En la batalla contra el crimen organizado que se dedica al robo de combustibles son escasos los resultados para recuperar producto robado.
De acuerdo con información de los organismos de seguridad nacional, incluyendo estadísticas de Petróleos Mexicanos (Pemex) obtenida vía el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), cada vez se recupera menos producto robado y crece el número de tomas clandestinas.
Información de Pemex muestra que en 2014 se recuperó el mayor volumen de petrolíferos sustraídos de ductos de los últimos ocho años, al rescatarse 11 millones 862 mil litros de gasolinas y 2 millones 297 mil litros de diesel.
En ese año, la empresa productiva del Estado informó que se detectaron 3 mil 625 tomas clandestinas.
En 2016, cuando el número de perforaciones para robar combustibles llegó a la cifra histórica de 6 mil 873, sólo se recobraron 227 mil 246 litros de gasolina y 130 mil 302 litros de diesel.
Las cifras evidencian que con mayor número de tomas clandestinas, los organismos de seguridad federales, estatales y municipales, además de Pemex, lograron incautar un volumen de gasolinas equivalente a 1.9% de lo recuperado dos años antes y 5.6% del diesel asegurado en ese mismo lapso.
2017, misma tendencia. En los primeros dos meses de este año, las tomas clandestinas alcanzaron mil 646 y sólo se lograron asegurar 33 mil 264 litros de gasolinas y 8 mil 590 litros de diesel.
EL UNIVERSAL solicitó la información relacionada con los volúmenes de gasolinas y diesel robado a Petróleos Mexicanos entre 2010 y febrero de 2017, pero la respuesta fue que los datos de tomas clandestinas “no son públicos”, lo cual no permitió realizar el comparativo de lo robado con lo asegurado.
Financiamiento delictivo. El senador panista Roberto Gil Zuarth señaló que “el robo de combustibles en los últimos 10 años pasó de estar bajo el control de bandas criminales con operaciones locales, a ser la segunda fuente de financiamiento del crimen organizado, con pérdidas multimillonarias para el Estado mexicano”.
Calcula que en la presente administración “las pérdidas de Pemex por fugas y robo de hidrocarburos ascienden a 97 mil millones de pesos; 55% superior a lo registrado en los últimos cuatro años del ex presidente Calderón”.
Al día de hoy, estimó, “el costo para Petróleos Mexicanos de estas actividades ilícitas asciende a cerca de 35 mil millones de pesos al año”.
Este martes, en entrevista telefónica, el secretario de Hacienda, José Antonio Meade, calculó que este ilícito tiene un costo para Pemex y el país de entre 15 mil y 20 mil millones de pesos.
Bitácora. El registro de tomas clandestinas y el quebranto registrado por este ilícito al cual tuvo acceso este periódico, muestra que en 2014, cuando se logró el mayor volumen estimado en 11 millones 862 mil litros de gasolina, en el municipio de Tecate, Baja California, se aseguraron 2 millones 456 mil 139 litros de gasolina en febrero.
Pemex valuó ese volumen de gasolinas en 22.4 millones de pesos.
En el municipio de Chihuahua se incautaron otros 8 millones 347 mil 265 litros de gasolina en septiembre del mismo año, producto cuyo valor se estimó en 11.2 millones de pesos.
De diesel se recuperaron en abril de ese año, 2 millones 297 mil litros; el mayor volumen fue en Tecate y su valor se estimó en 15.2 millones de pesos.
En total, Pemex habría recuperado en 2014 un total de 17 millones 636 mil litros de diversos productos como diesel, gas, gasolinas e hidrocarburos, con un valor de 265.4 millones de pesos.
El seguimiento de las tomas clandestinas y el quebranto registrado por el robo de hidrocarburos muestra que en 2016, sólo lograron recuperarse 130 mil 302 litros de diesel, 61 mil 940 litros de gas, 227 mil 246 litros de gasolina y 483 mil 971 litros de hidrocarburo, todo con un valor de 10.7 millones de pesos.
Los mayores volúmenes recuperados se presentaron en el municipio de Matías Romero, Oaxaca en agosto de ese año, estimado en 52 mil 600 litros de gasolinas.
A la fecha, Pemex no tiene una valuación de ese volumen de combustible en los sistemas jurídicos institucionales porque “el quebranto se obtiene una vez que se cuenta con el dictamen de valuación de daños”.