OBSERVADOR POLÍTICO

En los últimos días los golpes bajos entre los propios aspirantes a competir por diversos cargos de elección popular se han intensificado, es más, las dirigencias locales de los partidos han sido rebasadas y quiénes eran prácticamente candidatos en varios institutos políticos, están viviendo hoy una incertidumbre política impensable por las ocurrencias y acuerdos nacionales que han tenido repercusiones porque varios en Morelos literalmente fueron desplazados en sus aspiraciones.

SE ENTREGÓ EL PRI AL PANAL.- Durante los últimos días han sido convocados al CEN del PRI la casi docena de aspirantes a gobernador por el Revolucionario Institucional, a quienes les han pedido paciencia, prudencia, calma y sobre todo una unidad que no existe más que en las imágenes que envían las áreas de comunicación del tricolor.

Lo cierto, es que el convenio de colaboración que hicieron el PRI, PANAL y PVEM tiene fúricos a los aspirantes y suspirantes dizque a la candidatura al gobierno de Morelos por ese partido, porque le entregaron a Nueva Alianza la primera posición al Senado de la República. Y resulta, que la mayoría de los priistas, hicieron creer que iban por la “grande” cuando en realidad buscan una curul en la Cámara alta del Congreso de la Unión.

Entre los que aspiraba a un espacio en el Senado está el desprestigiado, odiado, misógino y saqueador financiero de LIII Legislatura Local, Francisco Moreno Merino, quien incluso, distribuyó su publicidad en redes –por aquello de no gastar- de sus supuestas aspiraciones, sin importarle que le haya ido pésimo por el rechazo social hacia su diminuta figura. Por ese acuerdo del PRI con sus aliados, el responsable de la quiebra financiera por varios cientos de millones de pesos, Paco Moreno, no es feliz.

UN DESASTRE EL REGISTRO DE RODRIGO.- El domingo pasado se llevó a cabo el primer registro de un precandidato –virtual candidato- de partido como fue el del PRD al gobierno de Morelos en la figura de Rodrigo Gayosso Cepeda, quien pese a su entusiasmo el acto dejó mucho que desear. El evento político como tal fue pésimo, estuvo mucho muy mal organizado y tuvo severas deficiencias, desde que inició hasta que concluyó.

Estuvieron todos los integrantes del Comité Directivo Estatal; los diputados locales perredistas, algunos alcaldes, síndicos, regidores, y casi todos aspiran a otras posiciones electorales y juntos, con un personaje que aspira a suceder al gobernador Graco Ramírez los próximos seis años, no reunieron acaso mil 500 personas aproximadamente en su registro. Adentro de las instalaciones casi fue un caos de tan pequeño que está el lugar, y al salir, la situación era peor. Instalaron un micro templete de escasos centímetros frente a lo ancho de la calle y la gente, escasa por cierto, lanzaba tímidas porras. Los invitados especiales no alcanzaron a incorporarse al espacio que mal adecuaron para su acto principal.

Sólo habló el precandidato. No tocó temas relacionados con la grave inseguridad, el desempleo, ni la corrupción que tiene ubicado a Morelos en el cuarto lugar del país. Una vez concluido el acto, literalmente se vació la calle y se quedó el precandidato con unos cuantos militantes tomándose fotos y selfies… A escasos metros, la diputada y presidenta estatal del CDE del PRD, Hortencia Figuera Peralta, quien se mantiene en ambos cargos sin importar violar el Artículo 111 de los estatutos del sol azteca. Y aun lado, el próximo magistrado, el todavía funcionario del gobierno de Graco, Roberto Soto Castor.

Al final, hicieron una comida donde estuvieron alrededor de dos mil personas. Ahí, volvieron a fallar los asesores de imagen, comunicación y demás. El maestro de ceremonias invitó a los presentes que estaban sentados a pasar a servirse “sus sagrados alimentos” y cuando la fila era interminable de ambos lados, se les pidió que siempre no. Pidió a los meseros que pararan el servicio y los conminaron a que regresaran a sus lugares, porque dentro del programa tenían contemplado que el precandidato hablaría. Antes. Negaron la entrada a los representantes de los medios de comunicación por parte del organizador y al final autorizaron su ingreso.

SE FUE MIGUEL ENRIQUE LUCIA ESPEJO DE MORENA.- Con la solicitud de licencia que hizo al senado de la República, Rabindranath Salazar Solorio para dedicarse de lleno a su precampaña al gobierno de Morelos por los partidos de Movimiento de Regeneración Nacional, Encuentro Social y Partido del Trabajo, en automático tomará protesta su suplente: Miguel Enrique Lucia Espejo.

Esta situación obligó a Miguel Lucia a separarse del cargo de presidente del Comité Directivo Municipal de MORENA y en su lugar, estatutariamente tomó protesta como nuevo mandamás del partido de AMLO el secretario general, Gerardo Ernesto Albarrán Cruz.

Al igual que el PRD, en MORENA no pueden tener un cargo directivo, por lo tanto, se vio en la necesidad de renunciar al cargo de presidente y será en los siguientes días, cuando estará tomando protesta como senador.

BUSCARÁ BOLAÑOS CUERNAVACA Y CABALLERO AL ESTADO.- Sin haber quedado claro la supuesta malversación de recursos por más de 200 millones de pesos cuando fue secretario de salud en el gobierno de Marco Adame Castillo, como lo acusó Rodrigo Gayosso Cepeda, cuando era presidente del PRD, el diputado Víctor Caballero Solano, solicitó licencia tras votar la privatización del alumbrado público y se prepara para convertirse en el candidato del PAN y Movimiento Ciudadano al gobierno de Morelos en sustitución de Javier Bolaños Aguilar. En tanto que el legislador federal, estaría catafixiándo esa posición por la candidatura a la alcaldía de Cuernavaca, que de concretarse dejaría en el camino a Óscar Cano Mondragón y Betito Mujica, quienes se sentían ya como los únicos para esa posición. En gran medida, Marco Adame Castillo, ex gobernador panista desde el CEN es quien los está impulsando para incorporar a su hijo Juan Pablo Adame Alemán a una diputación local por la vía plurinominal.

 

MORELOS, TERCER LUGAR EN CORRUPCIÓN.- Sin lugar a dudas todos los candidatos del PRD tendrán con Graco Ramírez Garrido Abreu una sombra mucho muy pesada, en gran medida por los abusos, excesos, por tener un gobierno financieramente quebrado, endeudado por varias generaciones, con un grave desempleo, una terrible inseguridad y una administración plagada de corrupción.

Y para muestra, basta un botón. Los empresarios en México perciben que la corrupción se esconde detrás de cada trámite gubernamental engorroso, y más porque 561 de cada 10 mil empresas en México -micros, pequeñas, medianas o grandes- han sido víctimas de un acto de corrupción al realizar algún trámite en 2016, según datos de la Encuesta Nacional de Calidad Regulatoria e Impacto Gubernamental en Empresas publicada por el INEGI.

Quintana Roo, es el estado que tiene la tasa más alta de empresas que fueron víctimas de corrupción: 2 mil 77 de cada 10 mil han experimentado esta situación. Le siguen Tlaxcala, y después está tristemente el estado de Morelos, con una tasa de 1,835 empresas víctimas de corrupción por cada 10 mil. El 84% de los empresarios morelenses calificó los actos de corrupción como frecuentes y calcularon su costo entre mil 500 y 3 mil 400 pesos.

Le siguen Estado de México, Puebla, Nayarit y la CDMX, entre otras.

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