Los argumentos con los que las constructoras Aldesem y Epccor, junto a la representación en Morelos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), los cuales encarecieron a más de 70 por ciento la obra del Paso Exprés en Cuernavaca, fueron la problemática social, las condiciones ambientales, el retraso en la autorización por parte de las autoridades municipales y la exigencia de habitantes de la zona porque se difundieran los alcances del proyecto; por estas condiciones, los particulares y la dependencia determinaron un pago superior a los 600 millones de pesos sobre lo que se habría programado.
El convenio modificatorio de ampliación al monto y tiempo del contrato No. 2014-17-CE-D-062-W-00-2014-04, signado por el entonces director general del centro SCT Morelos, José Luis Alarcón Ezeta; el jefe de su unidad jurídica, Ramiro Benítez Alpizar y el representante común de las constructoras, Félix Toquero Alonso, establece modificaciones al contrato del 28 de noviembre de 2014, que valoraba los trabajos del Paso Exprés en 901 millones 601 mil 683.15 pesos, más el impuesto al valor agregado, para dejarlos finalmente en mil 548 millones 800 mil 861.22 pesos, más el consabido impuesto, un total de mil 796 millones 609 mil pesos; incremento que el propio convenio reconoce en 71.78 por ciento.
En el documento se establece que “derivado de las diversas adecuaciones al proyecto, y dar respuesta a las peticiones de tipo social se han generado diversos conceptos de obra no contemplados en el catálogo original de conceptos, así como cantidades adicionales a las originalmente contempladas en la licitación, mismas que han generado un incremento al monto originalmente contratado”.
Párrafos antes se plantea que la recalendarización de los trabajos y la reprogramación de las actividades a ejecutar se debieron a “la problemática social que se ha tenido y las interferencias en la construcción, originadas por la modificación de las condiciones ambientales en la zona donde se realizan los trabajos, así como el retraso en la autorización por parte de las autoridades municipales de los permisos ambientales y la insistencia de los habitantes de las diversas zonas por las que se desarrolla la obra, solicitando que se difundan los alcances y condiciones del proyecto”.
El nuevo monto acordado en el convenio del 5 de enero de 2017 fue el valor de la obra por encima de las posturas de las otras 13 empresas que habían licitado la misma, siendo la postura más alta de Assignia Infraestructuras, por poco más de mil 558 millones de pesos, según consta en el acta de fallo de la licitación pública internacional LO-009000999-T422-2014 que adjudicó la obra del Paso Exprés.