Propondrá que el Senado formule un exhorto sobre el caso Tetelcingo; se reúne con el rector Alejandro Vera
Argumenta que el tema es delicado y peligroso ante las irregularidades cometidas por la Fiscalía
Se suma Fidel Demédicis Hidalgo a la propuesta de su homólogo Rabindranath Salazar Solorio, para que desde el Senado de la República se haga un exhorto al gobernador Graco Ramírez Garrido Abreu para que se les practique el ADN a los alrededor de 150 cadáveres que se encuentran en la fosa clandestina de Tetelcingo en Cuautla, al igual que a las familias con desaparecidos ante la negativa del fiscal Javier Pérez Durón.
Tras una reunión que sostuvo con el rector de la UAEM, el senador del PRD, Fidel Demédicis Hidalgo, se comprometió a que desde la tribuna más alta del país se pueda obligar al gobierno y a la fiscalía para que realicen o permitan a la UAEM que realicen las pruebas de identificación genética a los cuerpos que fueron inhumados en condiciones inhumas como lo están exigiendo y solicitando las familias que tienen desaparecidos.
Destacó el representante popular que el tema es delicado, peligroso porque hay muchas irregularidades que se cometieron desde la Fiscalía y con autorización del gobierno de Graco Ramírez, y por ello, las familias de las víctimas han demandado que intervengan otras instancias ajenas a las del poder Ejecutivo local porque pueden manipular las pruebas como hasta el momento ha sucedido y ello va en perjuicio de la ciudadanía.
“De lo que se trata es de tener la información precisa de quiénes fueron las personas que ahí enterraron, los motivos y se les pueda practicar el ADN al igual que a las familias de los desaparecidos para que de llegar a detectar que sea algún ser querido se los entreguen y les puedan dar cristiana sepultura. Eso es lo que quiere la gente, que puedan tener un lugar digno donde ir a llorarle a sus muertos”, sostuvo el senador Fidel Demédicis Hidalgo.
Cabe señalar que María Concepción Hernández denunció públicamente que su hijo fue secuestrado frente a su casa en la colonia Gabriel Tepepa, municipio de Cuautla, el 24 de mayo del año 2013; y a partir de ahí la Fiscalía General del Estado abrió una carpeta de CT-UIAE/83/2013 por desaparición de persona, sin que jamás haya seguido los protocolos de búsqueda.
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Posteriormente fue localizado el cuerpo de Oliver Navarrete el 3 de junio de 2013 en Ayala y no fue sino hasta el 24 de ese mes cuando se acreditó la identidad de la víctima, lamentablemente cuando reclamaron el cadáver en la Fiscalía les dijeron que era necesario realizar más pruebas periciales y luego de ocho meses descubrieron que estaba en la fosa clandestina de Tetelcingo.
Lo grave fue que al reclamar el cuerpo a la fiscalía tuvieron que ir hasta Tetelcingo para exhumarlo y ahí se percataron de las irregularidades que hubo en todo el proceso, porque jamás se respetó el protocolo de inhumación del estado.