El gobernador Javier Corral puso en marcha la operación Justicia para Chihuahua, que tiene por objetivo aprehender a su antecesor, César Duarte Jáquez, acusado de tejer “toda una red de corrupción” para saquear el estado.
En conferencia de prensa dio a conocer que el ex mandatario es prófugo de la justicia y huyó a Estados Unidos, por lo que ya se solicitó una orden de detención con fines de extradición a las autoridades de ese país.
Sostuvo que ya se integraron de manera cuidadosa las carpetas de investigación para castigar a los responsables del latrocinio y poder resarcir el patrimonio saqueado.
“César Horacio Duarte Jáquez es un prófugo de la justicia y ha huido a El Paso, Texas, para evitar su captura, incumpliendo así su palabra empeñada de hacer frente a los señalamientos de corrupción que profusamente se le han venido haciendo”, expresó.
Corral explicó que se giró la orden de aprehensión por peculado, aunque la Fiscalía General del Estado subrayó que son varios los delitos que cometió, entre ellos corrupción y enriquecimiento ilícito, lo que originó una deuda estatal por más de 50 mil millones de pesos.
“Estamos apenas con el inicio de una estrategia jurídica en la que vamos por toda la red de corrupción. Haremos las gestiones para pedir la detención de Duarte en Estados Unidos con fines de extradición.
“Haremos votos para que sea expulsado bajo la cláusula de repatriación por pernicioso e indeseable de aquel país”, declaró el gobernador.
De acuerdo con las indagatorias, el lunes pasado Duarte se encontraba en El Paso, luego de que tres ex funcionarios de su administración fueron detenidos por malversar fondos y trasladados al Centro de Reinserción Social de Aquiles Serdán.
“Derivado de las órdenes de aprehensión de distintos jueces, la Fiscalía General del Estado ha logrado ya la detención de tres ex funcionarios del primer círculo del ex gobernador César Duarte, acusados de peculado.
“Tenemos un amplio trabajo de investigación y un caudal probatorio que rigurosamente hemos conjuntado para acreditar ante los jueces cómo el ex gobernador y sus cómplices, unidos en un grupo compacto, hicieron uso del poder para beneficio personal”, precisó.
Corral puntualizó que el suplente del fallecido diputado federal Carlos Hermosillo, Antonio Enrique Tarín García, no pudo rendir protesta en San Lázaro.
Aseguró que Duarte y Tarín García son prófugos de la justicia y tratan de evitar su captura recurriendo a métodos reprobables por la ética política. Uno, internándose en Estados Unidos, y otro, tratando de refugiarse en el fuero constitucional.
“De darle facilidades para protestar al cargo, iniciaremos el juicio de procedencia que, sin duda, acarreará a sus protectores más perjuicio que beneficio, por supuesto; el desprestigio ante la nación de saber que protegen a un perseguido de la justicia”, dijo.
La tarde de ayer, detalló Corral, se catearon diversas propiedades de los cercanos a Duarte. También destacó el arresto del ex secretario de Obras Públicas y ex alcalde de Chihuahua, Javier Garfio Pacheco; del ex director administrativo de la Secretaría de Hacienda estatal, Gerardo Villegas Madriles, y del ex secretario de Educación, Ricardo Yáñez Herrera. Los tres, por peculado.
Cabe mencionar que el ciudadano Jaime García Chávez denunció a Duarte ante la Procuraduría General de la República en noviembre pasado por lavado de dinero, con la creación del Banco Unión Progreso.
CLAVES
“GOLPETEO POLÍTICO”
El gobernador Javier Corral calificó de “golpeteo político de parte del gobierno federal” las acusaciones de su falta de compromiso con la seguridad.
Aseguró que la violencia es “un lastre heredado” tras las declaraciones del titular de Gobernación de que Chihuahua “se descompuso”.
“Hay una intentona de magnificar los asuntos... se ve una campaña orquestada que ha rubricado el secretario Miguel Ángel Osorio Chong”, dijo.