Tan pronto los procesos legislativos lo permitan, Estados Unidos negociará con México y con Canadá con un objetivo probable de generar dos tratados bilaterales en lugar del trilateral Tratado de Libre Comercio (TLCAN) existente, señaló Wilbur Ross.
En entrevistas con distintos medios estadounidenses, el secretario de Comercio estadounidense expresó además que el resultado de los acuerdos con su vecino al sur pueden derivar en el fortalecimiento del peso frente al dólar.
“Sólo en el Congreso pensarían que algo que tiene 90 días de intervalo antes de que puedas arrancar es ‘fast track’”, dijo Ross a Yahoo Finance en el marco de la Conferencia Global del Instituto Milken que concluyó ayer en Los Ángeles, California.
“Una vez que arranquemos, nos involucraremos de lleno con Canadá y con México con el objetivo de dos bilaterales que coincidan y sean simétricos”.
Además, Ross dijo que un acuerdo bilateral no comenzaría de cero, pues “estamos entrando en ella con cadenas de suministro y todo lo demás que se han construido durante varias décadas. “Pero el TLCAN es, en el mejor de los casos, un acuerdo obsoleto, tiene muchas décadas de antigüedad, las economías de Estados Unidos, México y Canadá son muy diferentes de lo que eran cuando se inició", aseguró.
Alejandro Cervantes, subdirector de análisis económico de Banorte, considera que la propuesta de Ross implicaría que EU busca mayor poder de negociación en las disputas comerciales.
“Los mecanismos de resolución que actualmente rigen el TLCAN están conformados por miembros de los tres países lo que hace imparcial cualquier resolución que tomen”.
Agregó que la idea de los tratados bilaterales podría no ser benéfica para México porque es muy probable que no sean simétricos y que sí aumente el tiempo de negociación.
“Se podría prolongar la incertidumbre en torno al futuro de la relación comercial entre México y EU”, agregó.
Alfredo Coutiño, de Moody’s Analytics, no manifestó sorpresa ante los comentarios de Ross porque se trata de la misma postura anticomercio de Trump y es parte de una estrategia de “divide y vencerás”.
Para México y Canadá supondría una ruptura o por lo menos un obstáculo que distorsionaría el proceso que se ha dado, más allá de los objetivos del TLCAN, de una integración productiva a través de las cadenas de valor, subrayó Miguel González, especialista de la UNAM.
SIN CAMBIO DE POSTURA
En entrevista aparte y cuestionado por la cadena CNBC en torno al incentivo que genera en inversionistas estadounidenses la devaluación del peso frente al dólar para instalar centros de producción al sur del Río Bravo, Ross mostró optimismo en un próximo rebalanceo del tipo de cambio binacional.
“Pienso que si nosotros y los mexicanos conformamos un tratado comercial muy sensible, el peso podría recuperarse mucho”, agregó el funcionario.
Previamente con Bloomberg, Ross manifestó tomar algunos puntos del Acuerdo Transpacífico (TPP) para incorporarlos en las renegociaciones del TLCAN, aunque también sugirió endurecer las reglas de origen.