El 1 de febrero de 1988, esta columna fue publicada por primera vez en El Financiero. Hace exactamente 30 años.

El país y el mundo han cambiado radicalmente desde entonces.

Quienes hoy son protagonistas de la escena pública mexicana, ni imaginaban en ese momento lo que habrían de vivir.

Por ejemplo, el precandidato presidencial de la coalición, “Por México al Frente”, Ricardo Anaya, estudiaba la primaria en la ciudad de Querétaro.

José Antonio Meade, precandidato de “Todos por México”, estudiaba su licenciatura en Economía en el ITAM y la de Derecho en la UNAM.

Y, quien encabeza las encuestas hoy, Andrés Manuel López Obrador, tenía ya varios años como director de promoción del Instituto Nacional del Consumidor, bajo las órdenes de Clara Júsidman, luego de haber salido de Tabasco, tras ser destituido de la presidencia estatal del PRI.

El presidente Enrique Peña estudiaba entonces Derecho en la Universidad Panamericana, en la Ciudad de México.

La nota principal de El Financiero hace 30 años, decía: “Adelgazará aún más el Gobierno”, aludiendo a la declaración hecha en Davos por el titular de la entonces Secofi, Héctor Hernández.

En esa portada, se informaba que el ‘dólar libre’ (pues había también dólar controlado) se cotizaba en los bancos a 2 mil 270 pesos. La tasa de Cetes a 28 días en esa semana marcaba la hoy inconcebible cifra de 152.88 por ciento y la inflación anual en el mes de enero había concluido en 176.8 por ciento.

Una nota en la página 60 de aquella edición, preludiaba el futuro. Su titular decía: “Narcoeconomía, amenaza para la estabilidad de los gobiernos”.

Vivíamos entonces la era del Pacto de Solidaridad Económica, que congeló precios y salarios, como recurso para detener la violenta inflación.

Por otra parte, apenas tres meses y medio antes, se había producido el gran crack de las bolsas del mundo, que en México condujo a una caída de 16.5 por ciento en el Índice de Precios y Cotizaciones sólo el lunes 19 de octubre de 1987.

En la política, la Corriente Democrática ya había roto con el PRI unos meses antes y Cuauhtémoc Cárdenas ya figuraba entonces como candidato del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM) a la Presidencia de la República.

El sistema político mexicano estaba por recibir la sacudida más grande en muchas décadas, durante la elección de julio de 1988.

Los últimos años del gobierno de Miguel de la Madrid comenzaron el largo proceso de reformas que aún vivimos. Empezaba entonces la privatización de empresas estatales.

En la página 20 de la edición de El Financiero de aquel primer lunes de febrero, se publicó por primera vez Coordenadas, la columna firmada por quien esto escribe.

Impulsado en el trabajo periodístico por Rogelio Cárdenas Sarmiento, entonces director general de este diario, comencé a escribir textos en estas páginas desde 1984. En 1985 formé parte del Área de Análisis de El Financiero, y en 1986 fui designado como su Coordinador.

A partir de 1990, Coordenadas empezó a publicarse también en El Norte de Monterrey, donde permaneció hasta enero de 2013. Entre 1993 y esa fecha, fue publicada en Reforma, en la Ciudad de México y luego en otros diarios del país.

El 29 de enero de 2013, Coordenadas inició una nueva era, publicándose nuevamente en El Financiero, presidido por Manuel Arroyo, quien lo ha convertido en el sistema multimedia de información líder en su campo en México, afianzado en la era digital.

El autor de esta columna ha tenido el privilegio de ser testigo y cronista de cambios que redefinieron a la economía y a la sociedad mexicanas a lo largo de tres décadas.

Cada texto encierra el intento de reflexionar sobre algún aspecto de nuestra realidad, aportando información y no exclusivamente opinión.

En muchas ocasiones, seguramente han existido errores o insuficiencias. En ninguna, mala fe.

El autor espera que este espacio siga sirviendo por mucho tiempo a sus lectores, que son su razón de existir.

1 de febrero de 1988. El país vivía en plena hiperinflación, pero con precios y salarios congelados por el Pacto, cuando empezó a publicarse Coordenadas. El sistema político comenzaba a resquebrajarse.