EN LO QUE son peras del Frente o manzanas independientes, cuentan por ahí que dos suspirantes presidenciales ya contemplan planes alternos para competir en el 2018.
SEGÚN ESTO, el panista Rafael Moreno Valle le da vueltas a la posibilidad de lanzarse como candidato de Nueva Alianza, partido al que lo une una laaarga historia desde las épocas en las que él era uno de los alumnos favoritos de la profesora Elba Esther Gordillo.
EN TANTO, dicen que la ex panista Margarita Zavala tiene sobre la mesa un "Plan C" si no junta suficientes firmas para que funcione su "Plan B" de ser candidata sin partido. Y que ése sería aparecer en la boleta del 2018 bajo las siglas del Partido Encuentro Social.
ASÍ ES QUE, de aquí al 22 de febrero que se cierra el registro de aspirantes a Los Pinos ante el INE, aún pueden darse varias sorpresas y vueltas de tuerca como en novela de Agatha Christie.
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NADA BIEN cayó entre varios de los promotores del Frente Ciudadano por México que la presidenta nacional perredista, Alejandra Barrales, abriera la baraja de los personajes a quienes se les ha ofrecido la candidatura presidencial.
EL ASUNTO es que no saben si su intención fue darles un quemón público, o de plano pintar un complicado panorama en el que nomás no encuentran a un ciudadano sin partido que quiera aventarse ese trompo a la uña. ¿Qué será, qué será?
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ESO DE que Andrés Manuel López Obrador decidiera registrarse como precandidato presidencial de Morena el mero día de la Virgen (Morena) de Guadalupe está dando mucho de qué hablar.
UNA DE DOS: o no se dio cuenta de las implicaciones que tiene hacer un acto político en México el 12 de diciembre, o se dio perfecta cuenta y el marketing de su precampaña sonará a canción de Enrique Iglesias: ¡toda una "Experiencia Religiosa"!
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NO ES por intrigar, pero parece que las cosas no inician bien en la investigación del asesinato del ombudsman de Baja California Sur, Silvestre de la Toba, y de su hijo.
EL GOBIERNO del panista Carlos Mendoza Davis decidió crear una Fiscalía Especial para esclarecer el caso. Y si algo hemos aprendido en México en las últimas tres décadas es que esos organismos resultan onerosos, burocráticos, enredan las cosas y terminan por no esclarecer lo ocurrido.
¿Y SI EN VEZ de darle un trato extraordinario a la investigación las autoridades ministeriales hicieran bien su trabajo ordinario? Es pregunta que no tiene nada de especial.