CUMBRE. El encuentro de los mandatarios tendrá verificativo durante la reunión del G-20 en Hamburgo ◗ La cancillería confirma que revisarán aspectos de la relación bilateral; abordarían el muro, la migración y la seguridad fronteriza
La reunión de Donald Trump, ya en calidad de Presidente de Estados Unidos, con el mandatario mexicano Enrique Peña Nieto, se dará la próxima semana en Alemania, entre el 7 y el 8 de julio. La esperada reunión será paralela a la Cumbre del G-20 que hará coincidir a Trump y Peña en Hamburgo, y se espera que la agenda toque nuevamente el tema del muro y la seguridad fronteriza, así como la migración y el apoyo a los países del Triángulo Norte centroamericano.
La Secretaría de Relaciones Exteriores mexicana confirmó este jueves la reunión, “ambos mandatarios revisarán los avances en los diferentes temas de la relación bilateral”, señaló la Cancillería a través de su cuenta de Twitter.
“La agenda se dará a conocer más adelante”, agregó la Cancillería. El principal asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, el general H.R. McMaster, había anunciado previamente la reunión y el lado mexicano la ratificó unas horas después.
El canciller Luis Videgaray, de viaje en Colombia, calificó como “un signo positivo del avance de la relación” entre México y Estados Unidos la próxima reunión de los presidentes Enrique Peña Nieto y Donald Trump.
En breves declaraciones a medios sobre este encuentro que tendrá lugar en paralelo a los trabajos de la Cumbre del G-20, en Hamburgo, Alemania, el funcionario señaló que será una “reunión en la que se revisarán los distintos aspectos de la relación”.
En Cali, Colombia, donde Videgaray acompañó al presidente Peña Nieto a la clausura del Encuentro Empresarial de la Alianza del Pacífico, detalló que “la agenda todavía no está definida y la daremos a conocer en su oportunidad”.
Las conversaciones entre ambos mandatarios, desde que en enero tomó posesión de su cargo el estadunidense, se han centrado en la edificación del muro y en la renegociación del Tratado de Libre Comercio del cual ambos países forman parte junto con Canadá, mismo que entró en vigor el 1 de enero de 1994.
El pasado 26 de abril, Trump y Peña Nieto sostuvieron una conversación telefónica para asegurar que está en el mutuo interés continuar con la modernización de dicho Tratado.
La conversación ocurrió horas después de que fue difundida la existencia de un borrador con una orden ejecutiva que presuntamente firmaría el presidente de Estados Unidos, Donald Trump a fin de retirar a su país del TLCAN en el que también son socios México y Canadá.
En el texto difundido esa noche por la oficina de prensa de Los Pinos, se informó que “los mandatarios coincidieron en la conveniencia de mantener el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, y trabajar junto con Canadá, para llevar a cabo una exitosa renegociación, para beneficio de los tres países”.
A este hecho se refirió también el mandatario el pasado 18 de mayo al término de una visita de trabajo en Querétaro en donde dejó en claro que México apuesta a que se logre un buena renegociación que sea para beneficio, proyección, crecimiento, desarrollo y competitividad de América del Norte.
El jefe del Ejecutivo ha insistido en la necesidad de llevar una buena relación con el país del norte y así lo dejó claro la víspera de que Trump jurara al cargo de presidente de Estados Unidos cuando señaló que trabajaría para construir una relación positiva con el nuevo gobierno estadunidense.