La capacidad de almacenamiento que poseen los 17 embalses de la CDMX es de 4 millones 850 mil 300 metros cúbicos ◗ Limpiarlos le cuesta al gobierno capitalino 102 millones de pesos al año
La limpieza de las 17 presas que hay en la Ciudad de México cuesta al gobierno capitalino 102 millones de pesos al año, es decir, que gasta 280 mil pesos diarios por retirar toda la basura que los capitalinos arrojan a estos vasos reguladores.
Ya que según el Sistema de Aguas de la Ciudad de México, todos los días se retiran de las 17 presas de la capital más de 5 toneladas de desechos, por lo que en un mes se recogen cerca de 150 toneladas.
Lo anterior se debe a que las presas se han convertido en un tiradero potencial para quienes viven cerca de ellas, pues la ubicación de las casas (construidas en barrancas y zonas irregulares) provoca que para la gente sea más fácil tirar la basura en la calle que llevarla hasta el depósito de desechos.
En estos sitios arrojan todo tipo de desechos: orgánicos e inorgánicos; además de lavadoras, televisores, colchones, pañales…
La capacidad de almacenamiento acuífero que poseen los embalses en la Ciudad de México es de 4 millones 850 mil 300 metros cúbicos, por lo que el gobierno capitalino debe dividir el desazolve en varias etapas.
De no realizarse limpias continuamente, las presas podrían llegar a su máximo nivel, lo que provocaría un severo desbordamiento.
El saneamiento de los contenedores pluviales es una tarea, que según el Sacmex no tiene fin, esto debido a que la gente no toma conciencia acerca de lo que provoca tirar basura en ellos.
Para llevar a cabo el saneamiento de los embalses se debe utilizar desde maquinaria pesada como trascabos y camiones de carga, así como lanchas, canoas y hasta buzos especializados en retiro de desechos.
Los trabajos duran cerca de tres días, sin embargo, es imposible retirar por completo la basura ya que es un hábito que la gente tiene.
El personal debe estar capacitado para sumergirse en aguas negras, debido a que es difícil nadar en estas condiciones.
Toda la basura que es retirada de las 17 presas es llevada a los tiraderos de desechos que hay en la capital.
PROBLEMA. Uno de los conflictos principales es que a medida que la población fue creciendo se ha tenido que conectar el drenaje a algunas de las 17 presas, lo cual ocasiona que el agua residual genere problemas no sólo de contaminación sino también de salud.
Además de que en temporada de lluvias la acumulación de basura asciende a más de 3 mil 400 toneladas.
La mayoría de estos desperdicios se acumulan en las barrancas y una vez que la lluvia cae se quedan en las presas y coladeras, lo que ocasiona el 50 por ciento de las inundaciones en la capital del país.
Por ello, la Presidenta de la Comisión de Protección Civil en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Janet Hernández Sotelo, dijo que es importante que la población y las autoridades estén pendientes y que se les dé el mantenimiento idóneo a las presas.
“Se puede reducir hasta en un 50 por ciento el peligro de inundaciones si no tiramos desechos y basura que entorpezca la salida de agua pluvial, además de que es necesario invertir mayores recursos en nuestro sistema de drenaje en zonas susceptibles de inundaciones, sobre todo en el Oriente de la Ciudad”, afirmó.
Asimismo, la legisladora perredista exhortó a las autoridades a aplicar los recursos necesarios en el mantenimiento de las salidas pluviales a fin de reducir o evitar inundaciones, que en diversos puntos de la ciudad llegan a colapsar el área cuando se arrojan miles de toneladas de basura que son generadas mes a mes.
Durante la temporada de lluvias en la Ciudad de México, las zonas sensibles de inundaciones son las ubicadas en delegaciones como Xochimilco, Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Álvaro Obregón.
Por ello urgió a las autoridades de las 16 demarcaciones a reducir los tiraderos de basura a cielo abierto y concientizar a la población de los riesgos de tirar basura.
RECORRIDOS. La presa Becerra tiene severos problemas en cuanto a la acumulación desmedida de desperdicios.
El embalse está ubicado en las avenidas Chicago y Jalalpa, en la delegación Álvaro Obregón, y el pasado 3 de junio sufrió un desbordamiento debido a las intensas lluvias.
El olor, los desperdicios y aguas negras inundaron las calles, lo cual causó afectaciones a la vialidad en las delegaciones Álvaro Obregón, Tlalpan y Xochimilco, ya que conectan unas con otras.
En un recorrido hecho por Crónica, se constató que la gente que vive en las zonas aledañas al sitio prefiere aventar su basura que llevarla a los puntos donde el personal de limpia la recoge, ya que esto “es más fácil, aventarla aquí que andarla cargando”.
Doña Jesusa dijo que desde que llegó a vivir a Jalalpa, el tema de la basura ha sido siempre un conflicto.
“En época de lluvias la gente se queja y hace relajo. Pero cuando está todo seco no dicen nada y se dedican a aventar todo por la ventana, esto se ha convertido en un tiradero a cielo abierto”, refirió la mujer.
¿Qué es una presa?
Una presa es una barrera fabricada de piedra, hormigón o materiales sueltos, que se construye habitualmente en una cerrada o desfiladero sobre un río o arroyo.
Tiene la finalidad de estancar el agua en el cauce fluvial para elevar su nivel con el objetivo de evitar inundaciones.
Además, algunas se construyen para la producción de energía mecánica al transformar la energía potencial del almacenamiento en energía cinética y esta nuevamente en mecánica y que así se accione un elemento móvil con la fuerza del agua.
La energía mecánica puede aprovecharse directamente, como en los antiguos molinos, o de forma indirecta para producir energía eléctrica, como se hace en las centrales hidroeléctricas.