Los diputados se hicieron Harakiri
Cierran espacios de participación
(…) en realidad no es el número de diputados,
Con la pretensión de anular la posibilidad de Cuauhtémoc Blanco de registrarse como candidato a gobernador, el Congreso del Estado siguiendo las instrucciones del “sheriff” Rodrigo Gayosso, impulsó una serie de reformas entre las que aprobó endurecer los requisitos para los puestos de elección popular.
Desde luego esto va a provocar una serie de amparos y controversias constitucionales, porque si lo hicieron pensando en anular las candidaturas de algunos personajes como Blanco Bravo para el 2018 violan flagrantemente el ARTÍCULO 14 constitucional que dice: “ A ninguna ley se dará efecto retroactivo en perjuicio de persona alguna”. Ya veremos la que se desata en tribunales, PRESAGIAMOS UN DESMADRE JURÍDICO, pero esa es otra bronca.
Las reformas aprobadas por la borregada de Matamoros 10, actuó contra sí misma, ya que para tratar de ganar la gracia del pueblo que los repudia por traidores y vendidos, al servicio del poder y del dinero que les arrojan, los legisladores de Morelos redujeron el número de futuros diputados de treinta curules, a solamente 20, para “ahorrar” el dispendio que causan los legisladores.
Cuando en realidad no es el número de diputados, sino el saqueo y el desvío de los recursos del presupuesto, el exceso de aviadoras, y cargos inventados para las amantes, los cuates, y los compadres, lo que carga todo el erario, en los tres poderes.
El dispendio esta en otros rubros, como el crédito de dos mil 800 millones de pesos que le aprobaron a Graco Ramírez, capital que no ha sido debidamente documentado, es decir, desapareció, ahí está el dispendio, en el saqueo, y en las compras a las que se les carga el diez, el veinte, o el treinta por ciento de sobreprecio que se cobra como derecho de piso. Ahí está el dispendio. Lo que urge es un control ético más escrupuloso en la revisión del gasto público, revisar con lupa, y hacer que las observaciones se solventen retribuyendo
Las cantidades desviadas del erario público, no hay más, evitar el dispendio, el saqueo y los gastos no comprobables. No destruir instituciones, ni reducir diputados.
Al reducir el número de diputados, le cortan el oxígeno a la clase policía y a los partidos, reducen los espacios de poder, y se estrechan las cuotas de participación democrática para expresar en el Congreso, que es la asamblea de representantes del pueblo, se hicieron harakiri.
Si la democracia moderna implica darles voz y voto a las minorías, estas reformas son antidemocráticas, porque al modificarse el artículo 24 constitucional de Morelos, y exigir que aumente a 5% el porcentaje de captación de votos totales de una elección, que hasta hoy es del 3%, lo que provocan es que los partidos chicos, la chiquillada se quede fuera del juego político, fuera del presupuesto, y vivir fuera del presupuesto es vivir en el error.
Los cerebros de estas reformas consideran que hay que ahorrar despidiendo diputados y exigiendo más porcentaje de votos, para las diputaciones plurinominales.
Estos es endurecer los requisitos para llegar al congreso, que queden en la jugada solo los más hábiles para comunicarse y conseguir convencer a la ciudadanía de que les otorgue su voto.
Olvidan que en política todo lo que se puede comprar es barato, porque si la democracia y la política cuestan caras, cuesta más la guerra. Clausewitz define la guerra como "un acto de fuerza dirigido a obligar a nuestro enemigo a cumplir nuestra voluntad”.
Cerrar cauces de participación política formal a los distintos grupos que se congregan en los partidos, los que tienen distintos puntos de vista sobre el accionar del gobierno, y desean influir en las decisiones, verán cerradas las puertas, y ahí nacen los grupos de presión, y luego las guerrillas.
Pensarán los novatos que exagero, pero los años que tengo me dan la razón.
El movimiento de 1968 y su matanza de Tlatelolco lograron la apertura democrática en este país, a partir de entonces se permitió registro a partidos de izquierda y derecha que antes estaban prohibidos, inició la libertad política y disminuyeron las guerrillas.
Bueno ahí tienen ustedes a Jesús Zambrano, uno de los líderes de “Los Chuchos”, que era un guerrillero activo de la Liga Comunista 23 de Septiembre, que fue herido en una batalla con el ejército y la policía, fue llevado preso, y después se convirtió a la política, hoy es líder del PRD aunque lleva las huellas de un balazo en el paladar.
Y ahí está también el director del IEBEM Fernando Pacheco Godínez que también fue un activista y cruzó el clandestinaje, y la militancia ilegal, en grupos extremistas de Tepoztlán y participó también en un grupo armado de la guerrilla en el vecino estado de Guerrero, viejo conocido de Graco Ramírez, quien también vivió en el clandestinaje y estuvo en la cárcel por su participación en el Movimiento Estudiantil de1968; Pacheco se convirtió el correo del zar entre Graco clandestino y Don Lauro que apadrinaba porros, nos cuentan que Pacheco recibía la maleta de dinero que le mandaba Don Lauro Ortega a través de David Jiménez, por eso entre Don David hoy aspirante a gobernador, y Graco hay antiguas complicidades, hoy gobernador de Morelos de manos de un alto funcionario que vive para contarlo, y por eso yo lo sé.
Desde entonces Graco vivía de la extorsión y Pacheco estaba cerca, por eso hoy ocupa el puesto de mandamás del IEBEM, de donde fue despedido, pero lo salvó el entonces asesor jurídico de esa institución que tenía otros nombre, ese asesor, es Juan Juárez Rivas que le conoce todos los intríngulis a Pacheco.
Quiero decir con esto, que los actuales gobernantes y funcionarios de alto nivel de Morelos estuvieron fuera de la ley como activistas, porque no tenían cauces legales para participar con sus inquietudes políticas, ellos fueron los principales beneficiarios de la apertura política del país, que abrió las puertas de la apertura a los nuevos grupos y creo las diputaciones de partido, hoy llamadas plurinominales, legal que los llevaron a encumbrarse, y que hoy dan marcha atrás, con reformas como estas que acaban de aprobar en Morelos, cierran las puertas a las nuevas generaciones de jóvenes políticos y eso es un crimen de lesa humanidad.
Paradójicamente hoy que llegan al poder actúan como sátrapas, como autócratas, como émulos de Trump, ni parecen de la izquierda, son más reaccionarios que la ultraderecha del Yunque.
Decimos esto sin exageración, la política se inventó para evitar las guerras, para negociar y obtener, a través de acuerdos, lo que no podríamos obtener, sin ceder algo que no querríamos entregar, sino es a cambio de algo, Ese es el precio de la paz en todo el planeta, por eso la política es sucia, porque, política es negociar, siempre negocia con mayor provecho el más poderoso: por ejemplo Estados Unidos nos perdonó la vida, a cambio de quedarse con la mitad del territorio nacional”.
Si no hubiera aceptado el gobierno esa negociación habrían invadido todo el país, quien sabe cómo estaríamos hoy, quizá mejor, quizá más esclavos, por eso hay que entender la definición clásica de Clausewitz: “La guerra es el último recurso de la política”. Moraleja con manzanitas para los que son duros de entendederas: Al cerrar espacios y cauces políticos, al endurecer las formas y las leyes, lo único que van a provocar es desesperación el los grupos de participación ciudadana, y, a la postre habrá inestabilidad, más violencia y hasta guerrilla.
Ese es el precio que Morelos y los morelenses pagarán por este retroceso, antidemocrático contenido en las reformas, ese será el fruto futuro de sus cambios. Señores diputados, por si no lo habían pensado, ustedes mismos se cierran espacios en el futuro. Y VOY POR MÁS…
* Karl Von Clausewitz, su obra máxima “De la guerra” fue un politólogo alemán, que ha sido poco estudiado a profundidad, dicen los que saben, su frase más divulgada: "La guerra no es un fenómeno independiente sino la continuación de la política por otros medios”.