El ex presidente Vicente Fox asegura que no tiene partido ni nada que perder. Por eso dice que enfrenta al “loco, zonzo” de Donald Trump.
En entrevista con EL UNIVERSAL, también es claridoso cuando afirma que en 2012 Josefina Vázquez Mota no fue una buena candidata, pero que tiene una oportunidad como aspirante a gobernadora del Estado de México.
El ex panista, quien fue expulsado del blanquiazul por apoyar al PRI, advierte que no da por muerto al tricolor pero que una alianza PAN-PRD en 2018 puede ser exitosa.
Advierte que empresas mexicanas que participen en el muro, “¿van a agarrar monedas de ese judas? Qué equivocados están y qué poco sentido patrio tienen”.
Aunque admite que el gobierno ha jugado el papel justo pero debe tener una raya de firmeza y pararse de la mesa si es necesario.
“El Congreso se ha visto flojo. Necesita hacer el papel del feo o del malo de la película ante Trump”, asegura.
Durante dos días el ex mandatario encabezó un foro con ex presidentes como Eduardo Frei, de Chile, y Laura Chinchilla, de Costa Rica, en el Centro Fox y con el Club de Madrid. Se ve fatigado, quiere irse a descansar.
¿Cuál es el riesgo del populismo y la alerta que se lanza con varios ex presidentes de la región?
—El populismo es una degradación de la democracia, es un engaño y burla a la democracia, que tipos como Hugo Chávez usen el proceso democrático para llegar al poder y luego enquistarse. Así estamos en Bolivia, Ecuador, Nicaragua. Hay que sacudirse ese populismo que traemos en las venas, ahí están los ejemplos de Perón y los Kirchner en Argentina, con populismo en grado extremo. En México lo tuvimos con Luis Echeverría (1970-1976) y estamos amenazados por Andrés Manuel López Obrador de imponernos un régimen populista, mentiroso y de engaño. Basta echar la mirada para ver a Venezuela destrozada, sin empleo, sin medicinas ni alimentos y presos políticos. López Obrador es uno de ellos y anda por el mundo diciendo que él va a resolver todo, así lo hizo Donald Trump en Estados Unidos (EU), pero ya cayó de la gracia de sus seguidores y hoy ya es un presidente muerto en EU porque han dejado de hacerle caso.
Vicente Fox prácticamente tomó la vocería contra Trump, ¿por qué?
—La primera es que nos sorprendió gravemente al decir lo que dijo de los mexicanos, ofendió. Además, todo lo que hace Trump es peligrosísimo para Estados Unidos en primer lugar y para México en segundo lugar y para el mundo entero en tercer lugar. Por eso decidí saltar a la arena y dar mi pelea por la gente de mi país porque veo tormenta con este tipo. También veo la demagogia y el populismo que hemos vivido en América Latina y que hay que hacer lo necesario para que alguien destruya las cosas. El Obamacare no se lo apoyaron ni los republicanos y el muro está claro que no lo va a pagar México, es el único zonzo que cree que puede cobrar el muro a México.
¿Le han pedido callarse?
—Sé que lee mis tuits y le interesa todo lo que se dice de él. Pero es un cínico, porque sigue apareciendo ahí en la TV como si nada. Se hace de la vista gorda, niega la realidad sólo en su realidad alterna, que él cree y no la que todos vemos.
Algunas empresas mexicanas han mostrado interés en participar en esa construcción del muro…
—Es pírrico hacer dinero con una traición a México. Me recuerda a las monedas de Judas. ¿Van a agarrar monedas de ese Judas? Qué equivocados están y qué poco sentido patrio tienen. No hay dinero que alcance en el mundo para recuperar nuestra dignidad. Para un mexicano entrarle a eso es una verdadera traición a la patria.
¿Cómo valora la actitud del gobierno mexicano ante Trump? ¿Ha sido tibio?
—Ha sido el papel justo. Me refiero a la película de El bueno, el malo y el feo. Creo que el gobierno mexicano debe dar la oportunidad de gobierno a gobierno de la posibilidad de una negociación constructiva en la que los tres ganemos: Canadá, Estados Unidos y México. Pero debe tener una raya de firmeza absoluta en caso de que se transgreda esa objetividad que debe prevalecer en un acuerdo de comercio y pararse de la mesa en el momento que fuera necesario y rechazar cualquier intento de abuso.
Si Trump cree que es bueno quitar empleos a México para llevarlos a Estados Unidos está loco. México más vale que no lo acepte, quien quiera que acepte eso sería traición a la patria.
El bueno es el gobierno que trate de buscar una salida para todos, junto con Canadá, porque de lo contrario el monstruo también va a atropellar a Canadá. Más vale que toda América Latina tenga una solidaridad total con México, porque se va a seguir con Chile, Colombia y los demás.
Hay que poner un dique. Jugarle al feo o al malo, creo que el Congreso mexicano, defensor de la patria y de la soberanía hoy está ausente, callado, no hacen declaraciones y debieran tomar decisiones de Congreso, en el Senado y Cámara de Diputados, diciéndole que no se va a pagar el muro, y también decirle a Trump lo que hay que decirle, que con la soberanía nacional no se juega, que México levante más y más la voz. Que ni sus bombas atómicas ni poderío nos va a espantar o a hacer recular.
¿Usted está haciendo el papel del malo?
—Del malo, del feo, lo agarro con todo gusto, porque yo no tengo más que perder porque no tengo partido político ni intereses económicos.
¿El Congreso se ha visto…?
—Flojo. Necesita hacer el papel del feo o del malo. El Congreso puede meterle un calambre a las instituciones de Estados Unidos. Pero hay que decirle: “Tú sígueme jodiendo y te las vas ver conmigo en el callejón de los… ” [da un puñetazo en la palma de la mano].
Legalizar las drogas...
—Ese es un camino y una iniciativa que México debe tomar. Ya no le hagamos el juego a Estados Unidos que es totalmente incongruente, por un lado aprueban uso de drogas y por otro da el mandato de dar la guerra contra las drogas. Esa fue una grave, grave equivocación de Felipe Calderón, el haber aceptado ese papel, el haber aceptado 500 millones de dólares que le dio el gobierno americano para hacer la tarea sucia de pagar con vidas de jóvenes mexicanos para tratar de evitar que la droga no llegue a Estados Unidos. Fue un error histórico ese, pasamos de tener el mejor indicador de crimen que habíamos tenido en toda la historia en 2006 a ser hoy de los peores en América Latina, andamos por los 26 o 28 crímenes por cada 100 mil habitantes, cuando estuvimos en nueve. Entonces sí esta parte de la seguridad depende mucho de México, pero el Congreso tiene que hablarle claro.
El gobierno de México prácticamente mantiene la misma estrategia contra el narcotráfico, ¿cómo lo valora?
—Estamos mal. México ya debió haber avanzado en legalizar cuando menos la marihuana y no para usos médicos sino para uso total, porque de otra manera estamos en situación muy endeble. Espero que el doctor José Narro ya abra esas puertas porque hay gente con la mente muy cerrada y siguen catalogando la marihuana como una enfermedad y nadie muere por consumir marihuana y sí sirve como medicina, es tiempo de dar ese paso y liberalizarlo. En ese momento le quitamos a los cárteles buena parte de sus recursos.
¿Cómo ve la situación ahora en México en economía, política...?
—Estamos un poco a la deriva. Hay que rescatar ese inicio exitoso del presidente Enrique Peña Nieto de los primeros dos años, hay tiempo para lanzar nuevas iniciativas y dar la madre de todas las batallas contra la corrupción. El ejemplo de Brasil es claro: un juez mete a la cárcel a un montón de ministros, ese es el tipo de juez que requiere México. Que haga la tarea y no perdone a nadie, o como en Guatemala, donde un juez metió a la cárcel a un ex presidente, a un presidente. Ese sería un gran legado del presidente Peña Nieto. Que la reforma anticorrupción se convierta en algo real.
¿Aunque eso signifique cortarse un brazo?
—Aunque sea el que sea…
Porque eso puede implicar cortarse un brazo, un pie…
—No importa, no importa.
¿Cómo ve al presidente Peña?
—Yo lo veo muy bien, lo reconozco, hizo cosas muy importantes. Ha habido errores, creo que culpar al Presidente de todos los males del país ha sido muy mexicano pero muy equivocado. El Presidente de la República no es responsable de lo que pase en Ayotzinapa ni de muchas cosas que se le señalan.
Debemos hacer un análisis de conciencia, ver dónde está, los gobiernos estatales. Hay un cúmulo de corrupción gigantesco. Al presidente Peña ni lo santifico ni lo demonizo. Lo que le pediría es que en este último tramo deje legados profundos, una huella profunda en el país. La primera es enfrentar a Trump y no dejarlo que se salga con la suya; dos, es esta lucha a muerte contra la corrupción; tres, acelerar la reforma energética; cuatro, la reforma educativa; y cinco, la lucha contra el narcotráfico, y en esa la legalización es la solución. Y que los americanos se hagan bolas con su consumo allá.
¿Cómo ve al PRI rumbo a 2018?
—Yo no lo doy por muerto. La puerta hacia la Presidencia de la República pasa por el Estado de México, entonces ya no vamos a desesperarnos mucho y perder la paciencia porque faltan dos meses para la elección y ahí vamos a ver quién es quién. Quien quiera ganar en 2018 tiene que ganar el Estado de México. Además hay una confusión con la elección intermedia de 2015, se dijo que el gran ganador fue la oposición, el PAN, pero la realidad es que el PRI se llevó 14 millones de votos y el PAN 8 millones, el PAN completó sus votos en alianza con el PRD, entonces lo que fue exitoso ahí fue la alianza PAN-PRD. Si esa alianza se logra construir para 2018 puede ser claramente el ganador, pero falta mucho para que eso suceda. Por lo tanto, no hay que dar por muerto al PRI, como tampoco dar por ganador a López Obrador. Qué chiste estar en las encuestas adelante cuando no hay ningún otro competidor más que él. Eso es un engaño. Van a arrancar parejos PAN, PRI y Morena, depende de dónde se vaya el PRD, pero más importante va a ser el que tenga mejor candidato, el que mienta menos, el que ofrezca honestidad y transparencia y ofrezca un futuro para jóvenes y para México; quien maneje las emociones de manera correcta y no los números [de las encuestas] de manera incorrecta. De tener visión como líder y que quien quiera que sea pruebe en los hechos, escrito, firmado en certificado que es honesto y transparente, de que nunca ha hecho pillerías ni tiene contacto alguno con el narcotráfico y tiene experiencia en economía, pues ya lo vimos con Trump. Que acredite su capacidad y ser compasivo con los más pobres. Debemos estar atentos y no dar pase a ninguno porque lo nombre el PRI o el PAN, ni madres. Hay que ver sus credenciales y que se someta a esas pruebas, porque ¿para qué queremos otro ratón allá adentro, otro incapaz?
¿Usted se inclinaría por una alianza PAN-PRD que PRD-Morena?
—Los colores partidistas ya no me mueven, ni me emocionan. Me inclino por la persona y esa todavía no la conocemos. Y la propuesta y credenciales. Si es azul, si es amarillo o verde o colorado, no importa.
¿O independiente?
—Pero el independiente no tiene oportunidad ahora, hay toda una inercia y los partidos políticos tienen fuerte poder en las bases ciudadanas. No veo a nadie ganando ni remotamente sin partidos políticos a nivel nacional, en lo estatal sí se puede.
Ya me habló de López Obrador…
—No me lo preguntes, fuera, no le hagas promoción.
¿Qué opinión tiene de Miguel Ángel Osorio Chong, Luis Videgaray, Aurelio Nuño, José Narro?
—Hasta que no los vea al desnudo no voy a moverme por ninguno. Quiero verlo por escrito. A ver, dame tu declaración patrimonial…
Pero las alteran…
—Y esa declaración patrimonial la vamos a certificar, que sea correcta. Ver su currículum, en qué has tenido éxito, cuál es tu compromiso con la democracia, con los pobres, no podemos dejar pasar a un populista con engaños.
¿Cómo ve a Acción Nacional?
—Son maquinarias electorales, lo importante es qué candidato van a proponer y repito, no quiero nombres ni fotografías o que hable bonito, sino que el candidato pase la prueba del ácido antes de ser candidato, ponerlo al desnudo.
¿Qué piensa de Ricardo Anaya, de Margarita Zavala y de Rafael Moreno Valle?
—Lo mismo, aplica para todos.
¿Por qué usted ya no apoyó a Josefina Vázquez Mota en 2012?
—¡Ay, no me hagas recordar la historia! Vamos a hablar del presente y ahí tiene su oportunidad Josefina en el Estado de México, puede sacar adelante la bandera del PAN adelante. Ya dije. Nadie va a llegar a 2018 si no pasa exitosamente por esa elección.
¿No fue una buena candidata?
—¡Jajajaja! ¡Claro que no! Hay que ganar para ser buen candidato, no se puede ser buen candidato si no se gana. Y aún ganando no se puede ser buen Presidente. Insisto: certificar, verificar. Ya hemos pasado mucho tiempo en la mediocridad en el país, sin crecimiento ni los empleos necesarios, ya es tiempo de que con tiempo aseguremos que el líder de los próximos seis años reúna los requisitos, hacerlo por adelantado y no tragarnos toda la verborrea ni que nos apantallen con caras bonitas y buenas presentaciones. No podemos equivocarnos otra vez en la vida.