Por su presunta colusión con el crimen organizado al cobrar cuotas a comerciantes, autoridades federales investigan en la frontera norte a 10 patentes aduanales dedicadas a trámites de importación temporal de mercancías.
La mayoría de las investigadas tiene su sede en Chiapas, pero operan en la frontera de Tamaulipas a través de terceros, especialmente en Matamoros.
Ahí dan servicios a comerciantes “transmigrantes”, quienes trasladan desde EU vehículos usados y mercancías, como enseres domésticos de segunda mano, Centroamérica.
Como publicó Grupo Reforma el pasado 20 de noviembre, el modo de operar de algunas de estas agencias aduanales es cobrar los trámites legales por importación de mercancías, y, también, una cuota adicional para el crimen organizado, que es de 300 dólares (unos 5 mil 700 pesos).