos con la boca abierta al aparecerse a bordo de una lujosa camioneta Tahoe 2017, con un valor estimado de más de un millón de pesos. La deuda del ayuntamiento, nos explican, asciende a más de 98 mdp, incluidos los 8 millones necesarios para saldar el consumo de energía eléctrica de las plantas potabilizadoras que suministran agua a la población. Como respuesta, nos comparten, doña Nuria ha dicho que se decidió la compra de la camioneta a crédito y con cargo al erario, por cuestiones de seguridad, pues se expone constantemente en sus recorridos por la entidad. Ahora, nos dicen, lo difícil será explicarle a los ciudadanos que lo importante es que ande segura, aunque sigan los cortes recurrentes del agua potable.

¿Se incomoda chiquillada política en Morelos?

Al parecer, nos comparten, el acuerdo parlamentario para reducir de 30 a 20 los diputados del Congreso caló hondo en la chiquillada política, principalmente en los partidos de reciente creación, pues la reforma electoral incluye la disminución de diputaciones plurinominales; de 12 curules ahora sólo serán ocho los espacios para los legisladores de representación proporcional. El detalle, nos platican, es que el descontento es “de pantalla”, pues sólo un diputado del Partido Humanista se opuso abiertamente a la enmienda constitucional. Se trató del legislador Jesús Escamilla, quien gritó a sus compañeros a todo pulmón: “No tenemos chance de competir en las mismas circunstancias”, pero ningún legislador le hizo jalón.

¿Por qué sonríe el edil de Veracruz?

Al que han visto muy sonriente, nos comparten, es a Ramón Poo Gil, alcalde priísta de Veracruz, pues está confiado de que ahora que aprobaron la reestructuración de la deuda pública de la entidad, el gobernador Miguel Ángel Yunes por fin pagará los adeudos que tiene el gobierno del estado con los ayuntamientos. No es para menos, nos confirman, pues sólo a ese municipio se le deben 340 millones de pesos. Mientras tanto, nos explican, habrá que esperar a que la Secretaría de Finanzas reconozca la deuda, no vaya a ser que a don Ramón se le borre la sonrisa.