Incognitapro

FRENTES POLÍTICOS

I. El beneficio de la duda. A más de una semana de que Pemex diera a conocer los contratos que firmó con la empresa brasileña Odebrecht, acusada de sobornar a distintos gobiernos para obtener beneficios, un alto funcionario señaló a Emilio Lozoya, exdirector de Petróleos Mexicanos, como parte de esta red. El nombre surge tras información revelada por el Supremo Tribunal Federal de Brasil, donde un ejecutivo de la constructora sudamericana declaró haber recibido una petición para que se le pagaran a Lozoya, ilegalmente, cinco millones de dólares. Hace falta escuchar su defensa. El salpicadero de lodo apenas comienza.

II. Sin tregua. Los días de asueto de esta Semana Santa, fueron para los candidatos a los gobiernos del Estado de México, Coahuila y Nayarit, días de campaña, de proselitismo, de búsqueda del voto y de apoyo de la gente para ganar su confianza que les dé el triunfo en las elecciones de junio próximo. Los aspirantes en contienda respetan las creencias del pueblo, pero están conscientes de que no vulneran el significado de estos días. Los priistas Alfredo del Mazo, Manuel Cota y Miguel Ángel Riquelme saben de la importancia de no dar reposo a la campaña, de continuar en su propósito de acercarse al mayor número de personas para conocer sus necesidades y carencias, a fin de ofrecerles la respuesta adecuada. Quieren ser gobernadores y la manera es mantener una comunicación permanente con la población, para que conozcan su oferta, sin intermediarios. No hay tiempo que perder.

III. A tiempo. El Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública de la Cámara de Diputados realizó una encuesta que revela la percepción acerca de los programas sociales en México. Los políticos se han encargado de desvirtuar los beneficios para la población y por ello 66.7 por ciento de los mexicanos considera que se usan con fines electorales. La encuesta telefónica nacional Pobreza en México deja en claro que algo anda mal en el diseño de estos beneficios. A pesar de los “candados”, lo terrible no es que se echen a andar justo en etapas electorales, sino que la gente venda su voto por una despensa.

IV. Justicia. Un juez federal sentenció a 60 años de prisión a Octavio “N”, integrante de Los Zetas, responsable del homicidio de 11 elementos de la Defensa Nacional, en Monterrey, Nuevo León. El delincuente participó en el crimen contra los soldados, como represalia por el aseguramiento, por parte de personal militar, de una bodega donde almacenaban la droga. Es responsable por los delitos de delincuencia organizada, delitos contra la salud y secuestro, así como por homicidio. Los soldados no son policías, se ha dicho mil veces. Y, mientras tanto, la Ley de Seguridad Nacional permanece en la congeladora.

V. Roces. El presidente del Partido de la Revolución Democrática en la Ciudad de México (PRD-CDMX), Raúl Flores, presentó ante la Comisión Nacional Jurisdiccional de dicho instituto político el procedimiento sancionatorio respectivo por el que se pide la expulsión del diputado federal Carlos Hernández Mirón, por haber asistido el pasado domingo al evento convocado por Andrés Manuel López Obrador, dirigente nacional de Morena, lo que “constituye una clara violación a los estatutos internos del partido”. El dirigente perredista acusó al legislador de usar su posición en el Congreso federal para hacer proselitismo indebido en favor de quien se asume desde hace tiempo como candidato presidencial por Morena. “Lo único que (Hernández Mirón) hace es hacerle el caldo gordo a quien ha atentado desde hace tiempo contra el PRD”. Estas acusaciones son una muestra más de las divisiones internas en el PRD. ¿Qué sigue?

Ámbito: 
Nacional