Precandidatos
El panorama puede cambiar, pero ya se pueden anticipar algunos posibles escenarios electorales en la tierra de Zapata. ¿Quién ganará la gubernatura de Morelos en el 2018?
El proceso electoral 2018 está a unos días de comenzar y aún no hay claridad sobre la manera como se moverán los partidos en Morelos. A menos de un año de que se instalen las urnas no hay certeza de lo que va a ocurrir, aunque desde ahora se pueden delinear algunos escenarios rumbo a la sucesión. Ningún partido tiene la fuerza suficiente para ganar, ni tampoco hay un candidato que por si solo garantice el triunfo bajo cualquier sigla. La victoria depende de la mezcla Partido-Candidato.
Analicemos algunos posibles escenarios con alianzas:
Cuauhtémoc Blanco tiene asegurada la candidatura por el PES, pero no hay garantía de que su popularidad alcance para ganar el estado en un partido pequeño. Encuentro Social es una oferta política nueva que surge en torno a la comunidad cristiana y recibe un fuerte apoyo del secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, ha ido ganando terreno con el trabajo de José Luis Borbolla, pero no tiene mucho tiempo para armar la estructura necesaria para un proceso estatal. El futbolista es quien mejor aparece en las encuestas y ha llamado la atención del PRI, que ya ha dicho que podría postularlo para la gubernatura. Bajo las siglas del PRI y el PES, el alcalde de Cuernavaca sería un candidato muy fuerte en el 2018.
En el PRD el candidato que más se mueve es Rodrigo Gayosso. El joven dirigente comenzó a trabajar la candidatura mucho antes que todos los demás perredistas, lo ha hecho en lo personal, acudiendo a todos los municipios y en lo estructural, sumando posiciones y grupos al partido. El perredista ha comprometido a su causa a varios partidos (PSD, NA, MC) y de concretarse su aspiración, encabezaría la coalición o alianza más amplia de todas. El problema de Rodrigo es la imagen que le hereda el gobernador y el desgaste que le ha causado el parentesco familiar; desde el partido del gobierno Gayosso sería un candidato fuerte, sobre todo si al final consolida el acuerdo político para ir en alianza con el PAN.
Rabín Salazar va en caballo de hacienda rumbo al 2018, está en el partido mejor posicionado y es el único que recibirá votos como consecuencia de la ola nacional. El senador es una figura respetada en la izquierda, pero también extrañada por sus prolongadas ausencias del estado. Morena es sin lugar a dudas el partido con más crecimiento y mayores posibilidades de triunfo, pero Rabín no ha hecho mucho trabajo local, se mantiene lejos de la ciudadanía y carece de una buena dirigencia estatal. Morena es el partido a vencer en el 2018, pero Rabín Salazar está muy lejos de ser el candidato más rentable de la boleta.
Si no se concretan las alianzas se abren otros posibles escenarios:
Javier Bolaños o Víctor Caballero podrían ser el abanderado de Acción Nacional en Morelos si el PAN no acepta unir su destino al del PRD; ambas figuras son respetables, tienen ascendencia en su partido, pero ninguno, hasta ahora ha hecho un verdadero trabajo de campo. Javier está alejado de Morelos desde hace un par de años y Caballero no se ha atrevido a dar el paso para intentar ganar la candidatura. Los dos son hombres respetables, pero lucen demasiado confiados (o resignados) a que no serán candidatos o piensan que no tienen posibilidades de triunfo en el 2018.
Matías Nazario trabaja insistentemente por la candidatura del PRI, baja recursos a los municipios, hace política en México y si no hay alianza con el PES, difícilmente le quitarían la postulación. Un problema de Matías es que su posicionamiento social no le alcanza para ganar la elección si enfrente está el futbolista; el otro es que internamente no concilia y los grupos que se apoderaron del partido (los Maricelos y los Amados) nunca lo apoyarían y por el contrario, en todo momento buscarían venderlo.
Hay voces en el Revolucionario Institucional que consideran que al abrirse a las candidaturas ciudadanas un buen candidato sería Alejandro Vera; si el rector supera sus problemas legales y sale avante de su lucha personal con el gobernador, podría darle al PRI una imagen distinta y mayor competitividad electoral. Alejandro Vera tiene trabajo social en todo el estado, a través de la universidad ha logrado una presencia importante en muchos municipios y goza de simpatía en miles de estudiantes y ciudadanos. El reto de Vera es uno: no ser procesado antes de que inicie la contienda electoral.
Una segunda opción en el PRD es la diputada Lucía Meza; la joven cuautlense ha trabajado intensamente en los últimos meses y ganó presencia estatal a partir de sus programas de asistencia social. El crecimiento electoral de Lucía la volvió atractiva para varios partidos, pero hasta ahora su decisión ha sido mantenerse en las filas del Sol Azteca. No tengo claro si culturalmente Morelos está listo para elegir a una mujer gobernadora (en el 2015 el voto a las mujeres fue muy bajo), pero estoy convencido que Lucía Meza debe participar en una fórmula electoral como cabeza o como primer acompañamiento, es decir, como candidata a gobernadora o en la primera senaduría.
Una figura que hace ruido y genera polémica es el ex alcalde de Cuernavaca Manuel Martínez Garrigós. El otrora priísta decidió apostar por Morena, intentó afiliarse al partido pero la dirigencia estatal no se lo permitió; Garrigós tiene buen trato con la cúpula nacional del Movimiento de Regeneración Nacional e insiste en transitar por ese camino a pesar de los desprecios locales. Manuel tiene muchos puntos negativos, la gente no le perdona sus errores en Cuernavaca, ni le concede el beneficio de la duda. A pesar de ello el ex alcalde no se rinde, anda en la calle, arma estructura y navega a contracorriente, como siempre lo ha hecho.
Muchas cosas van a cambiar antes de que los partidos definan sus estrategias y elijan a sus candidatos. Estos son algunos escenarios posibles con algunos personajes que desde ahora trabajan para competir.
Nadie tiene garantizado el triunfo, las estructuras, las siglas y el dinero sirven, pero lo que será definitivo será el voto de la gente. Quien haga salir a los que nunca votan, ganará las próximas elecciones.
- posdata
La lucha contra la corrupción en Morelos va en serio, dicen algunos actores de poder. No habrá más impunidad, ni se permitirán abusos de parte de quienes están al frente de las instituciones.
La postura que han tomado algunos políticos en el caso de Alejandro Vera Jiménez, a quien el gobierno y el congreso acusan de actos de corrupción y malos manejos de recursos públicos es una muestra clara de esa decisión.
“Parecería que se está reeditando Al Diablo con las Instituciones”, dice el diputado perredista Enrique Laffite al poner al rector de la universidad como un ejemplo de lo peor que hay en nuestro estado; un pillo, un ladrón, casi un demonio tricolor que merecería ser quemado en leña verde y sentenciado a escuchar eternamente los discursos parlamentarios.
Las palabras que hace unos días dijo en el congreso el honestísimo diputado Laffitte Bretón reflejan el sentir de algunos políticos hacia el rector; hay odio personal y desprecio político contra un hombre al que acusan de corrupto, de haber abusado del poder, pervertido el servicio público, desafiado a las instituciones y manipulado a los estudiantes. ¡Pinche rector!
El despreciable Alejandro Vera es un sujeto que no ha querido transparentar el manejo de los recursos universitarios y gasta mil millones de pesos en nómina al año (el congreso sólo se gasta 500), dice el diputado perredista; ¡Que infame! ¡Esa es la clase de enseñanza que le da a los alumnos de nuestra universidad! Asegura Laffite al retomar los argumentos de otro diputado: Jaime Álvarez.
¿En dónde está el dinero? preguntaba al jefe universitario hace algunos meses el honorabilísimo Paco Moreno, al demandar transparencia en el crédito de 600 millones de pesos, 200 menos de lo que costó el estadio Coruco Díaz.
La lucha contra el rector de la universidad ha pasado del debate político a la formalización de las denuncias; el sábado pasado el gobierno del estado presentó su queja ante la fiscalía y acusó al rector por “Abuso de confianza y Uso indebido de atribuciones”.
Sin duda Alejandro Vera Jiménez debe aclarar en dónde quedaron los 600 millones de pesos que solicitó como préstamo universitario. No basta que diga que en cuatro años duplicó la matrícula universitaria (de 19 a 42 mil alumnos), tampoco que muestre que la infraestructura de la UAEM casi se duplicó al pasar de 100 mil a 198 mil metros cuadrados. ¡¿A quien importa que se tenga presencia universitaria en casi todos los municipios o que se haya dotado a la comunidad estudiantil de Claustros, Laboratorios, unidades deportivas o aulas?!
¿Dónde está el dinero de la universidad? es la pregunta que flota en el recinto legislativo. ¿Dónde está el dinero? preguntan en tono más bajo esos mismos diputados cuando también preguntan qué sucedió con los más de mil millones de pesos que desapareció Francisco Moreno.
Enrique Laffite y Paco Moreno son ejemplos claros de honestidad, son los personajes defienden la probidad legislativa y los que mejor defienden a las instituciones morelenses. Es momento de ir por pillos como Alejandro Vera; ya habrá tiempo para investigar cosas menores y triviales como el endeudamiento del estado, las fosas clandestinas, la alta criminalidad, el socavón del Paso Exprés, la trata de personas o la mala calidad de las obras estatales.
Alejandro Vera debe ser procesado, detenido, encarcelado y lapidado, ha desafiado a las instituciones, le faltó el respeto al congreso, plantó a los diputados y se atrevió a invertir dinero… ¡en educación!.
¡Aplausos al diputado Laffitte! ¡Votemos por él en el 2018!
- nota
Los priístas de Morelos discuten intensamente la candidatura a la gubernatura, pero poco hablan de la propuesta capitalina. Algunos consideran que ese espacio será el premio de consolación para quienes se queden en el camino, aunque ello implicaría una derrota anticipada en la ciudad.
A pesar de la popularidad de Cuauhtémoc Blanco Cuernavaca se ve mal, luce sucia, insegura, maltratada, subdesarrollada y en completo desorden. Patear balones no es lo mismo que gobernar.
¿Y si el PRI apostara por una figura que garantice orden? ¿Qué tal Víctor Saucedo? Frente a Matías, Maricela, Moreno o Meade, el actual subdirector general de la Lotería Nacional no luce nada mal.
- post it
Esta semana están llamados a comparecer en el Congreso de la Unión el titular de la SCT y el gobernador de Morelos; los legisladores quieren escuchar de ambos lo que ocurrió en el Paso Exprés de Cuernavaca el día que perdieron la vida dos personas.
La semana pasada Graco Ramírez realizó una intensa gira de medios en la que reiteró sus denuncias contra el secretario Ruiz Esparza; lo acusa una y otra vez de evadir sus responsabilidades tratando de culpar a todo mundo de lo ocurrido aquella mañana que se abrió el socavón.
“Me parece que está construyendo una cortina de humo para no asumir su propia responsabilidad como secretario de Comunicaciones. Esa obra la decidió la Secretaría de Comunicaciones y quiere llegar al Senado diciendo: Todos son culpables menos yo; el señor fue el que hizo la obra, no yo’”, dijo Graco Ramírez a Ciro Gómez Leyva.
El mandatario morelense insistió en que no tienen ninguna obligación de asistir pero sí tiene la convicción de aclarar que “es absurdo que el responsable de la obra, quien decidió el contrato, quien decidió un sobreprecio, no tenga ningún tipo de responsabilidad”.
Sobre la participación de los equipos de rescate Graco Ramírez aseguró que actuaron conforme al protocolo y que existen videos que demuestran que “no podía operarse en la zona porque se estaba derrumbando constantemente el concreto”. Ruíz Esparza ha dicho que la muerte de las dos personas fue por omisión del gobierno del estado al no haber actuado a tiempo; “Murieron de asfixia, no por el golpe” y los cuerpos de rescate actuaron más de dos horas después del incidente, ha señalado la dependencia federal.
La que transcurre es una semana clave en este tema, el ambiente se ha calentado con las declaraciones del gobernador. Las diferencias entre el gobierno federal y el estatal por este tema son inocultables.
- redes sociales
Nada bien le fue al tabasqueño en las redes sociales la semana pasada. De manera natural u orquestada al perredista le tundieron bajo los hastags #GracoAndabronco, #MeAhogoComoGraco y#TanLocoComoGraco. Parece que le están calentando el ambiente de cara a su comparecencia en San Lázaro con motivo del socavón. Los mensajes fueron tantos que durante cuatro días marcaron TT nacional. Ni los Gracobots pudieron detener la embestida.
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