LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS…
Antes de irse del estado y del Poder Ejecutivo, el gobernador Graco Ramírez tendrá los suficientes recursos financieros para echarse la última copa de champagne y comer excelente a nombre de los morelenses, así como llevarse su “guardadito”.
Ni duda cabe que antes de irse, Graco Ramírez tiene que “limpiar” su creada, por él mismo, mala imagen y por ello prefiere otorgar más dinero al área de la Coordinación Estatal de Comunicación Social, que al sector educativo, salud y al agro juntos.
La visión electorera del peor gobernador que ha tenido Morelos en toda su historia, es solamente por continuar con el saqueo del estado, a través del Partido de la Revolución Democrática y para ello contará con 122 millones 995 mil pesos.
En otras palabras, la Coordinación Estatal de Comunicación Social dispondrá de esos cerca de 123 millones de pesos, solamente para crear una imagen falsa de un gobierno que dejará severamente endeudada a la entidad.
Comparado con los dos gobiernos anteriores, para el área de la imagen del Jefe del Ejecutivo tuvo un incremento del siete mil por ciento comparado con el gobierno de Sergio Estrada Cajigal Ramírez lo supera y en mucho, porque durante la administración 2000-2006 el gasto del área fue de 17 millones de pesos.
Con el gobierno de Marco Antonio Adame (2006-2012) el gasto en materia de Comunicación Social apenas llegó a los 21 millones de pesos, con varias restricciones en ambos sexenios, que fue de contratar publicidad solamente a medios de comunicación locales.
El presupuesto para Comunicación Social para el año 2018 es de 122 millones 995 mil pesos, de los que dos terceras partes de la próxima anualidad serán ocupados por el gobernador Graco Ramírez.
En este año, Graco Ramírez ha gastado más de 180 millones de pesos –conforme al organismo México contra la Corrupción- en publicidad y significa un exceso a lo aprobado por el Poder Legislativo.
La deuda con medios, a nivel local es de 80 millones de pesos, a los que conforme al organismo ciudadano porque les ha dejado de pagar del mes de febrero a la fecha y prefiere colocar información de “ocho columnas (o principales)”, en diarios impresos y medios electrónicos de la Ciudad de México, solamente para agredir, difamar y hacer campañas contra sus enemigos políticos.
Los recursos de los morelenses en materia de comunicación social son tirados a la basura y únicamente utilizados para que también los gacetilleros locales, que reciben entre 20 a 26 millones de pesos mensuales y que son dos, también no son para promover al estado, sino los odios de un gobierno que ya está en decadencia.
Con esos 122 millones 995 mil pesos sin duda alguna Graco Ramírez los utilizará para seguir agrediendo a instituciones como es la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, para promover una falsa imagen del estado y para el tema electoral a favor de su partido: el PRD.
A cambio, el gobierno estatal para el sector educativo solamente otorgará 22 millones 324 mil pesos, una limosna. Al sector Salud el recurso será de 20 millones 325 mil pesos y para el campo o agro morelense su presupuesto del año 2018 será de 25 millones 122 mil pesos.
Al gobernador como buen mitómano le gusta presumir que ha dado recursos sin precedentes al campo mexicano, para que no falte la producción de alimentos y presume cifras sobre los tres mil millones de pesos.
Sin embargo, las cifras oficiales son contundentes en seis años de gobierno su real apoyo al sector agropecuario fue menos a los 120 millones de pesos, a cambio, en materia de imagen llegó a los casi 800 millones de pesos.
El sector educativo del que Graco Ramírez presume el programa Beca Salario, que al momento sigue sin otorgarse a los estudiantes, la realidad es que son recursos del gobierno federal y de esos la administración del perredista no aporta un solo centavo.
Los más de 600 millones de pesos para Beca-Salario, mil 200 millones al pago de salarios, compensaciones, prestaciones sociales, estímulos y aguinaldos para profesores del nivel básico también son recursos del gobierno de la República y la administración Graquista sigue sin aportar un solo peso.
Y en este rubro de educación, el presupuesto para el año 2018 es de 22 millones 324 mil pesos, mientras que para el sector Salud son 20 millones 325 mil pesos dirigidos solamente para el pago de la nómina de los trabajadores que corresponden al estado.
Entre educación, salud y campo –juntos- lo “invertido” por el gobierno de la izquierda o progresista apenas alcanza los 67 millones 771 mil pesos anuales, que significan 55 millones 224 mil pesos menos que su gasto de imagen.
De ahí que Graco Ramírez en el año de Hidalgo, sabe que es el final y ya no habrá más, por eso en la última y nos vamos también obtuvo varios beneficios, un crédito por dos mil millones de pesos que podrá manejar a su antojo, así como vender o desincorporar lo que a los morelenses – estado que no es nativo ni le interesa- les pertenece para seguir robusteciendo su cuenta bancaria personal.