Confesión de parte
Desde hace meses, 200 profesionales de todas las disciplinas, empresarios, dirigentes sociales e intelectuales, han trabajado en la elaboración del Plan de Desarrollo 2018-2024 del partido Morena.
El plan de gobierno se presentará en un acto multitudinario en el Auditorio Nacional el próximo 20 de noviembre. Así lo informó López Obrador, presidente de ese partido, en su cuenta personal de redes sociales.
Se espera que ahí mismo el tabasqueño adelante parte de lo que será su gabinete presidencial.
El calendario electoral prevé que las precampañas arranquen hasta el 14 de diciembre y las campañas de manera formal en marzo del 2018.
Un evento de masas el 20 de noviembre, con programa de gobierno y destape colectivo de gabinete es a todas luces un acto anticipado de campaña, prohibido por la ley electoral.
Frente, en la penumbra
Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno de la Ciudad de México y aspirante a la candidatura presidencial, insistió en que el Frente Ciudadano transparente sus decisiones y procesos.
Lo ha demandado varias veces, pero como el tiempo apremia, se ha vuelto más enfático. Se vislumbra
ahí una fisura que puede crecer hasta transformarse en ruptura.
Y es que el Frente Ciudadano, después de una luminosa presentación en sociedad, ha ido cayendo en una zona de penumbra.
El triunvirato que lo comanda trabaja en lo oscurito, distante de los ciudadanos, en temas torales, como el procedimiento para elegir candidatos.
Lo que no quieren ni el jefe de Gobierno ni Moreno Valle, ni Silvano Aureoles ni otros es enterarse de las designaciones por el periódico, cuando ya no quede nada qué repetir.
Alto contraste
Cada vez son menos los egresados de normales en Oaxaca que exigen plazas docentes automáticas en el sistema educativo.
Mientras unas decenas de normalistas se movilizaban por las calles para obtener un espacio, otros 350 participaban en el concurso para ingreso al Servicio Profesional Docente.
En contraste, en Guerrero los normalistas tomaron casetas para presionar y obtener por la fuerza un empleo de manera automática.
La reforma educativa tiene un largo y sinuoso camino por recorrer.
Mañas replicadas
La mayoría de los aspirantes a candidatos independientes se parecen cada vez más a los candidatos tradicionales.
Son como dos gotas de agua, pero sucia.
Va un ejemplo irrefutable. Apenas 11 de los 286 aspirantes registrados han cumplido con su responsabilidad de reportar al INE sus ingresos y gastos realizados.
Estamos hablando de menos del 4 por ciento
del total.
Falta ver si cuando por fin cumplan con su responsabilidad no hagan, como los candidatos tradicionales, el chanchullo de recurrir a un mago de las finanzas para que las cifras cuadren.
La idea es que hicieran, para contrastarse, las cosas bien.