El compló no alcanza
En los tiempos de la hegemonía de las redes sociales, los videos son un arma política letal. Se esparcen a la velocidad de la luz.
En un pestañeo, un episodio al parecer privado, deviene en escándalo político.
El más reciente ejemplo es el protagonizado por la diputada con licencia y candidata del partido Morena a la alcaldía de Las Choapas, Eva Cadena.
Fue filmada mientras recibía medio millón de pesos en efectivo para hacérselos llegar a López Obrador.
El presidente de Morena confía en que echándole la culpa a la mafia del poder podrá darle vuelta a la página. Le ha resultado otras veces.
Esta vez no será tan sencillo, la tesis del compló se queda corta, no alcanza.
Muchos seguidores del tabasqueño están desconcertados.
No se conforman con el video de AMLO escurriendo el bulto, quieren, ahora sí, la verdad, incluso si se trata de fuego amigo.
Lodo digital
El diferendo entre Felipe Calderón y Humberto Moreira también tomó a las redes sociales como ring.
El Twitter y el YouTube son las plataformas desde donde el ex presidente de la República y el ex gobernador de Coahuila se lanzan cantidades industriales de lodo ante la mirada atónita de los ciudadanos.
Uno tuitea y el otro graba videos. En ambos se detecta la saña de los malquerientes, del que tira a matar.
Uno acusa a su rival de borracho y el otro responde diciendo que su adversario es cómplice de Los Zetas. Un espectáculo deplorable.
Algo es incuestionable: hay lodo para todos, y decimos lodo por no decir otra cosa.
Paraíso de pandillas
¿De qué tamaño es la presencia en México de integrantes de la Mara Salvatrucha?
Es un tema del que pocos quieren hablar. Se multiplican las señales de que los pandilleros centroamericanos están haciendo de la suyas en nuestro país.
Su gama de actividades delincuenciales es amplia pero es particularmente nociva en el trato a los migrantes que pasan por territorio mexicano en su peregrinar rumbo a Estados Unidos.
La Mara se formó inicialmente por pandilleros centroamericanos que operaban en Estados Unidos y fueron deportados a diversos países de América Central, donde intensificaron sus actividades criminales.
¿Cuántos de ellos están en México? ¿Por qué pueden actuar con impunidad? Urgen respuestas.
Jerzy y Tadeus
Durante la ceremonia protocolaria en Palacio Nacional, en el marco de la visita del presidente de Polonia, Andrzej Duda, revoloteó el espíritu de polacos que vinieron a México para cambiar la historia del deporte nacional.
El primero de ellos, Jerzy Hausleber, conocido como el padre de la marcha mexicana que formó a los andarines nacionales que le dieron gloria deportiva al país, desde el Sargento Pedraza en los juegos del 68 hasta Noé Hernández en Sidney 2000, pasando por González, Canto, Mercenario y otros.
También Tadeusz Kepka, que entrenó por décadas a los fondistas mexicanos de élite.
Ellos mostraron que la cooperación entre Polonia y México suele dar resultados espectaculares.