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SERPIENTES Y ESCALERAS

La corrupción que padece Morelos no es exclusiva del gobierno estatal, las dependencias federales también se han convertido en botín económico y político de sus titulares; las delegaciones están constantemente tomadas por ciudadanos que reclaman y denuncian. Ahora es el PRI quien alerta del mal manejo de los delegados.

 

Poco a poco se comienza a abrir la Caja de Pandora en Morelos. Conforme se acercan los tiempos electorales, el nerviosismo político aumenta y el debate sube de tono. Día a día se va acabando la institucionalidad de los primeros años del sexenio; lo que vemos ahora es la discusión de varios asuntos relacionados con la sucesión y el rol más activo de algunos actores de poder en la carrera electoral. Los delegados graquistas son uno de los temas que empiezan a discutirse públicamente.

Desde hace varios meses (¿años?) se conoce del actuar de algunos funcionarios federales en el escenario local. El rol de los representantes del gobierno de la república en la entidad es llamativo, pues aunque pertenecen a un partido distinto al del gobernador y su función debería estar marcada por la imparcialidad e institucionalidad, nunca ha sido de esa manera.

Uno de los casos más llamativos es el de la SEDESOL de Jorge Meade Ocaranza; esa oficina, constantemente tomada por ciudadanos que reclaman al delegado su forma de manejar los recursos y bajar los apoyos, es la más polémica de todas. Al funcionario lo han acusado innumerables ocasiones de corrupción, malos manejos, orientación partidista de programas y condicionamiento de apoyos. La dependencia es cotidianamente bloqueada por campesinos, adultos mayores, mujeres y diversos grupos de ciudadanos; todos acusan a Meade de lo mismo y todos, invariablemente, señalan que la SEDESOL se utiliza para favorecer a un partido: el PRD.

En el caso de Meade la historia se adereza con otros elementos: su hijo fue el coordinador de la campaña del candidato del PRD en Cuernavaca, luego se incorporó como funcionario del gobierno de Graco Ramírez y ahora apoya al alcalde Cuauhtémoc Blanco y al PES. Durante las elecciones del 2015 algunos perredistas presumían el respaldo de la SEDESOL y utilizaban los padrones de beneficiarios de programas federales para hacer proselitismo amarillo. Nadie en el PRI desconoce los intereses que mueven al delegado Meade Ocaranza.

Al iniciar esta semana el coordinador de los diputados locales del Revolucionario institucional alzó la voz en ese sentido; Alberto Martínez afirmó que varios delegados federales “bailan al son del gobierno de Graco Ramírez” en lugar de atender las necesidades de los ciudadanos de Morelos. "Queremos que las delegaciones federales sean más abiertas y que no estén subyugadas al gobierno del estado; en algunos momentos hemos visto que los delegados tocan al son del gobierno del estado y no debe ser así".

La actuación de algunos delegados ya llamó la atención en la CDMX; el relevo del representante de la SEGOB en Morelos, unos días después de que se lanzara en contra del Obispo de Cuernavaca, parecería un mensaje del gobierno de la república. Lo mismo podría suceder, cuentan, en otras oficinas que de la misma manera hacen negocios personales y orientan la inversión a donde les conviene.

Las acusaciones contra algunos delegados federales vienen de tiempo atrás y son, en su mayoría, de ciudadanos. Hoy es el grupo parlamentario del PRI quien retoma un asunto que, por cierto, también fue denunciado hace algunos meses por legisladores federales. Pero lo de fondo en esta historia no está en el debate entre los actores de poder, sino en el sentimiento ciudadano de que en varias delegaciones se están manejando mal los recursos públicos y abusando de los programas.

El caso de la SEDATU y del ISSSTE también son llamativos: Rodrigo Peña se dio a conocer porque presumía ser primo del presidente Enrique Peña Nieto y luego de ello ha sido acusado varias veces de misoginia y de hacer negocios con los programas a su cargo. Al funcionario lo han acusado de “recomendar” constructores a los municipios y poner cuotas a cambio de asignación de recursos. Muchas veces sus oficinas han sido tomadas y en todas le reclaman su actitud prepotente y la falta de probidad en su actuación.

De Guillermo del Valle se mencionan cosas similares. Aunque la oficina no maneja programas federales, los trabajadores de la dependencia denuncian abusos en el manejo de los recursos públicos y maltrato al personal. Al delegado lo han señalado por acoso sexual, son públicos los escándalos maritales dentro de las instalaciones y una a una se documentan las acciones irregulares. En su fiesta de cumpleaños, narran, mandó al personal de las oficinas a llenar el lugar y obligó a varios proveedores a financiar su pachanga.

El problema de los delegados federales tiene varios rostros. Políticamente al priísmo le afecta que algunos de los representantes de su gobierno de Enrique Peña Nieto trabajen a favor de los intereses de una administración (la de Graco) que los ha perseguido a lo largo del sexenio. Los ciudadanos, por su parte, reclaman que varios delegados lucran con los recursos, abusan del poder y maltratan a los ciudadanos.

Los personajes en cuestión se defienden con argumentos demagógicos, hablan de sus años de militancia, de su intachable currículo y los aplausos que les brinda la gente en sus eventos. Nada dicen de las denuncias en su contra, de los bloqueos a sus dependencias o de la documentación que poco a poco comienzan a liberar de sus propias oficinas. Son políticos que maquillan la realidad igual que sus rostros.

La salida del delegado de la SEGOB en Morelos podría ser el primero de varios cambios en dependencias federales. Los delegados antes mencionados (SEDESOL, SEDATU e ISSSTE) tienen aspiraciones personales y presumen capital político para ir a campaña. El tiempo dirá cuál de ellos trasciende al encargo que hoy tienen.

Si el PRI y el gobierno de la república los tienen bien calificados, que los postule a un cargo de elección popular. Veremos quién de ellos gana.

  • posdata

La semana pasada acudió a Morelos Dante Delgado, se reunió con la dirigencia estatal del partido y con el ex diputado Francisco Coronato. El líder de MC reintegró al movimiento a un hombre con una alta calidad moral y buen reconocimiento público; aunque Coronato no está afiliado a MC, es amigo personal de Dante y una de las mejores cartas que tienen los naranjas en Morelos.

El ex diputado federal tiene un papel muy importante en el proyecto de Movimiento Ciudadano rumbo al 2018; igual que Enrique Alfaro en Jalisco o Raúl Mejía en Nayarit, en Morelos Dante Delgado está concediendo a Francisco Coronato la facultad de identificar y sumar figuras ciudadanas que fortalezcan la propuesta del partido y coloquen al movimiento naranja en el ánimo de la sociedad. La puerta ciudadana de MC en Morelos es Coronato.

La dirigencia nacional del partido naranja, dicen, tiene interés de que en Morelos su partido recupere presencia e identificación con la sociedad, de ahí la visita de Dante. El trabajo que comenzará en algunas semanas Coronato será interesante y podría marcar la pauta de lo que ese partido buscará en las elecciones del 2018.

Habría que recordar que a pesar de su institucionalidad y respetuoso manejo público, Francisco Coronato nunca ha validado el actuar del gobernador Graco Ramírez ni los resultados de su gobierno. Si de él depende (y pareciera que esa facultad se la está concediendo Dante Delgado), el partido naranja no hará alianza con el PRD.

La cercanía de MC con el gobierno de Nueva Visión ha lastimado mucho (muchísimo) al partido naranja en Morelos; la incorporación de Coronato y la encomienda que le otorga Dante Delgado es para hacer contraste con lo hecho en los últimos años en un esfuerzo por mantener el registro y tratar de recuperar la identidad que en otro tiempo llegó a tener esa oferta política.

  • nota

El duelo entre el gobernador de Morelos y el obispo de Cuernavaca ha escalado. El primero presiona a la Secretaría de Gobernación para que sancione a Ramón Castro mientras que el segundo recibe apoyo de la comunidad eclesiástica de México. Esto publica el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México:

Ante los ataques, calumnias y difamaciones de que ha sido objeto Mons. Ramón Castro Castro, Obispo de Cuernavaca, por parte del Gobernador de Morelos, Graco Ramírez Garrido, la Provincia Eclesiástica de México, encabezada por la Arquidiócesis Primada de México, y a la que pertenecen las diócesis sufragáneas de Cuernavaca, Toluca, Tenancingo y Atlacomulco, dirigió una carta de apoyo al Obispo, misma que se ha hecho del conocimiento de sacerdotes, fieles y personas de buena voluntad de la Diócesis de Cuernavaca.
En días recientes, Mons. Castro señaló que el Gobernador Graco Ramírez mantiene una embestida en su contra a base de falsedades, como el hecho de que recientemente haya asegurado públicamente que él recibió directamente del Gobierno Federal 75 millones de pesos para la restauración de la Catedral, de los cuales “extrajo dos para la construcción de una cancha de tenis en el Seminario”; cuando en realidad, para dichos trabajos en el recinto catedralicio sólo se recibieron 25 millones de pesos, mismos que administra el Municipio de Cuernavaca, y en cuanto a la cancha de tenis, cabe decir que no se construyó ahora, sino entre 2014 y 2015 “con muchísimos esfuerzos”.

Uno de los enojos del Gobernador –aseguró el Obispo de Cuernavaca– es que él en días pasados, debido a la extrema violencia que se vive en la entidad, convocó a políticos, funcionarios públicos y civiles a una reunión para pedirles trabajar en conjunto por el bien de la comunidad; reunión por la que, incluso, el Delegado de Gobernación en Morelos, Gerardo Cubría, lo ha acusado de violar el artículo 130 constitucional, siendo que no ha hecho proselitismo a favor de ningún partido político o candidato, que es lo que establece la constitución; en Morelos, por principio de cuentas, no se viven periodos electorales.
En la carta de apoyo de la Provincia Eclesiástica de México a Mons. Castro, firmada por el Card. Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México; Mons. Francisco Chavolla, Obispo de Toluca; Mons. Raúl Gómez González, Obispo de Tenancingo, y Mons. Juan Martínez García, Obispo de Atlacomulco, así como por Obispos Auxiliares de la Arquidiócesis de México, se le expresa de manera clara, abierta y absoluta su solidaridad, “por los constantes ataques, calumnias, difamaciones y persecuciones de que has sido objeto desde tu llegada a la Diócesis hermana de Cuernavaca”.

 “Conocemos tu probidad –prosigue el texto– y la hemos constatado en la responsabilidad que la propia Conferencia Episcopal Mexicana te ha confiado al nombrarte miembro del Consejo de Presidencia, como administrador de los recursos de la Iglesia Mexicana. Sabemos además de tu entusiasmo, caridad y entrega pastoral como promotor incansable a favor de la justicia y la paz, al estilo del pastor con olor a oveja, como el Papa Francisco nos ha pedido con insistencia”.

Finalmente, en dicha misiva, los Obispo y sacerdotes de la Provincia Eclesiástica de México manifiestan su respaldo a Mons. Ramón Castro y lo animan a seguir “con tu espíritu profético, en favor del pueblo de Dios que camina en Morelos, y que la Iglesia ha confiado a tu cuidado pastoral”.

Cabe señalar que Mons. Castro Castro, a través de un tuit, agradeció a la Provincia Eclesiástica de México la carta de solidaridad y apoyo que le ha sido enviada. “¡Dios les pague!

  • post it

El panorama electoral para los diputados de Morelos es cada día más complicado. La gobernabilidad legislativa se dificulta y el desgaste exterior no cesa. El futuro de los legisladores depende de su capacidad de reinventarse, de recuperar respeto de la sociedad y dejar de comprar conflictos ajenos.

Confrontarse y perder autonomía los ha colocado en una situación muy difícil e inocultable; dejar las calles y refugiarse en las oficinas es un acto suicida. ¿Quién de ellos será capaz de dar el primer paso para revalorar su autonomía y seguir sus convicciones?

Ojo, el tiempo avanza y cada día es uno menos en el poder. El saludo mañanero a la clase política actual es simple: ¡Menos días!

  • redes sociales

No es lo mismo tuitero que comunicador… mucho menos estratega de medios.

Comentarios para una columna entretenida: eolopacheco@elregional.com.mx

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