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VIDA POLÍTICA

A UNA SEMANA DE LA DESGRACIA, DOÑA IMPUNIDAD, HACE SUYO EL PASO EXPRÉS…

 

 

A una semana del asesinato de Juan Mena Romero y Juan Mena López sobre el Paso Exprés Tlahuica, la madre impunidad prevalece, porque todavía no hay culpables y menos investigaciones serias sobre el móvil del homicidio que, seguramente, quedará impune.

Al día de hoy, todavía encontramos pretextos pendejos, como atinadamente el periodista Carlos Loret de Mola los calificó, tanto por parte del secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, y del gobernador de Morelos, Graco Ramírez.

Ya dejaron de tener las caras alegres, los discursos y frases de elogio de la obra del siglo, como en su momento la llamaron en las redes sociales y en los distintos espacios de comunicación.

Hace una semana, la familia Mena López se quedó huérfana de padre y un hermano, quienes eran los encargados de proveer el sustento diario, porque un director de una escuela de inglés en su incapacidad como delegado de la SCT se quedó callado ante la denuncia social.

No es el único culpable quien responde al nombre de José Luis Alarcón Ezeta, también lo es su jefe Gerardo Ruiz Esparza, y sin duda alguna el ausente gobernador de Morelos, Graco Ramírez, quienes al momento sigue en la omisión de escuchar al pueblo de Morelos y, en especial al de Cuernavaca.

Es por ello que la muerte de Juan Mena López y Juan Mena Romero no fue a consecuencia de un accidente en el kilómetro 90+300 de la carretera México-Acapulco por un socavón formado.

El asesinato fue consumado por un grupo conformado por sus omisiones y negligencia que bien es de la delincuencia organizada, si organizados para aceptar una carretera que sabían está mal hecha.

Pero como en los negocios entraban los tres principales personajes de este grupo prefirieron quedarse callados, porque saben que hay un presidencialismo también alejado del pueblo de México.

Las imágenes del gran socavón conformado del Paso Exprés Tlahuica, que en sus más de 14 kilómetros presenta riesgo para quienes circulen por la vía terrestre, son ejemplo mundial de la corrupción que hay en México y el estado de Morelos.

Ni el titular de la SCT, Gerardo Ruiz Esparza, ni el gobernador Graco Ramírez cuentan con la capacidad ética, moral y profesional para seguir dando pretextos pendejos en los medios de comunicación social por su avaricia.

Ambos son culpables y autores intelectuales del homicidio de los Juanes Mena, de que hoy una familia viva una lamentable desgracia, que con su millón de pesos no les regresan a los Mena López su tranquilidad ni tantos billetes les secan las lágrimas que siguen derramando.

Sin embargo, después del homicidio no hay culpables solamente señalados como responsables que fueron despedidos –por instrucción Presidencial- de su cargo como delegado de la SCT en Morelos, pero de ahí no pasa.

Y eso es lo que menos le preocupa al ex director o delegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en la entidad, José Luis Alarcón Ezeta, porque seguramente tiene seguro su sustento como profesor y director de inglés en una escuela particular.

Dicen que hay una auditoría sobre la delegación de la dependencia federal, cómo para qué?, se preguntan los habitantes que hoy padecen la pésima obra del Paso Exprés Tlahuica porque no podrán hacer nada contra el otro asesino de los Mena: Aldesa.

Y no son solamente los Mena quienes perdieron la vida durante las obras y después de las mismas en el Paso de la Muerte Tlahuica, hubo más de 70 personas accidentadas y lo sabía el ausente del gobierno de Morelos, Graco Ramírez, pero como siempre su interés era hablar de los beneficios de la Beca-Salario y el Mando Único, su principal fracaso como presunto gobernante del estado.

Luego entonces, por la irresponsabilidad de la delincuencia organizada encabezada por Gerardo Ruiz Esparaza, Graco Ramírez y Aldesa hay más de 70 familias que no han sido indemnizadas, por su negligencia, avaricia y actos de corrupción en que han incurrido tomados de la mano.

Y a todo esto valdría la pena preguntar también ¿y dónde está José Luis Alarcón Ezeta? Del ex servidor público federal nada se sabe: ¿acaso estará en Walt Disney, Cancún, Los Cabos, Dubai u otro destino turístico, o bien reacomodado discreta e impunemente en alguna otra dependencia del nefasto Gobierno Federal?.

A lo mejor le prestaron el helicóptero que nunca funciona de la Comisión Estatal de Seguridad Pública o de la SCT para escapar, porque si abre la boca muchos quedarían evidenciados. En fin el Paso de la Muerte algún día hablará, eso que ni qué.

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