Mil 400 mdp del Morebús pueden redireccionarse a damnificados
El fenómeno natural que sacudió varios estados del país entre ellos México, puso en evidencia que el gobierno en sus tres ámbitos: federal, estatal y municipal no están preparados para situaciones de esta envergadura y por ello, quedaron rebasados por la sociedad al momento de querer actuar. Las autoridades, salvo sus excepciones, se vieron lentas, torpes, corruptas, negligentes y omisas. Fue la solidaridad del pueblo mexicano quien volvió a mostrar su firmeza y deseo de colaboración en desastres naturales como el sismo del 19 de septiembre en Morelos.
¿Y DESPUÉS DEL SISMO, QUÉ? A días de cumplirse un mes de esa trágica fecha que evidenció lo frágil que somos, quedan muchas dudas, temores, miedo e incertidumbre de lo que sucederá con las cientos y quizá miles de familias que lo perdieron todo, a pesar del apoyo que la sociedad y organizaciones civiles y sociales han ofrecido a cambio de nada. A 24 días del 19 de septiembre, hoy reina entre los damnificados la triste por este inédito suceso que nos hizo despertar y que también mostró ese musculoso corazón de los mexicanos por juntos salir a las calles a mover escombros y rescatar personas y escombros. Así como continuar haciendo las donaciones que sean necesarias para los afectados. Para muchos, la etapa más difícil es la que están viviendo muchas familias que perdieron absolutamente todo, desde familias, casa, muebles, trabajo y su hogar.
Hay evidentemente, historias loables, de héroes que dieron todo incluso, sin importar poner en riesgo su integridad física por tratar de salvar vidas de muchos quienes estaban bajo los escombros. Todos estos testimonios que se han ido relatando en los medios quedarán para la posteridad.
Lo cierto, es que hoy en Morelos anuncian las autoridades federales a través de la SEDATU que hay más de 15 mil viviendas consideradas con daños por el sismo, pero además, son alrededor de 3 mil las casas que quedaron destruidas de manera total y esto significa que estas familias ya no podrán regresar a sus hogares.
Y no solo casas, casi el 90 por ciento de las iglesias en el estado quedaron lastimadas severamente y muchas están a punto de colapsarse además de las poco más de mil 500 escuelas dañadas y las 28 que tendrán que ser demolidas porque representan un riesgo para la integridad de los alumnos.
Insisto, ahora el problema será para el gobierno como ayudar a resolver la problemática de quienes perdieron sus casas, porque lo más que pueden ofrecer de ayuda económica, cumpliendo todos los requisitos será por la cantidad de 120 mil pesos que para los especialistas de la construcción, no servirá esa cantidad de dinero ni para un píe de casa.
LA CORRUPCIÓN EN EL TRANSPORTE.- Nadie en su sano juicio, duda que el proyecto del Morebús en Morelos nació viciado y con señalamientos por actos de corrupción y más, porque un proyecto que tuvo que haberse iniciado al inicio del sexenio se quiere más a fuerzas que de ganas, pretenden llevarlo a cabo a menos de que concluya esta administración que ha sido cuestionada y acusada de malos manejos durante los últimos cinco años por lo que ese programa del transporte no es la excepción.
Y más incongruente es todavía, porque un secretario de Movilidad y Transporte como fue Jorge Messeguer Guillen a quien corrieron por acusaciones de corrupción por los más de 4 mil juegos de placas -con varios millones de pesos en el aíre-, en lugar de ser investigado y castigado incluso penalmente, se le dio un premio de consolación Graco Ramírez, su amigo de toda la vida, le haya credo el Programa de Proyectos Estratégicos de la Oficina de la Gubernatura y peor aún, pese a la mala fama que tiene, será o pretenden que sea él quien lleve a cabo el proyecto del Morebús. Y entonces, para qué sirve, para qué está el titular de la SMyT, David Martínez Martínez. Dice un viejo refrán: “Crea fama y échate a dormir”, por lo que el desprecio, rechazo social y acusaciones de corrupción es que están cosechando los integrantes del gobierno de la nueva visión.
MIL 400 MILLONES DE PESOS PUEDEN SER PARA DAMNIFICADOS.- Lo lógico es que a menos de un año de que concluya la peor administración de Morelos y en pleno proceso electoral, el proyecto del Morebús debe de suspenderse y que lo analice y de ser viable, lo ponga en marcha la siguiente administración. De darse ello, permitiría que al menos mil 400 millones de pesos que fueron gestionados por el gobierno para este proyecto del Morebús puedan destinarse a la reconstrucción de las casas y a darle un impulso real y efectivo, a las zonas de desastre.
Ahí está una alternativa para verdaderamente ayudar con proyectos productivos que permitan reactivar la economía del estado, dejando de lado un programa que ha dividido y que pone en riesgo miles de empleos de quienes se dedican a la actividad del transporte.
Hoy, solo basta voluntad de las autoridades para dejar de lado sus intereses económicos y proyectos electorales que el gobierno del PRD intenta, sin importar que hoy la sociedad sigue inmersa en los escombros por el sismo.
Y más, porque es imposible reconstruir una vivienda en las familias que perciben un salario mínimo y por tanto, los mil 400 millones es un presupuesto que se puede redireccionar sí en verdad quieren ayudar dejando de pensar en el beneficio que les traerá el manipular el dinero para el Morebús.
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