Del Valle, Meade, Moreno, Nazario
La ya próxima selección del candidato presidencial del PRI (José Antonio Meade, Miguel Ángel Osorio y/o Aurelio Nuño) y la definición de las alianzas que hará con otros partidos políticos, empiezan a aclarar el panorama de lo que ocurrirá en Morelos en el 2018, con el candidato del tricolor a la gubernatura que, de acuerdo a lo que me hizo favor de deslizarme un enterado del tema, generó ya el descarte y colocó un reducido listado de finalistas.
Con la salvedad de que la candidatura no se negocie con otro partido, como podría suceder con Encuentro Social (PES), que llevaría a la cabeza a Cuauhtémoc Blanco, si el PRI designa abanderado, éste saldrá de entre los siguientes (mencionados en estricto orden alfabético): Guillermo del Valle Reyes, Jorge Meade Ocaranza, Francisco Moreno Merino y Matías Nazario Morales, ningún otro, ninguna mujer, ningún joven.
Cualquier otro que se promueva, como el ingenuo y oportunista, Víctor Samuel Palma, el desprestigiado y corrupto, con presuntos problemas legales por pederasta, Amado Orihuela, con todo y que tenga a su servicio, y al de Rodrigo Gayosso, al Juanito Vargas de la Ley de Herodes, el rancherito pueblerino y escurridizo, Alberto Martínez, o la belicosa y problemática Rosalina Mazari, como la senadora Lizbeth Hernández, no hacen más que buscar el rebote y asegurar trascendencia y nómina para los próximos 3 años.
De los enlistados en el PRI, en la recta final por la candidatura al gobierno, quien dispone de la estructura territorial más sólida, pero también de la propuesta más seria para seleccionar al abanderado (una encuesta telefónica realizada por representantes de los cuatro), es el actual delegado federal del ISSSTE, Guillermo del Valle Reyes, gracias a quien Lizbeth Hernández ganó la elección y se hizo senadora.
Con Jorge Meade Ocaranza, no coincido por ese sello traicionero, corrupto, desleal y cínico que ha marcado su carrera; por ese estilo servil y abusivo que mantiene y lo muestra como exponente de la política de la bicicleta: se agacha con los de arriba y patea a los de abajo, sin embargo está jugando y, para conseguirlo, lo reconozca o no, porque a sus espaldas se burla de él y hace bromas de mal gusto sobre su persona, ha contado con el apoyo del diputado Francisco Alejandro Moreno Merino.
Precisamente el ex diputado federal, ex Procurador Federal del Medio Ambiente (Profeco) y catedrático en activo de la Facultad de Derecho de la UNAM, Paco Moreno está entre los posibles, por una sencilla razón, pero de muchísimo peso. Es el único que habla de tú a tú con el presidente Enrique Peña Nieto. Son amigos hace años. Como es amigo también, de los más influyentes integrantes del gabinete presidencial.
Más: el diputado Moreno Merino dispone de amistades del tamaño del ex presidente Carlos Salinas de Gortari, como también de personajes encumbradísimos de la política nacional, como Manlio Fabio Beltrones. Su camino está pavimentado rumbo a la candidatura que, en el peor de los casos podría llevarlo al Senado de la República.
En el caso del diputado federal Matías Nazario, es quien dispone de apoyos importantes, el más de ellos, del dirigente nacional del magisterio, Juan Díaz de la Torre. En abono de las posibilidades de Matías, suma y mucho, el intensísimo trabajo de gestoría que ha realizado y los cientos de millones de pesos que ha acercado a la entidad, para ejecutar importantes obras de beneficio colectivo.
Así las cosas, de los cuatro que juegan con posibilidad de asumir la candidatura del PRI al gobierno del estado, los 3 que se queden en el camino, incluso los cuatro, en caso de que el PES vaya en alianza con el PRI, me parece que tienen seguras posiciones en el senado y/o la cámara de los diputados federales o la legislatura estatal.
En la negociación, me aseguran que no entra el rebote de Cuernavaca, es decir, que alguno de ellos se caiga a la candidatura a la alcaldía, por una sencilla razón, para esa posición se tienen en los escritorios de quienes deciden en el comité nacional y la dirigencia de los sectores y organizaciones del tricolor, los nombres, únicamente de Alfredo Gutiérrez Trueheart, el colaborador más cercano y de más confianza del coordinador de la diputación federal priísta, el mexiquense César Camacho y; el del subdirector general jurídico de la Lotería Nacional, Víctor Manuel Saucedo. Ningún otro.
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