El Obispo, el rector y los ciudadanos
Luego de varios meses de inactividad el Frente Amplio Morelense reaparece y anuncia una marcha a la secretaría de gobernación para exigir al gobierno federal que restablezca el estado de derecho en Morelos. Al unísono, el rector Alejandro Vera, el Obispo Ramón Castro y otros integrantes de la sociedad civil exigen una vez más al gobierno de la república que se investigue a funcionarios que participan en actos de corrupción. Nunca antes la petición ha sido escuchada; ¿Esta vez será diferente?
Las fosas de Tetelcingo y Jojutla, el socavón en el Paso Exprés, la corrupción, la violencia y el rescate financiero de la universidad son los ejes centrales del reclamo. El rector acusa al gobernador Graco Ramírez de tratar de estrangular a la universidad, el obispo de Cuernavaca afirma que la iglesia católica ha sido perseguida a lo largo de todo este sexenio y ambos coinciden que la violencia ha robado la tranquilidad a los ciudadanos de Morelos.
Esta vez el Frente Amplio no luce tan sólido, ni con la representatividad social que le caracterizó hace unos meses. Tal vez sea por el tiempo que dejaron transcurrir sin actividad o quizá porque el rector y el obispo bajaron su perfil y actividad pública. Otros actores sociales que participan en este movimiento se ven menos sólidos que antes: Gerardo Becerra, Dagoberto Santos y el propio Javier Sicilia disminuyeron sustancialmente su activismo durante mucho tiempo, lo cual los alejó de la agenda social del estado y de la opinión pública.
Las demandas del FAM son válidas y añejas, desde hace meses este grupo de ciudadanos igual que otras organizaciones civiles y profesionales han alzado la voz ante la crisis de inseguridad, piden que cese la violencia y reclaman ayuda del gobierno federal. Hasta ahora ningún reclamo ha sido escuchado y por el contrario, cada vez que la sociedad morelense se organiza para solicitar ayuda el gobierno federal manifiesta su apoyo total al gobierno de Graco Ramírez.
No tengo claro cuál será la participación ciudadana que habrá a esta convocatoria, ni tampoco la respuesta que obtendrán del gobierno de Enrique Peña Nieto. En su primer movimiento el FAM convocó a miles; el Obispo siempre ha recibido un amplio apoyo ciudadano a sus caminatas y el rector por si solo ha logrado hacer salir a la comunidad universitaria, pero ninguno de ellos ha logrado modificar la actitud indolente de la federación. ¿Qué sucederá ahora que están los tres juntos?
Hablamos hoy de la suma de todas las peticiones anteriores: justicia para las víctimas de la violencia y respeto y apoyo a la universidad, paz y seguridad para los ciudadanos, combate y castigo a la corrupción y rescate a la universidad. Es una marcha que integra las peticiones de todos los grupos y el reclamo de miles de ciudadanos.
La pregunta está en el aire ¿Qué hará esta vez la federación?
- posdata
La carrera por la sucesión en el PRD ya comenzó. El destape de Rodrigo Gayosso como candidato a la gubernatura de Morelos es uno de varios actos que veremos en el PRD; antes del dirigente perredista, el alcalde de Cuautla Tadeo Nava hizo lo propio ante un grupo de simpatizantes.
La propuesta del PRD en el 2018 saldrá de cuatro aspirantes visibles: Rodrigo Gayosso, Tadeo Nava, Matías Quiroz y Lucía Meza. Dos de ellos ya han abierto sus aspiraciones en tanto que los otros dos todavía se reservan el derecho de decidir en que momento hacen públicas sus intenciones.
En el panorama perredista hay varios escenarios: el ideal es concretar una alianza amplia en la que participen el PAN, Movimiento Ciudadano, Nueva Alianza, el PT, el PSD y el Partido Humanista. Si esta fórmula se concreta. El candidato solaztequista competirá bajo el auspicio de muchas siglas, aunque también cargará el desgaste de la administración de Graco Ramírez. El peor escenario para los perredistas sería ir sin el PAN porque los otros partidos nada suman.
De los cuatro aspirantes sólo dos están trabajando por la candidatura: Rodrigo y Lucía. Él construyendo una red política basada en el PRD, pero con perfil multipartidista; ella a partir de un programa de asistencia social que apuesta a la salud pública y trabaja desde un camión que se mueve por toda la entidad. Los dos están en la calle y apuestan por una estructura partidista y un convencimiento social.
En el caso del alcalde su manejo es mucho más discreto: ha dicho que quiere ser candidato, pero no se ha movido más allá de su municipio. Raúl Tadeo sobrelleva la administración y sortea la crisis económica del ayuntamiento; no puede dedicar mucho tiempo a la promoción de su candidatura porque necesita atender de tiempo completo las complejidades que se presentan en su gobierno.
En el caso del secretario los pasos son distintos; Matías Quiroz no puede expresar abiertamente sus aspiraciones ni tampoco hacer campaña pública. En los pasillos de poder y en su partido saben que es un aspirante natural a la gubernatura, pero también lo consideran la primera opción ante un eventual relevo en el gobierno estatal si Graco Ramírez abandona el cargo para buscar una nueva posición política.
De entre estos cuatro personajes saldrá el candidato del PRD. El partido del Sol Azteca no arrancará la competencia en buena posición, ni tampoco gozará de la inercia de un candidato fuerte en la competencia presidencial. Localmente la carrera de los perredistas es cuesta arriba: el desgaste del gobierno les pesará, lo mismo que a los priístas en el contexto nacional; el triunfo en el 2018 depende en buena medida del candidato, de su capacidad de construir una base social sólida, de tener una estructura electoral confiable, de conectar con la gente y de hacer una campaña intensa y creativa que empiece desde ahora y llegue al electorado.
Sólo dos de los cuatro aspirantes tienen posibilidades reales de acceder a la candidatura, porque la medición sobre la rentabilidad electoral se llevará a cabo antes de que los funcionarios dejen el cargo. Gayosso y Meza son los mejor posicionados, aunque la diputada tiene la mira puesta en el senado y no en el gobierno estatal.
Rodrigo Gayosso seguramente será el candidato del PRD a la gubernatura de Morelos; lo será en una alianza amplia o sólo bajo las siglas del PRD, pero lo será. Para ganar la elección, empero, requiere de mucho más de lo que tiene el PRD, debe convertirse en el eje articulador de un nuevo proyecto político, el la parte conciliadora del régimen, en la figura representativa del partido y en esperanza social. Lograrlo no es sencillo, porque la herencia política que le dejará el gobernador es muy pesada y los enemigos que ha coleccionado a lo largo del sexenio Graco Ramírez buscarán tomar venganza electoral con su hijo. Su campaña debe comenzar cuanto antes y debe extenderse más allá de las redes de su partido. Gayosso necesita mejorar su imagen pública y tejer una amplísima red social; aún así la competencia no será fácil.
Si Graco se mantiene en el cargo hasta el final del sexenio, difícilmente el PRD podrá matizar el rencor social que ha acumulado este gobierno. Lo mejor que puede suceder a los perredistas es que el ejecutivo cambie de aires y deje un lapso de tiempo entre su salida y la colocación de las urnas.
- nota
Luego de un intenso intercambio de acusaciones y responsabilidades, la Secretaría de Gobernación sentó en la misma mesa al gobernador de Morelos y a funcionarios de la SCT. El tema a tratar fue el socavón en el Paso Exprés y los problemas derivados desde su concepción hasta la muerte de dos personas.
Al final de la reunión las autoridades emitieron un comunicado en donde informan que trabajarán de la mano en la solución definitiva del problema y confirman que se construirá un puente en el lugar donde ocurrió la desgracia. De las responsabilidades y contratiempos de la obra nadie dice nada.
Lo que sigue, según la agenda gubernamental, es la remediación del problema sustituyendo la obra actual por un viaducto (puente) que evitará desgracias futuras por la acumulación de basura en el cauce de la barranca. Fin de la historia.
¿Y los muertos? ¿Y la corrupción en la obra? ¿Y los daños a la propiedad de particulares? ¿Y las afectaciones económicas a comercios, empresas e industrias por el cierre parcial de la carretera? ¿Y el deterioro causado a Morelos por la publicidad negativa que provocó esta historia? ¿Todo se remedia con un acuerdo gubernamental en una mesa burocrática? ¡A toda madre!
Por cosas como estas el ciudadano ha perdido la confianza en las instituciones y en los políticos; una historia de corrupción, muerte, ineficiencias y abusos quiere ser resuelta con un café en una oficina de gobierno y una disculpa pública. Los ciudadanos, obvio, que se jodan.
El problema en el Paso Exprés no es sólo un socavón, es todo lo que implica la obra, incluyendo la red de complicidades y omisiones cometidas en los tres niveles de gobierno. Si no se atiende el tema en conjunto, lo único que se remediará es el hoyo en la tierra, no la impunidad política y gubernamental.
- post it
Al viejo estilo del PRI, en Morena adelantaron los tiempos y destaparon a Rabín Salazar como el virtual candidato a la gubernatura de Morelos; fue, como en las mejores épocas de la CTM, elección por aclamación.
A nadie sorprende que el senador se perfile hacia esa posición (raro sería que no lo postularan), lo que llama la atención es la forma de hacerlo y los tiempos en los que se mueven el dirigente Miguel Lucia.
A nivel nacional Morena ya encabeza (como partido) la intención de voto y en Morelos avanzan en la simpatía ciudadana. El problema del Movimiento de Regeneración Nacional está en la construcción de estructuras y definición de cuadros; lo malo empieza cuando se repiten los mismos vicios del PRI o se hace lo que siempre han criticado.
Es ahí donde Rabín y la estructura morelense de Morena debe actuar con prudencia. El del senador no es el único movimiento que ha generado molestia, ni tampoco el único motivo por el que algunos militantes de esa organización comienzan a señalar a la dirigencia por su incapacidad y parcialidad. Insisto: a nadie sorprende que Rabín Salazar sea el candidato, lo que llama la atención es la manera tan priísta de imponer la decisión.
A pesar de las tendencias electorales, Morena no tiene el triunfo garantizado en Morelos; descuidos como estos pueden costar muy caro y complicar la construcción de un proyecto político ganador en el 2018.
- redes sociales
Seis puntos sustentan la marcha convocada por el rector, el obispo y la coordinadora ciudadana hacia la secretaría de gobernación.
1- Instaurar el estado de derecho para recuperar la paz en Morelos.
2- Investigar y castigar a funcionarios que han cometido actos de corrupción o de represión.
3- Revisar y cambiar la estrategia de seguridad.
4- Investigar y castigar a los responsables de las irregularidades en el Paso Exprés.
5- Concluir el proceso de exhumación en las fosas de Tetelcingo y Jojutla y castigar a los responsables.
6- Resolver el rescate financiero de la UAEM para que no se afecten a más de 40 mil estudiantes.
La marcha sale el próximo lunes 31 a las 10 am de la Paloma de la Paz; ese día llegan a Coajomulco, donde pernoctarán y avanzarán al día siguiente hasta Topilejo. De acuerdo a lo planeado, los participantes de la caminata, entre los cuales se encuentran el Obispo de Cuernavaca Ramón Castro y el rector de la UAEM Alejandro Vera, llegarán el jueves a las oficinas de la Secretaría de Gobernación, en Bucareli, y serían recibidos por el secretario Miguel Ángel Osorio Chong ese día a las 10am.
- es viernes
Los hombres tenemos un sexto sentido que regularmente nos sirve para cancelar los otros cinco y tomar la decisión equivocada. Aun en circunstancias en las que actuar con sensatez parecería lo más fácil del mundo, hallamos la manera de echarlo todo a perder.
Es, digámoslo así, un sexto sentido apocalíptico que una vez puesto en funcionamiento desencadena la catástrofe y la lleva a su plenitud a pesar de cualquier obstáculo que se le ponga.
Se nos da natural, sobre todo en viernes; más aún cuando hay alcohol de por medio.
Para evitar catástrofes recordemos: hoy toca.
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