TERTULIA POLÍTICA

 

 

Con su registro oficial como (pre) candidato de los partidos Morena-PES-PT, la tarde noche de ayer, Cuauhtémoc Blanco Bravo, se embolsó la mitad de la gubernatura; la otra mitad la recogerá el domingo 1 de julio, el día en que los morelenses participarán en la jornada comicial y, de acuerdo a todos los pronósticos, el futbolista ganará por una amplísima ventaja.

        Y es que de acuerdo a lo planteado por prestigiados encuestadores, como Roy Campos, titular de Consulta Mitofsky, el todavía presidente municipal de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco, sólo que no quiera no gana; podría perder la elección, sólo que no participe.

        Lo anterior, lo saben perfectamente los dirigentes nacionales de los diferentes partidos políticos, como también en la entidad, sus presidentes y sus candidatos, de ahí que las cosas se alinean, se acomodan, se compran y se venden, todo para favorecer al señor Rodrigo Gayosso, ese iluso sujeto que cree que la elección se ganará a billetazos y cuya única cualidad, es ser profundamente ladrón, altísimamente pendejo y sobradamente repudiado.

        Con todo y la operación de Graco Ramírez, para concretar una alianza amorfa, una coalición que dividió muchísimo, cuyas sumas restaron, porque también pisoteó derechos y méritos partidistas, el señor Grayosso, ese de los lloriqueos al hombro de jovencitos fortachones que tiene en nómina, vio hoy cómo se empezaron a sellar los sólidos remaches de su ataúd político.

        El registro oficial de Blanco Bravo como (pre) candidato a la gubernatura, es el anuncio de la derrota del candidato oficial, Rodrigo Gayosso, como también de quienes serán su coro de vanidades, el priísta Jorge Armando Meade Ocaranza, a su servicio hace años; el panista Víctor Manuel Caballero Solano, enviado para perder y quien, por cierto, bonachón como es, escurre en nervios cuando se le cuestiona sobre asuntos que incomoden al delicado perredista.

En mi opinión, el tema del ex rector Alejandro Vera Jiménez, que se registrará, según ha dicho, por el Partido Humanista, no es más que una intención adicional y oficiosa a favor de Rodrigo Gayosso, con el propósito final de meter a María Elena Ávila Guerrero, su esposa, como diputada local.

Un problema adicional para el señor Gayosso, se llama Fidel Demédicis Hidalgo quien, a pesar de ser un viejo luchador social, formado en los verdaderos movimientos de izquierda en Morelos y ser un influyente perredista, va como candidato independiente. A Fidel se le atribuye un cultivo de cuando menos 50 mil votos, de los campos perredistas, es decir de donde ha regado costales de billetes el hijastro de Graco Ramírez.

Más, el ya seguro candidato a la gubernatura por la fórmula Morena-PES-PT, Cuauhtémoc Blanco va a sortear sin problema, uno a uno los bloqueos legales que le vayan poniendo por allí, leguleyos al servicio de Rodrigo, como también a favorecerse con el golpeteo pendejo de sus plumas a sueldo, abanderadas por el pasquín de quinta, denominado Morelos Habla.

Las relaciones y el servilismo con que actuarán los candidatos al gobierno del Estado, Jorge Meade y Víctor Caballero en cuanto arranquen campañas, la acreditará la embestida rabiosa y perruna de ambos en contra de Cuauhtémoc y, obvio, de Fidel Dempedicis.

El calendario electoral avanza y, como lo advirtió hoy Cuauhtémoc en su registro ante el PES: estos cabrones, están temblando.