“Cada gota de sangre derramada de mi familia será un litro de sangre derramada de las suyas”, advirtió José Valdez Chapa, El Señor de la V, a los policías que lo capturaron tras la balacera del 30 de noviembre en Temixco, Morelos.
Mientras cargaba a un menor en un brazo y alzaba su teléfono celular con la mano, amenazó a los oficiales de la Comisión Estatal de Seguridad Pública por la muerte, durante la refriega, de su madre, esposa, dos hijos, una sobrina y otro familiar.
El presunto delincuente fue puesto a disposición de un juez de control, quien finalmente lo dejó en libertad al desestimar las pruebas que aportaron autoridades de Morelos.
Alrededor de 40 hombres a bordo de 10 camionetas integraron el convoy que lo recogió, según informes de inteligencia a los que MILENIO tuvo acceso.
De acuerdo con autoridades de la Comisión Estatal de Seguridad Pública de Morelos, Valdez Chapa está vinculado con el cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) en alianza con Guerreros Unidos y Los Linos.
El Señor de la V presume vínculos con el CJNG, sin embargo han aparecido narcomensajes supuestamente firmados por esta organización en la que ha sido amenazado de muerte.
ANTECEDENTES
Reportes oficiales señalan que entre sus antecedentes destaca que operó en Guerrero dentro del grupo delictivo Cártel del Sur y posteriormente formó una alianza con Guerreros Unidos, además de que ha sido responsable de la oleada de violencia que se ha generado en los municipios morelenses de Cuernavaca y Jiutepec.
El 21 de enero de 2017 fueron colocadas mantas en los kilómetros 87.5 de la autopista México-Acapulco, en Cuernavaca, y en el 19.5 de la carretera federal Cuernavaca-Acapulco, municipio de Xochitepec, en las que un grupo criminal autodenominado Comando Asesino lo identifica como jefe del cártel de la Sierra Sur, “productor y exportador de amapola y distribuidor de cocaína en Guerrero y sus alrededores, responsable de ejecuciones y desapariciones...”.
Valdez Chapa tiene 42 años y cuenta con domicilios en el poblado de Ahuatepec, Cuernavaca, así como en la colonia Tlacotepec, en Guerrero, y la colonia Rubén Jaramillo, municipio de Temixco, esta última en la que fue capturado el 30 de noviembre pasado, aunque el inmueble había sido identificado como propiedad de Crispín Gaspar Cortez, El Crispín.
Ante autoridades sostuvo que se dedica a la venta de vehículos, que su esposa era Camelia Rodríguez, con quien tuvo a sus hijos José Antonio, Carlos Alberto, Vanessa Giselle y Alejandro.
Consultas realizadas a través de Plataforma México detallan que el 13 de enero de 2017 fue detenido por el delito de violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos en la colonia Papayos de Cuernavaca.
Ese día, alrededor de las 21:55 horas, se recibió una llamada de auxilio al número de emergencias 911 en la que se denunció que en esa dirección estaban aproximadamente 20 hombres que realizaron unos 200 disparos contra un domicilio.
Se le relacionó en el homicidio del policía estatal Iván González Peñaloza, perpetrado el 3 de diciembre de 2015.
EL ENFRENTAMIENTO
El 22 de mayo de 2007 se le detuvo por violación a la Ley Federal de Armas de Fuego en Chilpancingo.
La balacera del 30 de noviembre de 2017 en la que fue detenido y fallecieron seis de sus familiares derivó de una denuncia en la que se denunció que había gente secuestrada.
La versión oficial indica que al arribar al lugar, la policía estatal fue recibida a balazos, por lo que los oficiales repelieron la agresión y se desató un enfrentamiento que duró más de dos horas.
Supuestamente Valdez Chapa es socio de Isaac Navarrete, El Señor de la I, líder del cártel del Sur en Guerrero, quien pretendía con su ayuda expandir su dominio en la Sierra y centro de ese estado, así como a municipios de Morelos, Estado de México y Puebla.
“El Señor de la V es padrino, además, de Rafael Medina Hurtado, El Gordo, lugarteniente de Isaac Navarrete y jefe de plaza de Filo de Caballos al que apoyaba con el sueldo de 50 sicarios que operan en ese lugar y pueblos aledaños, mismos que visten con playera de la Upoeg para pasar desapercibidos por las fuerzas castrenses”, se lee en un reporte de inteligencia.
El historial delictivo de este sujeto, quien fue liberado junto con tres hombres y una mujer, establece que perteneció al cártel de Los Rojos durante varios años y en su momento fue designado jefe de plaza de Tlacotepec y posteriormente de Chilpancingo.
Se le atribuye haber dado la orden de decapitar en ese municipio a ocho militares en 2008.
El 18 de agosto del presente año, dos sicarios se infiltraron en Tlacotepec, municipio de General Heliodoro Castillo, los cuales lanzaron dos granadas de mano en una fiesta infantil donde había por lo menos 40 niños y sus familias.
Su intención era asesinar a varios líderes de la recién creada policía comunitaria. Sin embargo, los artefactos no estallaron y los delincuentes fueron detenidos. En su declaración relataron que fueron contratados por Valdez Chapa, El Señor de la I y El Gordo.
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