El pasado miércoles 1 de noviembre, la corriente interna del PRD y agrupación política nacional, Iniciativa Galileos, presentó el Frente Ciudadano por Morelos, que hasta ahora ni es frente, ni es ciudadano, ni existe en Morelos.
Con la presencia de varias expresiones nacionales del PRD representados por Guadalupe Acosta Naranjo, Gilberto Ensastiga, Miguel Alonso Raya, entre otros, los perredistas vinieron a mandar tres mensajes:
1.- El PRD en Morelos no es de Rodrigo Gayoso Cepeda ni de Graco Ramírez.
2.- Sin alianzas, el PRD Morelos no tiene ninguna posibilidad de ser competitivo en el próximo proceso electoral, por eso se debe apostarle con todo al Frente.
3.- Graco Ramírez, como gobernador, no será el gran elector dentro del PRD, ni Rodrigo Gayosso el candidato a sucederlo.
De esta manera, el evento fue enteramente perredista y con mensajes dirigidos a sus militantes.
El destape que hicieron del presidente municipal de Cuautla, Raúl Tadeo Nava (que no autodestape) fue para que otros perredistas se atrevan a levantar la mano, buscan mover la estructura y darle vida a un perredismo más bien aletargado, burocratizado y sometido al capricho de quien se cree dueño del PRD en Morelos y que desde ahí, promueve un ficticio liderazgo al cual todos deben estar sometidos y formados detrás de él, al más puro estilo del juego del tapado en el PRI del siglo pasado, partido en el cual no hace mucho militaba el “autoritario” Gayosso Cepeda, en contraste con el “conciliador” Raúl Tadeo Nava, de cuna perredista.
La pregunta es: ¿lograrán sus objetivos? ¿Les alcanzará el tiempo? Algo claro es que actualmente el futuro del PRD en Morelos no depende ni de su dirigencia ni de sus militantes, sino de ir en alianzas con otros partidos u organizaciones que les den posibilidades, pero el problema es que ni sus antiguos socios del PT van con ellos y hasta en el partido Movimiento Ciudadano tienen sus reservas.
Por eso la obsesión perredista con el Frente, por ello la “apertura” de plazas en gobiernos perredistas a militantes de otros partidos políticos, como la llegada de la panista Esther Carrillo Salas a una subsecretaría en Jiutepec; o la toma de protesta de Alejandro Álvarez, muy cercano a Jaime Álvarez, como titular del Seguro Popular en el estado; o la propuesta hecha a Juan Carlos Martínez Terrazas de entrar al relevo de Matías Quiroz, o de que la Mesa Directiva del Congreso sea para el PAN; o de que Adiem Coparmex sea para el “adamista” Ricardo Esponda Gaxiola. De este tamaño es la desesperación perredista y su proceso “de construcción de acuerdos”.
Con todo el perredismo construyendo el Frente Ciudadano por Morelos como salvavidas electoral, en el PAN sólo han encontrado eco en el grupo político del ex gobernador Marco Antonio Adame Castillo, no en vano aceleró su destape Víctor Caballero y ha intensificado su campaña de posicionamiento Juan Pablo Adame: todo sea porque sus posibles designaciones, no parezcan imposición desde el ámbito nacional, como hasta ahora han logrado las posiciones que han ocupado.
En este punto, hoy martes, las tres dirigencias estatales de los partidos políticos que integran en lo nacional el Frente Ciudadano por México, están citados en la capital del país para seguir tejiendo desde el ámbito nacional, lo que se desteje en lo local: el Frente Ciudadano por Morelos.