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OBSERVADOR POLÍTICO

Las políticas erróneas en materia de seguridad y empleo, así como los conflictos suscitados en casi todas las áreas pero muy en particular  en el transporte, han provocado inconformidad entre un importante sector de la población que incluso, llega al odio en contra del gobernador Graco Luis Ramírez, por lo cínico que ha demostrado ser al viajar constantemente a varios estados del país, gastando recursos y hacer campaña sin importarle la interminable lista de  asesinatos que diariamente se registran en Morelos.

LA CAMPAÑA DE GRACO.- Las marchas de casi todos los días, los crímenes cometidos en diversos puntos de la entidad, los delitos en todas sus modalidades como el secuestro, extorsión, derecho de piso y demás poco le importan a nuestro gobernador Graco Luis, es más, ni un sólo tuit difundió en su cuenta. Como tampoco merecieron siquiera algún comentario la muerte del reconocido abogado Rodolfo García Aragón; mucho menos la manifestación de los profesionistas del derecho quienes han mostrado su rechazo por tantas ejecuciones contra su gremio. Un dato, sólo durante la administración de izquierdas,  en poco menos de cuatro años se han registrado 15 asesinatos contra igual número de litigantes y en la mayoría de los casos, lamentablemente lo que ha prevalecido es como en la mayoría de los crímenes, la impunidad.

Y mientras la sangre corre por las diferentes calles, colonias y municipios de Morelos, el titular del Ejecutivo, feliz, bien acompañado, gastando a placer, visitando la mayoría de los estados de la república donde habrá elecciones este año, apoyando a los candidatos de la izquierda. Haciendo declaraciones que son incongruentes con la política que implementa donde gobierna a partir del finales del 2012.

Un ejemplo de ello, fue la visita del pasado domingo en Salina Cruz, Oaxaca, dónde afirmó que la izquierda convoca a un gobierno de unidad: “México necesita de un gobierno de unidad nacional donde estén integrados todos los sectores de la sociedad”, señaló Graco Luis Ramírez, sin importar que Morelos esté sumido en la inseguridad y los frentes que abrió sigan ampliándose cada vez más ante su indiferencia.

 

VOTAR POR GRACO ES VOTAR POR EL PRD.- Para nadie es un secreto que todos los candidatos que compitieron en el pasado proceso electoral del 2015 en Morelos y que tenían afinidad al gobernador perdieron. Ahí están los casos de Jorge Messeguer Guillén, quien participó por la alcaldía de Cuernavaca; Adriana Díaz Contreras, buscó ser diputada y fracasó. El caso de Teresa Domínguez, quien también quiso alcanzar un escaño en San Lázaro y se quedó con las ganas. Y con ellos, podemos enumerar a muchos más. La gente les dio la espalda a los candidatos del gobernador, mostró su rechazo y repudio. Por tanto, la situación para el proceso electoral del 2018 no será muy distinto en razón de que hoy en día, están más que conocidos todos aquellos que pese a la grave situación por la que atraviesa el estado, ellos siguen colocando su escudo protector y afirmando que las cosas van bien y mucho mejor que en administraciones de panistas y perredistas.

Quizá si la gente de Oaxaca y otros estados conocieran a Graco Luis, en lugar de ir a respaldar y fortalecer a sus candidatos de izquierda, les estaría dando el beso en la mejilla ante una eventual derrota que pudiera darse por el rechazo que ha logrado acumular en menos de cuatro años, y que se ha acrecentado con su ilusión de competir por la candidatura presidencial, que no es más que una distracción para lograr lo que tanto le gusta y anhela ser: legislador y tener fuero ante tantas tropelías que ha cometido. Por ello, una candidatura plurinominal al Senado de la República para estar allá seis años sin ser molestado por la Ley, sería uno de los objetivos que tiene en mente el oriundo de Tabasco.

INCONFORMIDAD CONTRA LA DIRIGENCIA PERREDISTA.- Las preseas que se otorgaron y el reconocimiento a importantes perredistas ya desaparecidos -físicamente- como Gisela Mota e Ignacio Suárez Huape, así como José Luis Correa, siguen siendo tema para los militantes del Partido de la Revolución Democrática.

Y es que el dirigente Rodrigo Gayosso Cepeda, no sólo les robó la idea de instituir estas preseas a los verdaderos autores intelectuales sino que además, no fueron invitados y mucho menos reconocidos. Bien ahora, le volvieron hacer llegar otro documento en el que le solicitan  que “en relación a la presea José Luis Correa que el Comité Directivo Estatal tuvo a bien instituir en la sesión  ordinaria del 5 de mayo del presente. Un grupo de militantes estamos interesados en participar en el jurado calificador, con el propósito de sumarnos a los trabajos que habrá de realizar el Comité Organizador para otorgar dicha distinción al ciudadano, militante o simpatizante que reúna los requisitos expedidos en la convocatoria y que así lo determine el jurado”. El documento fue firmado por Carlos A. Galicia Pineda.

Lo que se sabe, es que las preseas que fueron entregadas recientemente con el nombre de estos  extintos perredistas, se dieron sin ninguna consulta sino al libre albedrio del líder solaztequista, lo que provocó inconformidad entre los militantes porque sólo designaron a las personas para entregárselas sin siquiera algunos, tener méritos como para haber sido favorecidos de una manera poco democrática.

QUE VOLVERÁ A GANAR EL PRD EN EL 2018.- Para Guadalupe Acosta Naranjo y Jorge Messeguer, el PRD pese a la crisis y problemas políticos y sociales que enfrenta serán insuficientes para detener el triunfo de sus candidatos del PRD al gobierno de Morelos en el 2018. Ambos, están más que seguros de que así será, de retener por segunda ocasión la titular del Ejecutivo que ganó Graco en el 2018. Para ello, están ya trabajando y haciendo campaña desde ahora. Messeguer, quien acudió el sábado a Jiutepec, habló de que este municipio será la capital de los Galileos pero también de la Movilidad y Transporte, por aquello de que se llevó para allá las oficinas que por renta se pagarán tres millones de pesos. Sin embargo, en su discurso, aclaró que no llegó al evento como funcionario sino como un orgulloso perredista.  Y mientras los del PRD andan desatados en campaña, los demás partidos están lentos, aún acomodándose de los cargos y posiciones que alcanzaron recientemente, cómo si todavía no les cae el veinte.

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