A partir de hoy viene la contaminación visual y auditiva de propaganda electoral, debido a que inician con mayor formalidad las precampañas de los procesos electorales.
Son tiempos de promesas, de discursos, de la negación de hechos y el olvido de acciones que algunos hicieron desde el cargo que ostentaron, de los saludos del que antes cuando caminó por la vía pública lo hizo con soberbia.
Es el momento de la mentira, del falso compromiso, de aumentar el trabajo de los notarios y hasta de la ganancia para los que realmente viven en la pobreza y extrema pobreza, porque ahora les llegaran las despensas y tendrán recursos económicos de más, con tal de llegar a los mítines de quien desconocen.
Vienen las fotos del candidato cargando al niño, abrazando a la abuelita, saludando hasta al perro callejero de la esquina, al que también le prometen tendrá casa-hogar y sustento para que deje de pasar penurias.
Pero la mayoría de los que lleguen a las concentraciones públicas lo harán en sus grandes y lujosas camionetas, las que ahora manejarán ellos y forman parte del uniforme del “triunfador”.
Ahora los que antes peleaban van de la mano en alianza con sus oponentes, porque aseguran que traen el mejor programa de gobierno para disminuir la pobreza, bajar el costo de las gasolinas y combustibles, incluso ofrecer transporte gratuito hasta para los felinos.
Sin embargo, es el momento de cuanto pinole pueden comer sin que se les seque la boca a quienes sean los abanderados de un partido político, o bien lo hagan de manera independiente.
Para salir al concurso de los cargos de elección popular salen las alianzas y candidaturas comunes entre partidos políticos, que impulsarán un candidato aun y cuando carezca de una filosofía política o desconocimiento de la administración pública.
Hoy, ya definidos los convenios firmados ante la autoridad electoral, en Morelos los partidos que salen coaligados son el de la Revolución Democrática con el Socialdemócrata, de igual manera figura el Partido Revolucionario Instiutucional con el de Nueva Alianza.
También en alianza están Acción Nacional y Movimiento Ciudadano, así como una coalición más es la del Movimiento de Regeneración Nacional, con Encuentro Social y Partido del Trabajo.
Los partidos con registro que tendrán que sacar sus propios candidatos son el Verde Ecologista de Morelos y el Humanista, por decisión personal de sus dirigentes, los diputados locales Javier Estrada González y Jesús Escamilla Casarrubias.
Llegaron los tiempos electorales a Morelos y con ello también las peticiones de licencia de algunos diputados locales, federales, Senadores, presidentes municipales y también la separación del cargo de servidores públicos.
Hay los momentos de reelección en algunos casos de alcaldes y legisladores locales, quienes para ello deberán pasar por el escrutinio de los votantes, que han cuestionado su labor como autoridad.
Vendrán también las campañas negras entre los que aspiran un cargo de elección popular, quienes utilizarán todo tipo de espacios para desprestigiar al contendiente como fue hace tres y seis años.
Las redes sociales estarán saturadas de propaganda electoral, como también de “analistas políticos”, o bien de “expertos” y conocedores del ámbito electoral que solamente gustan dar una opinión personal.
Ahora hasta los presentadores de programas de espectáculos darán su análisis sobre equis o zeta candidato, sin tener idea de qué o de quién hacen la publicidad sugerida por el productor.
Saldrán nuevas publicaciones, presuntos debates y hasta programas especiales en la televisión, en donde estarán “moderados” por quienes “crean opinión” en los medios de comunicación del país.
Son tiempos electorales, los que antes la sociedad esperaba para que vinieran los cambios requeridos, pero ahora hay un hartazgo hacia los partidos políticos y sus militantes porque como gobierno han defraudado.
Y es por ello que las viejas campañas de las grandes concentraciones ya no servirán para definir a un ganador de una contienda electoral, porque luego a pesar de llenar plazas suelen ocupar el cuarto lugar en la obtención de la confianza ciudadana.
También en los medios de comunicación habrá que cambiar las formas de informar sobre las campañas de quienes aspiran a un cargo de elección popular, porque también la crítica social está hacia las empresas editoriales